«¿De que sirve matemáticas en el amor? // Vkook»

☆Capitulo 18☆

Yoongi y Jimin habían quedado en blanco, los ruidos en el departamento habían desaparecido, los dos estaban apoyados contra la pared de la escalera, mirando hacia aquella puerta que parecía la mismísima entrada al infierno.

—Yoongi, tenemos que hacer algo— El chico rubio asintió aún sin caer en la realidad del momento, todo había pasado tan de repente que ni siquiera se daba cuenta que momentos antes había dado su primer beso—¿Vamos a la policía?—

—No lo se Jimin, hay que pensarlo— El moreno suspiró aturdido, no sabía como actuar, nunca había tenido que resolver un problema de ese tamaño, tenía miedo de hacer algo mal, de que cualquier acción que el decidiera hacer terminara en desastre.

En eso, la puerta se abrió, los dos jóvenes se hicieron hacia atrás alejándose de la vista de Hoseok, quien con una mirada fría y los puños a punto de explotar se dirigió al ascensor apurado, cuando el ruido de la reja resonó en el lugar y el ascensor se alejó del piso, ellos pudieron respirar con tranquilidad.

—No puedo creer que esto sea cierto— Los dos se pusieron de pie, sus corazones ya se habían calmado del susto que tenían, Hoseok los hubiera reconocido y eso no hubiera terminado bien y Yoongi no tenía ganas de volver a tocar su rostro con golpes.— Pensaba que Kookie estaba mal— 

Jimin se sentía una basura, todo amigo creería lo que dice su mejor amigo, pero el había dudado de el. Yoongi busco sus ojos, por primera vez tomó fuerzas de algún punto de su cuerpo para llevar sus manos hacia las mejillas de Jimin.

—No debes torturarte por eso Jimin—Sentir las manos de Yoongi posarse de una forma tan delicada en su rostro hizo que se sintiera sobre las nubes, su mirada era cálida y se sentía seguro a pesar de estar infiltrados en aquel lugar, el miedo se fue por un instante y no pudo no desviar la vista a sus labios— Lo importante es que ahora sabemos lo que pasa aquí—

—Gracias Yoongi— En eso, una idea riesgosa llegó a su mente— El no salió con el, ¡podemos ir a verlo!—

Yoongi expandió sus ojos, alarmado por lo que Jimin decía, ¿acaso se había vuelto loco?

—Jimin, no estás pensando las cosas— Cuando cayó en el mundo real, Jimin ya estaba golpeando la puerta—¡Jimin!—

Haciendo oídos sordos a los llamados de Yoongi, Jimin siguió golpeando esperando que Taehyung abriera la puerta.

—¿Hobi?— La voz quebrada de su antiguo amigo llegó a su interior moviendo algo allí, su corazón se hizo pequeñito como si jugaran con el, a pesar de que había reprimido sus momentos con el mayor en algún lugar de su cerebro todos habían vuelto a salir a la luz y si que le dolía escucharlo así—¿Olvidaste algo cariño?— 

Los dos se miraron incrédulos, Hoseok acaba de golpearlo y el le decía "cariño", como si nada hubiera pasado.

—¿Hola?— La puerta se abrió solo unos centímetros, dejando a vista de los chicos solo una mitad de la cabeza de Taehyung—¿Necesitan algo?—

—Tae...— Jimin no pudo reprimir aquel pequeño dolor, las lagrimas empezaron a salir y no podía ocultarlas— S-soy Jimin— La puerta se abrió de golpe y verlo completo hizo que chillara.

Su ojo derecho estaba oculto tras un hematoma, mientras que en su ceja tenía un pequeño parche, labios partidos y un camino de manchas moradas que comenzaban en su cuello y se perdían bajo su camisa, posiblemente chupones.

—¿Qué hacen aquí?— Jimin miró su estado alarmado, su cuerpo temblaba y no parecía tener ganas de verlos— Deberían irse, y-yo estoy algo ocupado— Intentó sonreír, como si todo lo que su cuerpo demostrara no fuera nada.

Jimin ignoró por completo aquella suplica, empujó la puerta y pasó sin permiso, Yoongi lo siguió, al pasar a su lado miró de cerca a Taehyung quien le recorrió un escalofrío al sentir la mirada llena de furia que le dedico, cosa que no era por el, sino por lo que había escuchado minutos atrás.

Tae no tardó mucho en cerrar la puerta, tenía miedo de que Hoseok volviera, de que lo encontrara con ellos, de lo que pasaría luego.

El le había prohibido traer personas hasta que sus golpes sanaran por completo y así nadie sospechara de eso y esta visita era un gran problema, Jimin había sido su amigo, por lo que estaba casi cien por ciento seguro que ahora lo era de Jungkook.

—A pasado mucho tiempo Tae— Se acerco a sus visitas inesperadas, haciéndoles una seña para que se sentaran en el sofá— Pensé que nunca volvería a verte—

Taehyung asintió, aún mostrando esa sonrisa débil, falsa.

Yoongi tuvo tiempo de examinarlo un poco más, dándose cuenta de que llevaba traje, pero su camisa estaba arrugada y la corbata fuera de lugar, había manchas de sangre en su traje gris y su cabello era un lío como si un remolino se hubiera pasado por su cuero cabelludo.

—¿Qué hacen aquí?—Su voz esta vez sonó algo más apagada, con un pequeño titubeo—Y-yo...tuve una caída bastante fuerte si se están preguntando— Señaló sus golpes y su sonrisa fue algo más real, como tratando de engañarlos con ella.

—Si, y yo puedo cambiar esta cara de culo— Jimin lo miró reprochando su comentario— Ya, lo siento, pero siendo sinceros contigo, escuchamos todo desde afuera—Pensaban que Taehyung iba a sorprenderse, pero solo se encogió en su lugar.

—No es nada, el... el solo estaba de mal humor, nada más— Yoongi se puso de pie, los dos se quedaron expectantes de su siguiente acción.

—No puedo creer que le pongas excusas a algo que definitivamente ¡no necesita excusas!— Al levantar la voz Taehyung se asustó y su cuerpo se junto lo suficiente como para dar a entender que pensó que Yoongi iba a golpearlo— Yo no soy como el— Jimin tomó su mano, haciéndole una seña para que se callara y tomara asiento, mientras que el se puso de pie y se acerco al sofá donde Taehyung se encontraba acurrucado y con los ojos cerrados.

—Tae...— Tocó su cabello despacio, al comienzo Taehyung reacciono como era esperado, alejándose, aunque el borde del sillón no se lo permitió más, pero luego abrió sus ojos, y Jimin volvió a quebrarse—Cuando te fuiste a Japón y nunca diste señales de vida, yo de verdad empecé a odiarte, no podía creer que ni siquiera habías sido capaz de mandar una carta— Las manos de Jimin se enlazaron con las de Tae tratando de darle un poco de seguridad, para que alejara esa tensión de su cuerpo— Pero verte así, yo no puedo verte así Taehyung, si hubieras visto como se encontraba Jungkook cuando me contó, el realmente se preocupa por ti Tae, el lloró por ti todos estos años, en ningún momento dejó de pensarte, siempre tuvo las esperanzas de que tu te ibas a poner en contacto con el, y yo trate de destruir esas ilusiones pero el siguió confiando en ti y lo hace aún hasta hoy, por eso yo te detestaba mucho— Observó sus manos bajo su agarre, temblaban— Pero nadie se merece esto Taehyung y debes cambiar esto, no puedes proteger a tu agresor—

—Ustedes no saben como es el, no lo conocen, nunca me dejará en paz—Taehyung empezó a llorar sorprendiendo al menor, ya que el siempre había sido el que se encargaba de ayudarlos, de calmar sus llantos— El me sacó de mi casa, el me ayudó a que mis padres me dejaran volver aquí, le debo mucho—

—El que le debas mucho no quiere decir que el puede tratarte como se le da la gana, y menos así, Taehyung esto esta mal—

—Y haremos lo posible para ayudarte—

  ★·.·'¯'·.·★·.·'¯'·.· ★·.·'¯'·.·★