45. San Tagliafico.

1.3K 103 114
                                    

Capítulo 45.

Narra Kichan.

Salté de la cama con todas mis fuerzas, golpeando sin querer a Paulo y despertándolo. Increíblemente el tercero en discordia ni se da por aludido.

Boludo! Arriba! -muevo sus piernas-

Me tiro al piso de golpe para buscar mi remera y ponérmela apurado. Paulo abre los ojos, me mira y se vuelve a acomodar.

Boludo! Levantate! -lo agarro del pie y estiro su pierna derecha-

Se queja y cae al piso. Se limpia el rostro y al fin empieza a entender la situación.

Que hace Nico en tu habitación? -susurro-
No sé, no sé... Y vos? Y Lo Celso dónde está? -dice mirando hacia la otra cama-
No sé, recién me despierto y lo veo a éste ahí -me siento en la cama de Gio-
Más respeto con tus mayores -dice Tagliafico levantándose de la cama-

Casi me trago la lengua del susto.

Nico... Qué haces acá? -apenas hablo-
Y vos qué haces acá? Ésta no es tu habitación -retruca tocándose la espalda- Yo me dormí, después de acompañarlos... -se toca la nuca-

Miro a Paulo con todo el terror del mundo y nadie sabe qué decir.

Vos te diste vuelta como una media -me apunta- Y vos también, entonces los acompañé a acostarse antes de que hicieran cagada -camina acomodándose la ropa-

Lo miro todavía con expresión de preocupación en mi cara.

Qué hice? Mejor dicho, qué dije? -me tiembla la voz-

Me mira con total seriedad y niega.

Nada que tenga importancia -dice caminando hasta la puerta-

Miro a Paulo que solo mantiene su vista hacia el piso, casi tan preocupado como yo.

Ah, de acá no se puede salir si no es en grupo... Así que yo organizo la salida con los pibes, y a mi señal ustedes aprovechan y se pegan la escapada -dice sosteniendo el picaporte-
Qué? Escapada a dónde? -consulta Paulo-
Qué te dije anoche? -esbozo asustado- Son cosas de borrachos -intento arreglarla-

Lo miro fijamente y Nico solo se limita a dar media sonrisa.

Yo no sé nada, no se preocupen... Solo ayudo a dos amigos -sale-

Voy rápido hasta ahí y lo detengo.

Viejo! -lo freno-

Estaba por meter alguna excusa, pero la expresión de su cara me confirma que iba a ser en vano. Y más allá de eso, algo en mí me dijo que podía ser sincero con él.

Gr... Gracias. Por guardar el secreto -digo con total nerviosismo-

Asiente y su rostro pensativo me causa intriga.

Te puedo decir algo? -me sorprende-

Asiento.

Yo no lo llamaría secreto... Lo llamaría vivir, directamente -me da una palmada en el hombro y se va-

La sonrisa final antes de darse la vuelta me transmitió mucha confianza. No sé por qué siento que no corremos peligro con él sabiendo lo nuestro. Vuelvo a la habitación y Paulo está acomodando las camas.

Vos te acordás de algo? -cierro la puerta-
Si, la parte en la que casi subís a la barra a bailar si -se sienta en la mesita de luz- Después jodimos tranqui, y nada más... Vos decís que abrimos la boca frente a él? -dice preocupado-
Si, por algo sabe que nos queremos escapar hoy, y conociéndonos le contamos todo... La puta madre -me siento en la cama-
Bueno, ya está... Dejémoslo así, lo importante es que nos va a ayudar, o no? -se sienta junto a mi-
Si, y algo me dice que no es buchón así que por ahí sale algo positivo de todo ésto, mejor me voy... Más tarde nos vemos -le doy un beso rápido y salgo-

Desde que te ví - Paulo Dybala & Cristian Pavón.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora