33. Extrañándote

1.5K 187 90
                                    

{Tokio, Japón, año 2020}

18.30 p.m

—Muy bien, entonces iba así: en el derecho internacional todo... mierda, no, no era así.

El Código Civil fue redactado y escrito en el año 2000... ¿qué estoy diciendo? este maldito código lleva en vigencia como mil años, ¡no puede haber sido escrito en el 2000!

Voy a reprobar este examen, lo sé. Todos estos años de carrera no han servido de nada, ¡no puedo memorizar siquiera lo más simple!

En ese momento se escucha el sonido de su celular.

—Que día tan nefasto, no he podido repasar nada... —sujeta su cabeza con ambas manos en señal de frustración y se queda así por un buen rato.

Continúa sonando el teléfono

—¡Ya! ya voy a contestar, demonios, quien insiste tanto... —el menor observó la pantalla de su celular— ¡JOJO! —una sonrisa instantánea vino a su rostro y contestó de inmediato— ¡Jotaro!

Hola, ¿estabas ocupado?

—Intentaba estudiar un poco más pero no era capaz de memorizar nada —respondió el menor, sintiéndose extremadamente incompetente.

Kakyoin, llevas meses estudiando para tu examen , ¡lo vas a aprobar!

—No lo sé, siento que se me olvida lo más básico, no puedo memorizar nada nuevo ya

Eso es porque necesitas descansar, te has esforzado mucho.

—Supongo... —suspiró angustiado— y encima de todo tú no vuelves hasta la próxima semana

Lo siento, sabes que lo único que quiero es verte.... sin embargo esta investigación se ha prolongado por más tiempo del que creí

—Lo sé, es grandioso que hayas tenido la oportunidad de viajar a realizar tu investigación... yo ni siquiera me he graduado

Pero has aprobado todo, Kakyoin. Ten confianza, todo saldrá bien. Y te recomiendo que ya dejes de estudiar, tu examen es en 3 días

—No me lo recuerdes porque me dan unas ganas inmensas de vomitar

Todo va a salir bien, yo confió en ti.

—Te extraño... —suspiró el pelirrojo sintiéndose melancólico — ya van a ser tres meses sin verte.

Yo también te extraño, Kakyoin, no sabes cuanto

—Ngh...— el menor se sonrojó instantáneamente, extrañaba tanto ver a Jotaro...

Han pasado ya seis años desde que la historia de Jotaro y Kakyoin comenzó, seis años maravillosos que han estado llenos de cosas buenas y malas, pero sobre todo llenos de amor. Desde aquel día que Jotaro prometió que aceptaría las cosas sin temor alguno, todo había cambiado radicalmente. Ya no temía demostrar su afecto en público con Kakyoin, y para sorpresa de este último, era la persona más dulce y detallista que había conocido. Siempre buscaba sorprenderlo de alguna manera, lo que hacía que su amor por el mayor siguiera creciendo cada día más.

Ambos chicos decidieron irse a vivir juntos cuando Jotaro estaba terminando su carrera. En un principio fueron ayudados económicamente por los padres de ambos chicos, sin embargo cuando el mayor estaba en su penúltimo año, se le presentó la oportunidad de trabajar en un Instituto de Biología Marina, ello debido a sus excelentes calificaciones. No tardó en ser reconocido y solicitado por muchos profesores y universidades en Tokio y fuera de él, ofreciéndole cantidades de dinero bastante considerables debido a sus increíbles aportes al mundo de la ciencia.
Para ese entonces, había podido devolver todo lo que le pidió prestado a su madre y a los padres de Kakyoin, terminó de pagar la casa en la que vivían y ahora él y su amado pelirrojo vivían de manera cómoda y feliz.

Now I know what love is (JJBA)Where stories live. Discover now