Despedida de soltero.

Capítulo 10: Podríamos salir algún día.

Craig y Tweek se habían quedado hablando y fumando en ese sillón. Craig sacó otro cigarrilo.

- ¿Cuántos fumas por día? -Dijo Tweek.

- Unos 20, creo -contestó Craig.

- Deberías fumar menos.

- Lo sé, mamá -rió Craig.

Cuando encendió su nuevo cigarrillo, miró la mesa donde antes estaba. De sus amigos vio solo a Damien, que se estaba besando con un empleado.

- ¡No me la creo! -Dijo Craig sacando su celular.

- ¡GHA! ¿Qué vas a hacer? -Dijo Tweek.

- Solo tomar unas fotos... -Dijo Craig.

Tweek vio la situación.

- Oh ese es tu amigo con... ¿Pip?

- ¿Así se llama el chico vestido de ángel?

- Sí, deberías conocerlo, es tan amable -sonrió Tweek-. Demasiado como para estar con ese amigo tuyo...

- Todo el mundo es demasiado amable comparado con Damien -dijo Craig guardando su celular-. Estoy feliz, no esperaba una noche tan interesante.

- ¿Hiciste algo más que hablar conmigo? -Dijo Tweek.

- Estuve viendo como Stan se emborrachaba, Token, el cual desapareció al igual que Kenny, bailaban. Y ahora Damien se besa con un chico. Fue entretenido -Craig miró a Tweek sonriendo-. Pero la parte más divertida fue hablar contigo.

- ¡GHA! ¿De verdad? Oh, eso es mucha presión.

Craig volvió a mirar a Pip y Damien. Estos se levantaban y se iban.

- ¿A donde irán?

- Seguramente alquilaran una habitación -dijo Tweek.

- ¡No jodas! -Rió Craig-. Me burlaré mucho de Damien mañana.

- ¿Te parece gracioso que esté con un chico? -Preguntó Tweek.

- Es divertido solo porque es él -rió Craig- ¿Qué onda con esas habitaciones?

- Bueno están detrás del bar, los empleados vamos allí a bueno ¡GHA! Ofrecer nuestro servicio.

- ¿Hoy fuiste a esas habitaciones? -Dijo Craig.

- Afortunadamente no, prefiero los días donde solo sirvo bebidas y limpio el lugar.

- ¿Irías a una habitación conmigo? -Dijo Craig mirándolo picaramente.

- Si, ese es mi trabajo.

- ¿¿Qué?? -Dijo Craig-. ¿Te pusiste nervioso por derramar un poco de alcohol pero no por esta propuesta?

- Escucho la misma propuesta todas las noches -Tweek se paró.

- ¿A donde vas?

- ¿No vamos a una habitación? -Dijo Tweek.

- Eh, no. Era un chiste.

- ¿De verdad? -Dijo Tweek volviéndose a sentir- ¡GHA! Soy un idiota.

- No -rió Craig-. Muchas veces las personas no de dan cuenta de cuando estoy bromeando.

- Es que dices todo siempre con la misma cara -dijo Tweek.

- Hey, contigo estoy sonriendo más de lo usual.

- Guau debes sonreír poco -rió Tweek.

- Sinceramente, si.

- De todas maneras -dijo Tweek sonrojado-, tienes linda sonrisa ¡GHA!