• Smile • 07

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¿Acaso fue muy arriesgado de mi parte?

Antes de aceptar el caso siquiera, me advirtieron que él era una persona de muy mal carácter, fría e irritable.

Dijeron que no me metiera con el fuego, porque con Neji Hyūga, ardería con tan potente desenfreno, que el sol quedaría muy pequeño ante nuestros pies.

Y eso, me incentivaba aún más, mucho más.

Me encantaban los retos, desde siempre, y el hecho de tener el expediente de un Hyūga en mis manos, significaba uno grande y muy fuerte.

Nunca supe por qué antes de entregarle las flores a la rubia oficial No Sabaku, le di un suave y delicado beso a cada una como si pusiera mis mejores deseos en ellas.

Él ya me importaba. Lo sabía, y sin embargo, decidí seguir quemándome, disfrutando el sabor de las llamas, el precioso olor que desprendía al chocar con mi piel. La explosión de calor que provocaba en mi interior.

Por la noche, había quedado con un ex compañero de la facultad de derecho. Su nombre era Aburame Shino. No es que él fuera un gran hablador —ni conmigo, ni con nadie—. No obstante, cada vez que musitaba algo, yo quedaba extasiada.

Aunque, después de darle tres sorbos a mi café, apretar los labios mirando al vacío, y comentarle vagamente por lo que estaba pasando mi patética vida. Su respuesta me sorprendió de sobremanera:

—Alejate de ese lugar, Tenten. Renuncia a ese trabajo, yo te conseguiré otro, te lo aseguro. Pero por favor...

Su súplica quedó opacada por el teléfono, le dije que me disculpara en gestos mudos mientras tomaba la llamada.

El celular se resbaló de mis manos al escuchar una voz de mujer diciendo:

"Un preso de la cárcel Hōzukijou* quiere contactarse con usted. Si quiere responder esta llamada marque..."

—¡¿Quién es?! —preguntó Shino levemente alarmado, aunque sin demostrarlo físicamente.

Todo mi cuerpo comenzó a temblar mientras que los mareos aparecían atacándome desprevenida.

¡No debí tomar tanta azúcar con ese café! Maldije intentando recoger el celular con los dedos temblorosos.

Aplasté el número "1" con fuerza.

Y mi sorpresa fue enorme al escuchar su voz, porque en vez de que mi corazón se saliera del pecho como esperaba por los mareos, me inundó una silenciosa paz.

Me sentí segura, feliz.

—Tengo poco tiempo. ¿Puede venir mañana? —dijo rápidamente ignorando la voz de un oficial que a lo lejos exclamaba: "¡Ya Hyūga! ¡Corte!, ¡usted no es el único que necesita hacer llamadas!"

—Iré temprano. —aseguré como si se tratara de algo prohibido.

—Le espero por la mañana. Y... Gracias por la flores, poseían un toque rojizo en cada uno de sus pétalos... las hacia ver hermosas.

Creo que hasta él se pudo dar cuenta lo ruborizada que me coloqué al escuchar esas palabras. ¡Dios santo! ¡Era mi labial el que había quedado pintado!

—De-de nada. —respondí acabando con la llamada.

Mis ojos viajaron a las gafas que siempre portaba Shino. Éste batió su café con parsimonia hasta que por fin abrió su boca.

—Tu sonrisa es verdaderamente preciosa.

Y ni siquiera me había dado cuenta que todo el tiempo que había hablado con él, estuve sonriendo.

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¡Hola! Bueno gracias a todos y cada uno de los que le dedican un pedazo de tiempo a esta obra

*Hōzukijou: Es el nombre de la prisión en la que encierran a Naruto en la película "Blood prision" que he de aclarar, no la he visto. Pero me pareció mejor sacar el nombre de ahí xD

Los amooors.

All I Wanted ➳ NejiTenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora