02. "Debes Tratarlo Como Príncipe"

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Isabella.

Primer día de clases. No puedo creer que las vacaciones acabaron. Mientras trataba de levantarme de la cama mi tío tocó la puerta.

—Isa ya es hora de levantarse, tienes que ir a la escuela. —anunció, me estire y levanté de la cama para abrir la puerta topándome con mirada verde de mi tío.

—Ya estoy despierta. —traté de sonreír y él dio un beso en mi frente, aún adormilada sonreí y acaricié su mejilla.

—Apúrate si no quieres llegar tarde. —asentí y se fue.

Adoro a mi tío, él es una persona realmente buena y cariñosa conmigo, en cambio su nueva esposa me trataba mal. Para ella la única niña a la que ella veía como a la reina de sus ojos es a su hija Victoria. Ella detesta a mi tío ya que biológicamente no es su padre, es su padrastro. Y yo la detesto completamente.

—A un lado, estorbo. —me empujó Victoria para poder pasar al baño mientras yo me quedaba ahí acumulando mis ganas de estrangularla.

Victoria al principio puede parecerte una niña encantadora con su cabello rubio ondulado y su encantadora sonrisa. He escuchado que ella desearía tener los ojos azules para poder sentirse como una princesa ya que también tenía un cuerpo envidiable, su madre siempre le decía que ella era una princesa pero aún así Victoria usaba pupilentes azules para que le dijeran lo hermosa que era. Su autoestima estaba por las nubes.

—Viky, no trates así a Isa. —le pidió mi tío a lo que obtuvo por parte de ella un rodamiento de ojos, ella nunca había obedecido a mi tío ya que decía que no era nadie para mandarla.

—Solo dile a esta niñita que no se meta en mi camino. —dijo mientras ponía su mano en la cintura y me veía con asco para después irse.

—Solo dile a esta niñita que no se meta en mi camino. —dije imitando su voz o por lo menos tratando de sonar igual de tonta que ella, mi tío me dedicó una mirada desaprobatoria y solo le di un beso en la mejilla.

—Si no aprenden a llevarse bien tendré que tomar medidas drásticas, Bella. —hice un puchero y mi tío dio un beso en mi frente. —Apurate que hoy comienzan las clases. —y dicho esto comenzó a bajar las escaleras.

Entré al baño, me di una ducha rápida y cuando terminé fui a mi habitación para vestirme y arreglarme.

Después de unos minutos bajé a la cocina donde mi tío ya tenía listo el desayuno. Victoria y su madre se estaban maquillando mientras solo tomaban jugo de naranja.

—Aquí tienes tu desayuno, Isa. —anunció mi tío poniendo el desayuno frente a mi mientras me sentaba.

—Oh niña estás muy pálida, ¿has pensado en usar maquillaje? Digo, así le harías un favor a tu rostro. —dijo la esposa de mi tío para después comenzar a reír de una manera irritante, me limite a rodar los ojos. A mi tío no le gustaba cuando le respondía a su esposa.

—Deja a Bella, mujer. Ella es perfecta con o sin maquillaje. —me defendió mi tío abrazándome.

—Pero si se ve horrible. —habló Victoria, en ese momento deseé poder arrancarle con mis propias manos sus rubias extensiones.

—Ya cariño, déjala. —la esposa de mi tío, llamada Renata, tranquilizó a su fiera, quiero decir hija.

—Ya es hora de que se vayan niñas, no queremos que lleguen tarde. —ambas nos levantamos de las sillas y caminamos hasta la puerta para salir de casa.

—No quiero que te vean llegando conmigo por eso...

—Sí ya sé, me dejarás calles atrás. Sólo vámonos. —me subí al auto de Victoria y emprendimos el trayecto hacia la preparatoria.

The Prince #1 Where stories live. Discover now