Una importante decisión

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NARRADORA POV

El carruaje con la familia real se adelantó dejando atrás a Tauriel y Link. De camino al Reino el silencio se apoderó de la caminata de ambos. Por fin, el joven decidió romper el hielo.

- ¿ Sabes? Mi prima me mataría si me escuchara decir esto pero me he dado cuenta de algo.

Eso llamó la atención de Tauriel quien dirigió su mirada a él con mucha curiosidad, él esbozó una sonrisa con aires de burla.

- ¿ Ah Sí?, ¿de qué?

- El prometido de mi prima, el príncipe Legolas, se nota que le gustas mucho.

Al escuchar eso, la joven miró hacia el suelo, confundida y desconcertada.

- No sé de dónde sacas esa idea tan descabellada. - Tauriel soltó una pequeña risa. Regresó a verlo. - Eso es imposible.

- ¿ No te has dado cuenta en la forma en la que te mira o como no te mira? Como quieras verlo. Conozco a la perfección los ojos de una persona enamorada y los ojos de Legolas sólo dicen Tauriel. - Tauriel no acababa de asimilar aquel comentario, ¿sería cierto lo que Link estaba diciendo? ¿Por qué el le mentiría? -¿Y que hay de ti, mi bella doncella? ¿ Te gusta el príncipe Legolas?

La joven se quedó sin habla, apenas esta mañana se había prometido por su propia felicidad dejar de un lado los sentimientos hacia su amado Legolas. A pesar de tener esa firme convicción, muy dentro de su corazón aun anhelaba aquella esperanza de que algún día podría estar con el elfo rubio que le robó el corazón. No quería mentirle a Link, pero tampoco era prudente que él conociera sus sentimientos hacia Legolas.

- No, Link, sólo veo en Legolas a un amigo, aun si quisiera ir más allá, el rey primero me desterraría antes que ver a su hijo casado conmigo. - Sonrió para disimular la tristeza que sentía en ese momento.

-Es una gran tristeza.

-¿Qué cosa?

-Que los matrimonios se den por simples acuerdos con el fin de mantener un reino y no por amor.

Tauriel cerró sus ojos por un momento recordando las palabras de Reindel "Aún si tu amor hacia Legolas fuera correspondido, el rey jamás permitiría que su hijo se casara contigo"

-Lo es. -Dijo en un murmullo abriendo sus ojos.

Así, ambos siguieron caminando, pronto el cielo se tornó oscuro y unas nubes grises invadían el paisaje. Primero cayó una, luego unas diez, luego muchas gotas y finalmente empezó a llover muy fuerte.

- Vamos Tauriel, apresura el paso o llegaremos empapados al castillo. - Dijo Link dirigiendole una sonrisa burlona a Tauriel.

-Dudo, sinceramente mi señor que lleguemos secos al castillo. - Respondió ella riendo traviesamente.

- Entonces, ¿que sugieres? - Bromeó él.

- Yo sugiero, mi señor, que debemos hacer una carrera hasta el Reino. - Tauriel aceleró el paso y empezó a correr lo más fuerte que podía dejando atrás a Link. - ¡El que llega de último es un huevo podrido!

-¡De nuevo haciendo trampa mi lady! -Link no se dejaría ganar y comenzó a correr, tratando de alcanzar a Tauriel.

Parecían dos niños correteando por el bosque, Tauriel tenía mucha energía y destreza y cualquier obstáculo que se le presentara lo esquivaba con agilidad. Por su lado Link no se quedaba atrás y en ocasiones parecía que estaba a punto de alcanzar a Tauriel. Faltaban aproximadamente kilómetro y medio para llegar cuando, en un descuido Tauriel tropezó con un tronco caído, ocasionandole que perdiera el equilibrio, rodara unos dos metros para que finalmente cayera en el suelo. Link se asustó mucho y se apresuró en socorrerla.

- Tauriel, por todos los cielos, ¿estás bien?

Tauriel quedó boca abajo, no podía moverse, sentía que se hubiera roto todos los huesos.

