Dream Clover (Black Clover fanfic) [Hiatus x corrección]

Capítulo 29. El templo bajo el agua

Por medio del hechizo de Noelle, todos los Black Bulls y Ziya pudieron ser sumergidos en el océano. La esfera de agua contenía espacio y oxígeno. Todos estaban impresionados.

—¡Wow! —Todos dijeron al momento de adentrarse en lo más profundo del océano. Las criaturas que habitaban en el fondo lucían impresionantes para algunos y delicioso para otro. No tardaron mucho en poder encontrarse con su primer problema, el cual era un remolino hecho de magia. Tal como había leído Ziya en sus libros, el Templo bajo el agua contenía una alta seguridad ya que, por alguna razón inexplicable, ellos habían decidido aislarse.

Yami no tardó en dar la siguiente orden. Le había pedido a Asta que con su anti magia fuera en contra de ese remolino no importando si él sabía nadar o no debido a que Yami lo lanzaría sin misericordia. Gracias a Asta, la esfera de agua de Noelle logró llegar hasta su destino donde estaba el templo bajo el agua. En el escenario se podía contemplar varias casas, lo más impresionante para Asta y Ziya era que se podía respirar ahí sin ninguna dificultad. No había agua, había oxígeno puro.

El lugar parecía solitario, lucía como si no hubiera un alma viviendo por ahí, sin embargo, un par de personas apareciendo pasando por el lugar. No tardaron en aparecer más en cuanto descubrieron que aparecieron extranjeros. Todos los Black Bulls comenzaron a ser el centro de atención y Ziya no paraba de sentir curiosidad con respecto a los habitantes. En los libros decían algo de hombres mitad pez, pero no se encontró con nada fuera de lo normal, eran personas con aspecto humano, nada más. Parecían muy amables, comenzaron a expresar su emoción de ver a gente del exterior porque uno comenzó a comentar que habían pasado diez años desde la última vez que vieron a un extranjero llegar a ese lugar. Eso llamó mucho la atención a Ziya, sin embargo, cuando estaba a punto de preguntar sobre aquél extranjero, Yami tomó una posición seria que hizo que algunos aldeanos se sintieran intimidados y otros ofendidos.
—Traiganme al jefe de este templo— finalmente el capitán de los Black Bulls habló

—¿Jefe? Creo que se refiere a el sacerdote supremo— dijo un aldeano imitando el mismo gesto que el de Yami.
No tardaron en señalar el templo que se encontraba en lo alto de unas rocas donde había muchas escaleras por subir. Los caballeros junto con los aldeanos subieron hasta llegar a la gran puerta principal. Los únicos que entraron fueron los extranjeros mientras que los otros se despedían de manera sospechosa sin que ellos escucharan que posiblemente no volverían a salir.

Una vez dentro, los caballeros se percataron de una silueta en medio de la gran sala, pero esa atención fue interrumpida cuando Asta, Ziya y Noelle fueron sorprendidos por un monstruo marino que apareció de la nada y estuvo a punto de comerselo. Aunque definitivamente no había tiempo de defenderse, tres integrantes de los Black Bulls mostraron lo contrario al atacarlo sin piedad por medio de la magia de fuego, electricidad y rayo reflector. Dejando a la bestia carbonizada. Definitivamente Magna, Luck y Gauche eran una bestias.

—Pero que personas tan interesantes llegaron a este lugar— la silueta que habían visto al principio comenzó a revelarse conforme iba hablando —definitivamente va a ser muy divertido jugar con ustedes. ¿Han venido por la piedra mágica, cierto?

Aquella silueta reveló a un anciano de peinado alto y bigote delgado con una sonrisa muy interesante. Él era el sacerdote supremo, líder del lugar y protector de la piedra mágica que los caballeros llegaron a buscar. Al ser mencionada por parte del anciano, Ziya tuvo la teoría de que posiblemente no eran los primeros en ir en busca de dicha piedra.

—¿A qué se refiere con jugar?— dijo Magna de forma agresiva— No tenemos tiempo que perder con juegos tan ridículos.
—¡Oh! Pero no es cualquier juego. Si es que ustedes llegan a ganar les otorgaré lo que ustedes desean.