Despedida de soltero.

Capítulo 187: Amanecer.

Sip, no es un simulacro, es un nuevo capítulo.

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En la comisaría de Denver, Sheila apretaba con desesperación la foto de su hijo Ike, su esposo, Gerald, la abrazaba mientras discutía con un policía.

- Ya pusimos anuncios en todos los lugares -gruñó Gerald-, y hasta ahora nadie llamó. 

- Estamos haciendo todo lo que podemos. -Contestó el oficial que los miraba desde su escritorio.

- ¡Deben lanzar un comunicado nacional, Ike no está en Denver! 

- ¡¡Por favor!! -Dijo Sheila entre lágrimas- ¡¡Extraño mucho a mi bebé!!

El policía arqueo las cejas y abrió uno de los cajones de su escritorio, de allí sacó un expediente y comenzó a revisarlo frente a los padres.

- Estuvo revisando algunas incongruencias en su caso, creo que debemos hablar de eso antes de lanzar un comunicado nacional... -Dijo el policía.

- ¿¿Incongruencias?? -Refunfuñó Gerald- ¿¿De qué está hablando?? ¿¿Acaso sabe que yo soy abogado?? 

- Sí, el día de ayer nos encargamos de investigar a fondo su familia con los demás oficiales... 

- ¿¿Qué??

- Se les hará un allanamiento en su casa antes de continuar. 

- ¿¿CÓMO?? -Gritó Sheila- ¿¿Acaso está insinuando que tenemos algo que ver con esto??

- Agh... -El policía se acomodó el cabello-. Lo cierto es que, hay varios puntos que los ponen como sospechosos. Estarán detenidos en la comisaría hasta que termine todo.

- ¡¡MI HIJO ESTÁ DESAPARECIDO!! ¿¿Y USTEDES NOS ESTÁ CULPANDO?? -Gritó Gerald.

- Según el registro Ike es adoptado... 

- ¿¿Y eso que tiene que ver??

- Que ustedes tienen otro hijo, mayor que Ike y biológico, del cual no figuran datos desde que se mudaron aquí a Denver, ¿esto es así?

Ambos se miraron de reojo. Sheila no aguantó mucho y volvió a romper en llanto, Gerald respiró profundo y respondió.

- Sí, tenemos otro hijo. -Dijo Gerald. 

- ¿Qué sucedió con él? -Preguntó el policía. 

- Él... Se fue de casa... 

El policía abrió los ojos.

- ¿A los 16 años? -Preguntó el policía-. Es decir, al igual que Ike... ¿Y no hicieron una denuncia?

- Kyle era una persona muy inteligente, simplemente quiso ser independiente y no nos opusimos a eso... -Dijo Gerald temblando.

- A los 16 años continúa siendo menor, por más que el chico se haya querido emancipar, cosa que cada vez es más común, un juez debería haber declarado esta emancipación... ¿Dónde está la orden de ese juez? 

Sheila dejó caer la foto de Ike, se acercó al policía con una mirada que representaba una desesperación total.

- ¡¡NO ES VERDAD!! -Gritó Sheila.

Su esposo quedó boquiabierto, comenzó a sudar. El policía escuchó atentamente a Sheila.

- Cariño... -Susurró Gerald.

- ¡¡Lo echamos de nuestra casa cuando tenía 16 años!! -Dijo Sheila.

- ¿Lo echaron? -Dijo el policía asombrado.