Capítulo 44

1.8K 79 3
                                    

Todos empiezan a irse de mi casa poco a poco, algo bebidos. He estado charlando con Judie un rato, manteniendo conversaciones incómodas y breves, y a los otros no les he hecho ni caso. El primero en irse ha sido Justin, molesto y cabreado; pero es lo mejor. Cuando estoy sola en mi casa agarro mi diario y me siento en la cama; miro el papel en blanco mientras lo golpeo con mi bolígrafo repetidamente. No sé qué escribir. Noto mi pecho hundirse de nuevo al pensar en mi abuela, y lo único que puedo hacer es empezar a llorar, dejando el diario encima de la cama y cubriendo mi cara con la almohada. No puedo hacer nada para evitar sentirme así. Intentar hacer creer a la gente que estoy bien me destruye por dentro poco a poco. Recibo un mensaje de Caroline minutos después, y lo abro con la vista borrosa.

¿Preparada para volver a trabajar o no? Entenderé si te niegas, xx.

Sigo llorando y me dispongo a contestarla, suspirando.

¡Claro que estoy preparada! ¿Cuándo, dónde y qué es? xx.

Una sesión de fotos en nuestros estudios de grabación, quieren que sea una representación de la mujer en el trabajo discográfico. Mañana a las 8am aquí, xx.

Nos vemos mañana, xx.

Dejo el móvil encima de la mesilla y lo pongo a cargar. Bajo a la cocina con tranquilidad y abro la nevera dispuesta a comer algo de cena, pero al instante la cierro; no tengo hambre. Subo a mi habitación de nuevo y me meto en la cama, con la mirada perdida en el techo y notando como las lágrimas quieren volver a aparecer. Minutos después me duermo entre lágrimas y sollozos silenciados por la almohada.

Mi despertador suena a las 7am y mis ojos me duelen un poco de tanto llorar. Me meto en la ducha, donde no puedo evitar llorar de nuevo; cuando estoy sola siempre es un momento de debilidad mental. Al salir me miro en el espejo y suspiro.

-Deja de llorar, por favor.

Me susurro a mí misma sin establecer el vínculo y un sollozo vuelve a salir de mi boca. Me siento en la taza del vater hasta que las lágrimas paran, y me pongo un pantalón de chandal negro, junto a una camiseta básica de tirantes blanca y unas UGG beiges. Recojo mi pelo en una coleta y me pongo las gafas de sol. Minutos después llego a los estudios, donde antes solía acompañar a Justin algunas veces. Veo en la recepción a Caroline. Ella me lleva a uno de los estudios para que me maquillen y me hagan ondulaciones en el pelo.

-Necesitaremos kilos de maquillaje para cubrir tus ojeras, ¿no has dormido bien?

Me pregunta la maquilladora preocupada y yo niego con la cabeza. Me visten con unos leggins negros, una camisa blanca ajustada, una americana negra con algunos detalles con rayas blancas y negras, y unos botines negros con algo de tacón. Nos dirigimos a un estudio y ahí empiezan a sacarme algunas fotos.

-¿Cuánto has adelgazado?

Me pregunta Caroline cuando ya hemos terminado y me dirijo al estudio antes para ponerme mi ropa. Me encojo de hombros.

-No me he adelgazado.

Respondo indiferente entrando y empezando a quitarme la ropa.

-Sé que te has adelgazado, ¿cuánto pesas?

Insiste ella cuando ya estoy completamente vestida y suspiro, guardando algunas cosas en mi bolso.

-No lo sé, debo de pesar 47 o 48kg.

Respondo indiferente empezando a salir del estudio con Caroline detrás.

-¡¿Pero estás loca?! ¡Tienes que comer!

Me grita ella cabreada y yo levanto las manos para después darme la vuelta.

-He hecho el trabajo que me has pedido Caroline, no eres mi madre para mandarme sobre mi salud.

Just feel.  {Justin Bieber}Where stories live. Discover now