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Atenea había decidido tomarse el día libre, bueno no del todo ya que trabajaría desde su casa y de paso poder pasar un poco mas de tiempo madre e hija.

Aunque no todo salio como planeaba, ya que ella había quedado salir con sus amigas, pero no le molesto, iba a aprovechar ese día para ella hasta que su hija venga.

Había pasado unas pocas horas de la mañana y ella ya se sentía aburrida, estaba acostumbrada a su rutina, así que cree que por un tiempo largo no lo iba a hacer d nuevo.

Cuando estaba en su habitación, decidió ordenar un poco sus cosas,mientras escuchaba música para relajarse.

Todo estaba tranquilo hasta que una caja pequeña que ella creía olvidada se cayó encima de su ropero.

La mujer no pudo evitar recordar el contenido de esa, la levantó rápidamente y la quiso volver a poner en su lugar para volver a olvidarse pero no pudo.
Ella volvió a revisarla y recordar todo el dolor que el idiota de Poseidon le había causado hace tantos años.

Lo primero que encontró fueron las cartas que el le mandaba y algunas fotos que ellos se habían tomado, allí en esos recuerdos se reflejaban felices o eso era lo que parecía, pero todo cambio cuando llego Sally.

Ella no le echa la culpa a la actual esposa de Poseidon, porqué hablo con ella hace mucho años y sabe que al igual que ella no sabia nada la una de la otra.

Es más ella le había pedido disculpas por haberse metido en la relación que ambos habían tenido, y aunque en ese momento ella estaba despechada, entendió a la otra mujer.

Así es ella había sido novia de escuela secundaria de Poseídon, pero una vez que obtuvo lo que quería, el la dejo.

Muchos dirán que ella está despechada pero, solo ella se sabe lo que sufrió al enterarse de eso y lo que le dolió ver a su ex con otra persona rápidamente.

Lo peor fue que cuando empezó esta carrera, el la hizo menos porqué era mujer y su ex-amante.

Menos mal que tuvo la suerte de conocer a Frederic que la ayudó a superar todas las pruebas y gracias a él conoció a Apolo que fue el gran impulso para ella en esta carrera para luego convertirse en un gran amigo.

Sus pensamientos fueron interrumpidos por la voz de su hija, lo cual que hizo que guardará todo y lo pusiera debajo de su casa.

Annabeth se sorprendió al ver a su madre con los ojos llorosos.
-¿Estas bien?- preguntó su hija preocupada.

-Si- dijo y se miró al espejo -Estaba viendo casa blanca y sabes como me pone esa película-
Su hija la miró por unos segundos como si quisiera saber si era verdad lo que estaba diciendo.

-Está bien, ma-

Cuando Atenea escucho eso de la rubia, le volvió el alma al cuerpo y le sonrió a su hija para cambiar de ánimo y poder hacer con su hija todo lo que había planeado con ella el día de hoy.


A/N: ¿Qué les parece? Había pensado que Atenea lea las cartas, pero ella sabe lo que hay allí. {Creo que soy muy básica poniendo algo amoroso, perdón por tan poco} ¿Quieren que más adelante Atenea y Percy se conozcan?

Guerra de BandasWhere stories live. Discover now