endless love

Capítulo 51: Nuestro Día

Todos los días sin fallar recibo notificaciones de esta historia, no la han dejado morir así que aquí les dejo un regalito jejee 😘😘
*******

LAUREN POV
Ha sido una semana larga, sumamente larga. Luego de estar día y noche en la empresa durante toda la semana, finalmente el Viernes había llegado. Son casi las cuatro de la tarde, no puedo creer que tenga un día en el que llegaré temprano a casa. Estoy feliz no solo por salir de la oficina, pero llegar a la casa me tiene muy emocionada. Hoy es Viernes de familia y estoy emocionada por eso.

A pesar del cansancio que sentía en mi cuerpo, era momento de bajarme del auto. En ocasiones soy recibida por dos personitas muy emocionadas pero al parecer hoy no era el caso – estoy en casa- avisé. Por respuesta tuve una cosa pequeña, blanca y peluda llena de emoción – creo que tengo que dejar de ser una bitch contigo- batalle un poco para que el pequeño cachorro no se escapara -eres el único que me recibe, Rex- me ñangote para acariciar su suave pelo disparado –creo que por más que pelee para que no te quedes aquí, no tengo voz ni voto en la decisión- Le había repetido unas 200 veces a Mateo que no podía quedarse al cachorro, pero el dice que al quedárnoslo le estamos regalando una vida por que si se quedaba en el parque donde lo encontró, quizás ahora estaría muerto. Por supuesto esa explicación es apoyada por Camila, Kylie y Valentina. Hace una semana que el cachorro está en la casa. Por cierto, ese fue el tema del pasado Viernes familiar. Realmente espero que hoy no haya otra sorpresa.

Me puse de pie y subí las escaleras para ver si finalmente encontraba a mi familia. La primera habitación a la derecho era la de Kylie. Toqué suavemente a la puerta –entra- escuché del otro lado –hola princesa- me asomé. Ella estaba recostada en su cama con su celular en las manos –hola mamá- su perfecta sonrisa se dibujó en sus labios, la misma sonrisa que me enamoró cuando la vi por primera vez hace 10 años atrás. Tenía solo cuatro añitos cuando Camila y yo nos enamoramos completamente de ella, ahora tiene 14. Esa edad tan fuerte, desafiante e independiente, pero definitivamente se ha mantenido como la niña educada y amorosa desde el día que piso esta casa por primera vez

– mama, ¿puedo ir al cine esta noche?- preguntó.

Caminé hasta su cama y me senté a su lado.

-Hoy es Viernes de familia, sabes eso.-

-lo se ma, pero es que hoy irán mis amigos de la escuela-

Situaciones como esta es la que nos deja ver que ya no es la pequeña niña que amaba estar en casa con sus madres y hermanos.

-pregúntale a mami- respondí.
-ya se la respuesta- dijo.

Si, yo también sabía la respuesta. Los Viernes de familia son sagrados para todos pero para Camz mucho más. Nadie puede perdérselos, normalmente nos quedamos en casa, compramos pizza y vemos una película. Otros días salimos los 5 juntos a algún lugar o simplemente hablamos. Es divertido tener conversaciones con niños de 10 y 14 años, sus preguntas a veces son para morirse de la risa, otras veces para encerrarlos en la habitación castigados para toda la vida pero siempre terminamos disfrutando nuestro tiempo como familia.

Reí ante la respuesta de mi hija mayor.

-iré a ver a tus hermanos. Te amo- besé su cabeza y salí.

-sííííí, lo hiceeeee- escuché el grito de la siguiente habitación. – Mateo, ¿cuantas veces tengo que decirte que no estés tan cerca del televisor?- como todas las tardes estaba en su tiempo de jugar playstation pero pegadísimo del televisor. El volteó rápido al escuchar mi voz
– ¡mama!- corrió hasta mis brazos para darme mi abrazo preferido – hijo, ¿donde está mami y Vale?- pregunté, era raro que Camila o mi pequeña no saliera ya, luego de escucharme en la casa; el alzó sus hombros en respuesta y el juego nuevamente robó la atención de mi hijo.