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una pelinegra no sabía dónde la estaba llevando a él contrario, sólo esperaba que sea interesante, de lo único que si estaba seguro que era bastante lejos de donde siempre se encontraban,  la chica había querido ir en auto, pero él insistió de que deberían ir caminando.

Ambos chicos habían caminado más o menos media hora,  cuando llegaron al lugar, él estiró su mano hacia ella  y la pelinegra lo aceptó,  aunque sinceramente no era necesario porqué no había nada que les dificulte él camino, pero como la primera vez  sólo había durado un poco de tiempo y luego soltó la mano de ella.

Thalia había decidido que la próxima vez que hubiera una oportunidad de un contacto con el pelinegro, ella iba a tomar la iniciativa, ya que al parecer el contrario era muy tímido o eso era lo que le parecía ella, una sonrisa se coló su rostro sólo con pensar en ello.

Al llegar a donde Nico había preparado la sorpresa, ella dejó de caminar y se queda observando lo qué había preparado, era cierto que hace mucho tiempo él pelinegro se había animado a preguntarle: "¿Cual sería su cita ideal?" y ella le respondió qué seria un lugar donde pudiera ver las estrellas, pero lo había dicho por decir aunque secretamente creía qué era algo original.

-¡Wow! Di Angelo, no creí qué tuvieras memoria para ese tipo de cosas-

-Hay muchas cosas que no sabes de mí, podrías llegar a sorprenderte.- él pelinegro utilizó el mismo tono que ella.

-No me molestaría descubrirlo-  susurró por lo bajo.

Una sonrisa de lado apareció en él rostro del chico, pero decidió hacer cómo si no hubiera escuchado nada sobre su comentario, mientras preparaba todo lo necesario para qué pudieran ver las estrellas sin qué nadie los moleste.

La pelinegra no estaba segura si él la había escuchado,  pero agradeció mentalmente que él no dijera nada,  sinceramente no sabía por qué había dicho eso, lo más probable que era por el impulso que había sentido en el instante que él había dicho eso.

-Fue dificil pero al final pude abrir él candado.- Comentó él contrario luego de haber luchado por varios minutos contra él candado del pequeño observatorio.

-¿Cómo hiciste para encontrar este sitió?- La pelinegra levantó la ceja ya qué conocía todos los lugares de la ciudad y jamas había visto algo asi.

-Es un secreto y no pienso revelarlo.- Comentó para qué luego entraran al observaratorio.

Si bien era cierto que ella miraba de vez en cuando las estrellas,  Especialmente cuando tenía que hacer la tonada de una canción,  esto era completamente diferente, se sentía como cuando era niña otra vez e  iba con su padre y su hermano  para hacer lo que estaba haciendo ahora,  recordar aquello le trajo un poco de nostalgia, pero aún así estaba sonriendo.

Estaba todo oscuro y Nico no podía ver mucho, pero cuando Thalía dio su opinión de lo que estaba viendo, él pudo notar que estaba feliz  Y eso le gustó a él, en algún momento  la pelinegra dejo que también vieron poco por él telescopio y ambos estuvieron turnandose para que cada uno pudiera ver  un poco de aquel espectáculo, hasta qué él teléfono de la pelinegra no dejo de sonar y ella tuvo qué contestar.

-Mi padre- dijo molesta. 

-Te llevaré a tu casa- Dijo Nico entendiendo la situación. -¿Asi qué te gustó?- Preguntó él pelinegro luego de haber salido del observatorio.

-Creó qué eso es una pregunta estúpida, Di Angelo.- La pelinegra dijo con una sonrisa.

-Me he dado cuenta de eso.- Él rodó sus ojos.

Hubiera sido lógico qué  luego de haber recibido una llamada de su padre,  la chica hubiera hecho todo lo posible para llegar lo más rápido a su casa,  pero es lo que menos quería hacer Thalía en este momento, por lo que mantuvieron el ritmo de cómo habían ido, no sería la primera vez que ella desobedeciera una orden de su padre y no sería la última.

Los pelinegros se encontraban llegando al estacionamiento del centro comercial, cuando sus manos se volvieron a rozar,  pero esta vez no fue porqué ellos querían,  estaban a pocos pasos cuando ella dejó de caminar, se había dado cuenta de que lo que ella quería hacer, no podía lograrlo ya que él no la iba a acompañar a su casa,  cómo le hubiera gustado.

-¿Que ocurre, Thalia?- Él chico se dio la vuelta al darse cuenta qué ella se habia detenido.

Sin  decir ninguna palabra al respecto, la pelinegra sonrió  para tomar valor,  se acercó a él con determinación y lo robó un besó. Inicialmente no supo cómo reaccionar al principio, pero la sorpresa no le demoro mucho  y procedió a devolver él besó.

Por más que ellas no quisieran que el beso terminará, se tuvieron que separar, especialmente cuando él teléfono de Thalia  no dejaba de sonar.

-No te van a dejar de llamar hasta que llegues a tu casa- Comentó él con una sonrisa.

Ella miró el teléfono un poco fastidiada, aunque no era necesario Nico insistió acompañarla al auto, amo se vieron con otro beso y ella se fue conduciendo hacia su casa, cuando estaba lo bastante lejos él pelinegro hizo lo mismo.



A\N: ¿Qué les parece? Espero qué les guste y me dejen su opinión. Por cierto Thalico gano por un voto fue bastante peleada, el próximo es Jasper.

Guerra de BandasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora