De pronto la escena cambia y se empieza a escuchar de fondo una parte más profunda de sus momentos juntos. Ahora suena "La presunta posibilidad de conocernos", su canción. Entonces se torna más explosivo aún, y hablan conociéndose de toda la vida; empiezan a compartir bromas entre las diferentes escenas de la película e incluso se identifican con otras. Ellos juntan sus manos como si jamás se hubieran separado y de esa forma reconocen cada línea que han traspasado tras de sí, es casi toda una historia y ellos lo saben. Ahora cada tacto resulta realmente reconfortante y ella se apega más hacia él.

- ¿Tienes frío? - pregunta él. Pero la intención se adelanta y posa su brazo sobre el hombro de ella.

- Gracias - responde ella abrazándolo.

La sala se siente más abrigada y vuelven a la película que los toma de improvisto: Una pelea. ¿Ellos han peleado antes? Pues sí, claro que sí, y por eso ambos dijeron un "no" silencioso y desgarrador por dentro cuando las cosas se dieron por terminadas. Era totalmente expreso el vaivén de sentimientos encontrados, perdidos y recordados en ese momento. Ella casi sentía que estaban contando su historia con muy diferentes acciones y palabras que en esencia reflejaban la siguiente canción de fondo: "Not Today".

"Si ciertamente es complicado. ¿Cuándo no lo fue? Es la pregunta. ¿En los días sin luna, en las líricas mal puestas? No. No hay culpables si está el tiempo de por medio. ¿Qué le digo entonces al tiempo? Lo único que podría decirle es que no es suya la decisión, que, si es de formarse un nosotros entre nuestros versos, que así sea. No espero nada a cambio y como tal, si no es de esperar a tus actos, tus sentimientos, tus encuentros ¿Entonces de qué es la vida sino de amar a su tiempo?"

Y con eso supo que toda una temporada de invierno se había escurrido entre sus dedos. Una temporada llena de poesías extrañas, de ciertas frases escondidas, incluso de dejar de hablarse y de verse por completo. Cada quien tuvo sus razones y ninguna muy errada o lejos de la realidad, si ambos creían en el perdón y en el pasado de los momentos entonces supieron encontrarse bastante conmocionados al seguir a la siguiente escena donde nuevamente era invierno, pero ellos entendían que pasar por las cuatro estaciones y seguir sintiendo esto era mucho más que una historia de amor. Ahora era extraño sentirse tan completo, como si hubieran logrado llegar a donde debían hacerlo, pero por caminos muy dispersos y trágicos.

De repente suena una nueva canción, más bien una melodía que ambos entienden y logran sentirla, no tiene nombre aun, pero provoca el caos más hermoso del maldito universo. Él posa un beso en su cabello y ella le devuelve un beso en la mejilla, pero ya no era suficiente y estando tan cerca él posa su mano sobre la mejilla de ella y se miran por completo, muy de cerca, tan cerca que se sentían respirar y de pronto el aire se calla, todo se detiene, incluso un lapso de la película se pierde con ese beso que lo significa todo. ¡Es lo más perfecto! La realidad superando los sueños y las últimas madrugadas de desvelo, un acuerdo mutuo de sellar los sentimientos a través de un arranque repentino de palabras que no se han dicho.

Pero eso sí, ninguno de los dos pudo poner atención después a lo que restaba de la película. Ya sabían que se han perdido una buena parte del final, pero aun así los termina marcando por completo: Si dos personas pudieron amarse en un nivel tan pasional como fue en la película, y tuvieron ese final... ¿Qué pasaría con ellos?

Y en pocos minutos, acabó la función. El "FIN" marcaba la gran pantalla y por tanto ella y él se separaban despacio para salir.

- Estuvo buena - dice ella.

- Realmente buena - responde él.

- Creo que me gusta mucho lo realista que puede ser. En especial esa parte donde se dicen que se amarán para siempre, sabiendo que no estarán juntos. - sigue ella.

- Es que eso creo que es el fin de todo. Tú eres esa persona para mi ¿sabes? - ella lo mira. - Eso significa que nunca podría dejar de quererte.

- Tú también eres eso para mí. Incluso alejándonos o siendo amigos, o lo que sea que estemos siendo. No podría dejar de quererte.

- Bueno, no creo que podamos ser amigos, no así. - Y él la besa nuevamente.

- Si quisiéramos ser amigos, nos hubiéramos alejado.

- No. No quiero eso.

Y ambos sonríen.

Definitivamente esta noche se marcará en la memoria de ambos porque uno siempre recuerda esos besos donde se olvidó de todo. Es la vuelta a la realidad, una que no está nada mal para haber vivido tantas cosas de por medio, y sinceramente para ellos es confuso, surreal, esporádico, irónico, poético, dramático, inefable, pasional, emocional, subjetivo, objetivo, realista, extraño, incorrecto, correcto, explosivo, artístico, irracional y toda una lista que día a día descubren porque se siguen conociendo: él con su misterio, ella con sus galimatías, y en muchos casos porque al hablar, el espacio puede ser bastante reducido y la lucha con el tiempo puede o no tomar un poco de sentido. De igual forma, a esto lo llaman: "Quererse bonito".

La Presunta Posibilidad de ConocernosWhere stories live. Discover now