- Déjame ayudarte.

Con mucho cuidado, Link volteó a Tauriel y la tomó en sus brazos.

- Respondeme Tauriel, ¿ Estás bien?

- He estado mejor. - Se echó a reír. Sí algo caracterizaba a la joven es que siempre tomaba los malos momentos con algo de humor. - Estoy bien solo creo que me doble el tobillo.

-¿Puedes caminar?

- Bueno vamos a verlo, ayúdame a levantarme.

Poco a poco Tauriel se incorporó hasta que quedó de pie. Trato de dar un paso pero le fue imposible, el dolor era agudo y persistente.

- Bueno parece que mis piernas están inhabilitadas así que tendrás que dejarme aquí. -Le dedicó una dulce sonrisa a Link.

- No lo creo mi lady.

Tomó a Tauriel entre sus brazos y empezó a caminar.

- Espera Link, no deb...

- Sshh, no intentes detenerme, te llevaré hasta el palacio.

TAURIEL POV

La lluvia caía imperante. No parecía dar tregua, la caminata me había dejado agotada y ahora con esta caída estaba casi muerta... de cansancio. Mis ojos casi se cerraban. Débilmente levanté mi mirada hacia Link, quien tenía la vista fija hacia adelante. Era una sensación realmente relajante, sentir como eres cargada por un guapo elfo bajo la lluvia hace que pierdas la noción del tiempo. No sé si algún día podré enamorarme de él, lo que sí sé es que me gusta, me atrae, no como Legolas, pero al menos llama mi atención. No aguanté más y cedí al sueño.

NARRADORA POV

Después de una larga caminata, Link llegó al Reino del Bosque con Tauriel en sus brazos.

- Tauriel, Hija mía¿Qué le pasó? -Preguntó angustiada Reindel.

- Está bien solo cayó y al parecer se torció el tobillo, nada que un buen descanso no pueda solucionar, ahora se quedó dormida en un profundo sueño, lo mejor es que la acostemos en su habitación y recupere energías.

Con esto, ambos elfos subieron hasta la habitación de Tauriel, Link la acostó con mucha delicadeza en su cama.

- Muchas gracias joven, fue usted muy amable.

- No tiene nada que agradecerme mi señora, lo hice porque ella se ha ganado mi cariño, le ruego que me mantenga informado sobre la salud de Tauriel.

- Así será mi señor.

Link abandonó la habitación y se dirigió al comedor, tenía mucha hambre, justo antes de bajar las escaleras alguien se interpuso en su camino.

-Vaya, vaya, vaya primito así que cargaste a la elfa hasta acá, me alegro mucho de que te hayas fijado en ella.-La voz de Arwen sonaba sarcástica.

- Arwen basta, Tauriel se torció el tobillo y no podía caminar hasta acá. Además, dudo que pueda hacerme caso, ella tiene intereses en alguien más. - Aquello último que dijo Link fue intencionadamente.

- ¿ Qué estás insinuando?

-Nada primita.

- Link, ¡dime ya!

-¿Qué está pasando aquí? ¿Por qué están discutiendo? -Lord Elrond los interrumpió, se veía muy molesto.

- Lo que sucede es que mi querido primo está insinuando que mi prometido está interesado en esa... Tauriel.

Elrond, se quedó callado, había estado meditando en la posibilidad de que Tauriel fuera su hija, su hija perdida, fruto del amor entre él y su amada difunta Yessiel. Si ambas cosas eran ciertas, si Tauriel es su hija y Legolas está interesado en ella, entonces estaba cometiendo un gran error al casar a Arwen con Legolas, sabiendo el amor que supuestamente existe entre él y Tauriel. Lord Elrond sabía muy bien lo que era tener que separarse del amor de su vida solo por costumbres absurdas. No iba a permitir que eso volviera a ocurrir, mucho menos permitiría que su posible hija Tauriel, sufriera el arrebato de su gran amor. El rey de Rivendell estaba decidido, había tomado una decisión

Tauriel, Hija del BosqueWhere stories live. Discover now