Now I know what love is (JJBA)

32. Truly Madly Deeply

Los dos chicos salieron de la cabaña a dar un paseo por la fresca y extensa playa que tenían frente a sus ojos, donde corría una brisa muy agradable y el sol no pegaba tan fuerte.
Caminaron de la mano por la orilla un buen rato, y luego entraron al agua a refrescarse un poco. Como es típico, ambos hicieron el juego de lanzarse agua mutuamente, quedando llenos de agua salada y arena.
Después de un buen rato en ello, se sentaron en la arena, a fin de secarse y contemplar la vista.

—Me gusta tanto estar aquí—  dijo el mayor observando con los ojos brillosos la inmensidad del océano. Le apasionaba mucho descubrir todo lo que se encontraba en él.

—Lo sé, desde que te conocí me dijiste que te gustaba mucho todo esto —comentó el menor, feliz de ver a Jotaro tan entusiasmado.

—Pero el hecho de que estés aquí conmigo lo hace aun mejor —el mayor sujetó a Kakyoin de la barbilla y lo atrajo hacia él, dándole un pequeño beso en los labios.

—Es grandioso estar contigo, Jotaro... —Kakyoin no podía estar más feliz. Eso era con todo lo que había soñado, estar en un lugar bello y tranquilo junto a Jotaro, sin temor a que alguien les molestara.

—Ven, acércate —dijo el ojiazul sacando su celular del bolsillo y encendiendo la cámara frontal de este.

—¿Qué haces? —preguntó confundido el pelirrojo.

—Quiero tomarme una foto contigo.

Al menor le estaban sorprendiendo mucho los detalles que Jotaro estaba teniendo ese día, él no era de hacer esas cosas como 'sacarse selfies' menos de pedirle que fuera junto a él.

—Listo —comentó Jotaro luego de haber tocado la pantalla de su teléfono para sacar la fotografía. —la subiré a mis redes sociales ahora mismo.

Ok, Jotaro se estaba volviendo loco pensó Kakyoin para sus adentros. No concebía aun el hecho de que todo eso estuviese pasando en realidad, era demasiado perfecto para ser verdad.

—No es necesario Jotaro...

—Quiero hacerlo —dijo el ojiazul a través de una sonrisa —quiero que todos vean lo feliz que me haces. —se acercó a Kakyoin para darle un fugaz beso. —Kakyoin yo... q-quiero preguntarte algo...

El menor pudo notar como Jotaro estaba bastante nervioso de pronto, como si toda la magia del momento se hubiera esfumado. Comenzó a temer de que algo malo fuera a pasar, sin embargo antes de sacar conclusiones apresuradas, se limitó a escuchar qué era eso que quería preguntarle el mayor que lo había puesto tan tenso.

—Esto no es fácil para mi... honestamente me siento muy nervioso en este momento... —bajó la mirada y tomó las manos del pelirrojo— pero no quiero seguir desperdiciando tiempo lejos de ti. Simplemente ya no concibo una vida en la que tu no estés, y es por eso que... —tragó saliva— bueno... q-quería pedirte... que tú... —lo miró directamente a los ojos— aceptaras ser mi novio.

Kakyoin estaba muy sorprendido por todo eso, pero sobre todo enternecido. Había soñado tantas veces con ese momento que lo veía casi irreal, era tan maravilloso que apenas lo creía.

—Pensé que jamás me lo pedirías... —dijo el menor sumamente emocionado, abalanzándose sobre Jotaro para besarlo de manera apasionada.

—Espera... —antes de seguir con aquel beso, Jotaro sacó algo de su bolsillo. —tengo algo para tí.

Ambos chicos se sentaron a fin de quedar más cómodos que en la posición en la que estaban. Jotaro sujetó la camisa del menor con una de sus manos, mientras que con la otra ajustaba un pequeño prendedor que había conseguido hace un tiempo.