13. Te tomo la palabra.

2K 160 97
                                    

Capítulo 13.

Narra Pavon.

Entreabro los ojos. La luz tenue del lugar me encandila. Hasta que veo mejor y un rostro se interpone en el reflejo. Giro la cabeza y me doy cuenta de la posición en la que estoy. Acostado una vez más en sus piernas, mientras él duerme. Mamá querida, lo que le debe doler el cuello. Qué posición tan incomoda, y sin embargo dejó que yo me acomode en su regazo. Me levanto intentando no despertarlo, o al menos no de forma brusca.

Ey... ey -lo muevo-

Emite unos sonidos raros. Supongo que son quejidos.

Despertate. Nos quedamos dormidos... -miro mi reloj-

Casi me infarto. Son las 6 de la mañana. En dos horas tenemos que estar arriba.

PAULO LA PUTA MADRE -levanto la voz- Nos dormimos! Se hizo re tarde! Cómo dejaste que me duerma así?

Se despierta.

Pará la moto! No me empujes así -intenta acomodarse en el piso- Que me viste cara de reloj cu-cú o que carajo -me da la espalda-

Suspiro enojado.

Levántate! Anda a tu cama! Dale antes de que alguien se despierte! -lo muevo-

Después de varios intentos, me hace caso. Se comporta como un nene. Y yo disfruto. Salimos de ahí y vamos por el ascensor, ni en chiste subimos tantos escalones con el sueño que cargamos. Ya dentro de él , me miro fijo al espejo.

Que irresponsables de mierda... Vamos a estar muertos de sueño en el entrenamiento -me reprocho-
Bueno cheee... Aflojá, no seas tan estricto. -bosteza- Aaam... Nuestra primera noche juntos, no fué romántica? -sonríe apoyándose en el vidrio-

Se interpone en mi reflejo y quedamos frente a frente.

Si, romantiquisima... Lo único que me acuerdo es que tenía poderes o algo así.
Con razón abrías tanto la boca, pero no me imaginé que soñabas eso... Pensé que soñabas conmigo. -ríe-
Con vos? Por qué? -no capto-

Me mira sonriendo con cara... rara.

Que inocencia Kichan... O te hacés el inocente, no sé. -lanza con tono burlón-

Unos segundos después termino de entender a que se refería.

-estiro mi pierna derecha y pateo- Desubicate tranquilo dale... Todo es sexo para vos?
Bue, me vas a decir que para vos no? La flor de la edad, este encierro, los nervios no sé... Son muchas cosas para esta débil carne joven...
Y bueno anda, consolate solo. -río-
Naa, no es lo mismo... Pero estoy a punto -apoya sus manos en el vidrio-

Niego. Me parece divertida la situación. Aunque me incomode, claro. Pero le resto importancia.

Che, ya casi llegamos... No te vas a despedir? -deja de apoyarse-

Capté el mensaje. Me acerco y lo beso. Lo despeino un poco sin separarme hasta que llegamos. Caminamos unos metros y su habitación queda antes que la mía, por lo que sigo de largo.

Tan tarde y sola... La acompaño señorita? -habla bajo-
Anda a dormir boludo, rajá de acá -lo empujo-

Camino cabizbajo aguantando la risa y escucho que susurra.

Te quiero! Soñá conmigo y mañana me contas -se mete a su habitación.

Ni deja que le responda. Él sabe que yo también lo quiero, ni necesita que yo se lo repita. Y a mí me hace tan bien que sea así de atento. Llego a destino y entro, siendo lo más sigiloso posible.
Ya de día, unas pocas horas después de separarnos, nos volvemos a ver en el desayuno. Lo veo bostezar un par de veces y me río internamente. Francamente agradezco tenerlo porque me cambia el humor. En algunos momentos me da miradas cómplices, o guiños absurdos que me recuerdan que tenemos algo especial. Y que solo él y yo sabemos.
Por la mañana, en el almuerzo y en la siesta no pasó nada digno de emoción. No lo vi mucho. Pero en el entrenamiento de la tarde, tuvimos un par de acercamientos. Lastimosamente no nos toca hacer nada juntos, para mi suerte. Me consuelo con verlo de lejos. Pasa muy rápido todo, o mi cansancio no me deja orientar sobre el paso del tiempo. El día se fué volando. Camino tomando agua hasta donde están nuestras cosas, y me tocan el hombro. Me doy la vuelta y nada. Cuando me vuelvo, de nuevo él. Quien más podía ser?

Qué onda papá? -toma un sorbo de agua-
Nada mamá, cansado -tomo también- Vos qué onda?
Mamá y papá tienen que ir a procrear, que decís? -ríe-
Papá va a tramitar el divorcio si seguimos así -retruco-
Andá, si seguro queres renovar los votos... Mirá! Llévame... Al infinito y más allá -se sienta en el carrito-

De dónde mierda saca toda esa energía? Está con todas las pilas y yo que me desmayo del sueño. En ese sentido, soy un flojito. Bueno, en ese y en un par de sentidos más. Lo miro como un nene con juguete nuevo. Y ya que estamos, juguemos. Subo en el asiento del conductor.

A donde quiere ir señor? -digo mirando al frente-
Lejos, lejos... Donde estemos solos vos y yo -se acomoda-
Buah que romántico... Me lo paró, el taxi, me lo paró pí pí -intento cantar-
Uh mejor cállate y acelerá -me golpea el hombro- Un tema de éste siglo no podías cantar? -se ríe-

Enciendo motores y llegan Nico Tagliafico y Ansa. Por suerte no escucharon nada de lo que hablamos, así que no me molesta para nada que se sumen. Los cuatro no damos más, por eso preferimos el móvil. Piso el acelerador y avanzamos.
Efectivamente el día se fue volando. Ya en mi cama aprovecho y nos mensajeamos con Paulo.

-"No estás nervioso?"
-"Falta nada para el próximo partido, los negros nos van a dar pelea"

No se conecta todavía. Aprovecho para boludear con jueguitos un rato. Responde.

-"We alto discriminador, vos no sos islandés tampoco eh"
-"Claro que estoy nervioso, pero confío en el grupo... Vos no?"

"Si, mas vale... Pero ellos juegan con tres piernas"

"Jajaja en eso tenés razón"
"Ojo que puedo entrar de titular y al menos un tres piernas argentino va a haber"

-"Jajajaja seeeeeee si vos decís, te vi en la ducha te acordas? Manicerooo, jajaja"

"No juzgues al nene dormido... Te voy a sorprender. Jajajaj"

"Bue loco, hablando en serio. Daría lo que sea porque ganemos, posta"

"Ese partido lo vamos a ganar, te lo firmo acá"

"Ojalá, ojalá"

"Vamos a ganar el partido, vamos a festejar con los compañeros y después vos y yo festejamos en mi habitación"

Río a la pantalla de mi celular empañada. Ansa me pregunta si está todo bien, y le dije que si. Que había visto un meme buenísimo. Obviamente no se lo mostré. Entro a WhatsApp para contestar el mensaje.

"Dale"

Así sin más. Ni una risa, ni una carita, nada. Quiero ver que me dice.

"Te tomo la palabra"

Apoyo el celular en mi pecho como todo un enamorado. Hasta me da vergüenza estar así, pero bueno. Cierro los ojos e intento mentalizarme en que el destino va a estar a nuestro favor. Yo sé, yo quiero y necesito ganar ese partido. Y festejar con él. Solo con él.

Continuará.

Desde que te ví - Paulo Dybala & Cristian Pavón.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora