CORRE

Lo bueno se vuelve malo...

Capitulo trece:  Lo bueno se vuelve malo.

" Lo puro se ensucia, lo sucio se purifica, lo bueno se vuelve malo, lo malo se vuelve bueno, todo lo que vive muere y todo lo que muere renace."

 
Tome el bate de béisbol con mis dedos he hice un ademán como si estuviera golpeando una pelota que venia hacia mí. Mire a Damon quien no había quitado la expresión seria de su rostro y luego mire al pobre infeliz frente a mí quien aparentaba ser la persona más dura del mundo.

Ya lo veremos.

______ Entonces...¿Qué tal si empiezas a hablar, corderito.? - Mi voz salió tranquila y amenazante a la vez. Damon curvo sus labios en una media sonrisa y cruzo sus brazos mirando al tipo que se hallaba atado frente a ambos.

- ¡No les diré una mierda! - Gritó el hombre frente nuestro, su calva no dejaba de desprender gotas de sudor mientras luchaba por desatarse de las cuerdas que aprisionaban y apretaban sus regordetas muñecas.

- Bien. - Me encogí de hombros. - No es asunto mío pero debo advertirte que esta cosa - Batí el bate entre mis manos.- Puede romper tu cráneo en mil pedazos si se la utiliza con la fuera necesaria y debo aclarar que soy un hombre con bastante fuerza. - Curve mis labios en una sonrisa burlona. - ¿Te gustaría que te lo demuestre?

- ¡Que te den! - Gritó tratando de sonar amenazante. Me cabrearia muchísimo si esta situación no me divirtiera.

- Veamos a quién le dan primero. - Sonreí. Me acerqué a él y bajé mi mirada para mirarlo.- Ahora dime, corderito, ¿para qué diablos buscabas a esa chica en el bar? - Gruñí.

- ¡No sé de qué me hablas!

- Oh, yo creo que si. - Me alejé de él y miré el palo de béisbol que colgaba entre mis dedos, poniendo una expresión pensativa. - Recuerdo perfectamente como la pusiste sobre tu hombro, recuerdo como la manoseaste y sobre todo recuerdo como casi te mato allí mismo. - Apreté mis puños y miré a Damon. Tuve que salir detrás de Blue luego de que él prácticamente me obligara a dejar a ese hombre. - Te hubiese matado esa misma noche, pero necesitaba hacerte algunas preguntas. - Dije con tranquilidad. - Ahora escúpelo. - Espeté amenazante.

- ¡Sólo quería acostarme con ella!

Bastardo.

Mi bate impacto con fuerza corta su hombro derecho. El grandulón frente a mi grito y me maldijo millones de veces.

- ¡Me has roto un brazo! - Chilló horrorizado.

- Te romperé mucho más que eso si no me dices la verdad. - Lo amenace. No era idiota, sabía que no quería a Blue para violarla, quería mucho más que eso. Quería lo que todos estaban buscando. Quería algo que yo desconozco y odio no saber las cosas.

- ¡No sé de qué diablos me hablas! - Grito adolorído.

Mire a Damon y como si este supiera lo que estaba pensando se colocó detrás de aquel hombre y sujeto con fuerza su cabeza mientras mi bate impactaba en su pecho dejándolo sin aliento.

- Será mejor que no me quieras ver la cara, corderito. - Gruñí. Eleve mi bate hasta dejarlo sobre mi hombro y lo mire directo a los ojos. - No he utilizado ni la mitad de mi fuerza, cuando lo haga está cosa romperá cada uno de tus asquerosos huesos. - Le advertí.

- Cabrón... - Murmuró escupiendo sangre. Lo más probable era que tuviera alguna hemorragia interna.

- Corderito. - Eleve mis labios en una sonrisa. Él me miró con desagrado y lanzo un escupitajo hacia mí.