Dream Clover (Black Clover fanfic) [Hiatus x corrección]

Capítulo 22. Un Recuerdo Hermoso

Julius recibió las noticias de parte del capitán Nozel. El dolor en su pecho disminuyó solo un poco, pues el saber cómo su hija había guardado tanta preocupación y que su poder se desencadenó de manera incontrolable, le hizo darse cuenta de las pruebas que estaba pasando Ziya. Aunque él fuera el mago emperador, no tenía el control de todo. Quería proteger a su hija de los caprichos del rey, pero mientras más limitaba a Ziya, más angustia le provocaba.   

—Agradezco tu información Nozel— suspiró— te ves exhausto, debes descansar mientras esperamos a que los otros caballeros regresen.

Nozel hizo una reverencia, sin embargo, al momento de dirigirse a la puerta, el caballero Marx llegó de impulso.

— Mi señor, recibimos una señal de emergencia de parte del capitán Yami. Al parecer encontraron a los enemigos que atacaron nuestra capital.

—¿Has hablado con algun capitán que esté disponible?

—Busqué al capitán William, pero no ha regresado. Solo dos han regresado de sus misiones.

Julius miró por la ventana preocupado. Fue entonces cuando Nozel habló.

—Yo iré también.

Un silencio los invadió.

—Acabas de volver de una misión y estas exhausto, ¿estas seguro?— Julius estaba determinado a aceptar un no por respuesta pero Nozel insistió. Minutos después, el capitan de los Silva ya estaba encaminandose junto con los otros dos capitanes; Charlotte Roselei y Jack the Ripper.

Ahora la sala del mago emperador solo contaba con la presencia de Julius y de Marx.

—Marx. No te vayas. Debo hablar contigo— la voz de Julius jamás había sonado tan seria.

Marx cerró la puerta después de dar una reverencia. Sus manos y frente comenzaron a sudar conforme el silencio iba siendo cada vez más largo y la mirada del mago emperador seguía dirigida hacia la inmensa ventana. A lo lejos se podía distinguir el gran craneo del demonio que derrotó el mago emperador hace ya mucho tiempo. La estatua del primer mago emperador que estaba posada en la cima del cráneo no podía verse pero todo aquel que conociera la leyenda sabía que se encontraba ahí. Cuando la luz salvó la oscuridad.

—¿Señor?— Marx no pudo evitarlo más.

—Se lo que hiciste— otra vez el silencio— y también se porqué lo hiciste. Es por eso que no te culpo.

Marx sentía como su garganta se secaba.

—Las ordenes del rey son escenciales para el bien del reino. Pero el impedir que yo haya podido llegar a mi hija solo hizo que me arriesgara a seguir buscando. Probablemente te preguntes porqué siempre estuve fuera... en mis inicios como mago emperador.

Marx ahora no tuvo nada que decir. El mago emperador estaba dispuesto a revelar su secreto aun sin ser obligado. 

La primera vez que Marx vio al mago emperador, él apenas estaba iniciando como caballero mágico. Era un joven aprendiz del ahora difunto concejero Marl, el entrañable amigo de Julius.

—Tú solo eras un niño cuando comenzaste a tener más relación con el castillo. El difunto Marl, antes de ser consejero, antes de ser tu maestro, era mi amigo. Él y yo llegamos a ser caballeros al mismo tiempo y surgimos juntos. Pero como sabes, murió de causas desconocidas hace cinco años y pudiste tomar su lugar. 

—Lo recuerdo— dijo Marx con una mirada de nostalgia— él me enseñó todo lo que se. 

Julis finalmente lo volteó a ver.