Capítulo 50: Primer Añito (FINAL)

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CAMILA POV
-taylor abre la puerta- grité desde la cocina, tenía un corre y corre. Estaba de lado a lado por toda la casa, hace tres meses nos mudamos a una casa mas grande, mas espaciosa, donde Valentina y Mateo tienen una habitación para cada uno y tenemos hasta una terraza muy cómoda. La primera vez que vimos la casa, Lauren quedó enamorada, definitivamente fue como dicen, amor a primera vista, es un lugar seguro para nuestra familia y queda cerca de su trabajo, ¿qué mejor que eso?. Nuestras familias y amistades aun no han conocido nuestro nuevo hogar y que mejor que inagurarlo con el primer cumpleaños de mis pequeños. -¿quién era?- pregunté cuando vi que Taylor volvió a asomarse en la cocina - yo, hija querida- apareció mi suegra - ¿dónde está Lauren?- preguntó rápidamente al verme en medio de un desorden - comprando unas cosas que se me olvidaron- respondí y su cara de un momento a otro fue de terror -¿está con los niños?- preguntó alarmada y yo negué con la cabeza soltando una pequeña risa, al parecer no soy la única que duda de la capacidad de mi esposa cuidando dos niños de un año. Desde que caminan, es un poco imposible que Lauren se quede sola con ellos, la desesperan, ella no tiene mucha paciencia que digamos, definitivamente la vuelven loca, a menos que estén dormidos. Ella felizmente se puede quedar con uno de los dos pero jamás con ambos. La primera y única vez que los deje a los dos bajo su cuidado para hacer unas diligencias, cuando llegué a casa luego de un largo día, encontré harina por todas partes, en la sala, la cocina, los muebles, sin duda alguna en toda la casa, mis hijos dormidos en un colchón en el piso llenos de harina y Lauren sentada en el mueble con una cara de terror sin despegar su mirada de encima de ellos. Al recordarlo ahora me causa risa pero, en ese preciso momento lo que quería hacer era matar a mi esposa. - ¿y con quien están mis nietos?- preguntó mi suegra - están en el departamento de Dinah, cuando termine de prepararlo todo iré a buscarlos, es imposible tratar de hacer algo mientras ellos están caminando por toda la casa y tocándolo todo. Necesitan supervisión las veinticuatro horas del día- respondí y ella asintió, sabía que me entendía, ella es madre de tres y pasó por cada una de las etapas por las que su hija y yo estamos o vamos en camino. Definitivamente en la etapa en la que estamos es de las mas difíciles, por que ellos estas con ganas de descubrirlo todo, todo lo agarran y se lo meten a la boca, caminan por todos lados, se quitan el pañal, definitivamente es una vida caóticamente hermosa.-¿en que necesitas ayuda?-preguntó Taylor - señalé la mesa del comedor, estaba llena vasos de plásticos esperando ser llenado por una cantidad ridícula de dulces que también estaban todos esparcidos en la mesa. -Ayúdame con los vasitos - le pedí y ella lo hizo, caminó hasta la mesa mientras mi suegra se encargaba de la comida y yo de recoger lo que estaba fuera de lugar y por su puesto de lograr que Lauren llegara a casa. Busqué mi celular que lo había dejado sobre el mostrador de la cocina y le envié un mensaje a Lauren

Camila
Babe, ya vienes?
10:30am

LAUREN POV
Un mensaje de Camila, lo raro es que es el primero del día, ok Lauren concéntrate y piensa en una excusa creíble para darle. Ya llevaba bastante tiempo fuera de la casa comparado con el tiempo que se supone que me tardara comprando las cosas que ella me había pedido.

Lauren
Umm nope, tuve un problemita con el auto. Ni siquiera he podido ir a la tienda :/
10:35am

Creo que eso de que ni siquiera he podido ir a la tienda fue un poco exagerado y generaría mas preguntas de su parte. La realidad era que estaba preparando una gran sorpresa para todos en la familia y para poder lograrlo le había pedido a Chris que comprara lo que Camila había pedido y lo llevara a la casa pero al parecer no lo había hecho, tonto.

Camila
Que pasó?? Donde estás?
10:45am

Lo sabía, mas preguntas. Decidí que mejor ignoraba su mensaje y respondería a sus preguntas y a su cara enojada mas tarde en cuando llegara a la casa. Puse mi celular en la silla vacía que estaba a mi lado y continué en la desesperante y larga espera en el hogar de niñas. Dios, por favor que todo esté en orden y sea perfecto, los nervios estaban acabando conmigo, que algo saliera mal me tenía al borde del desespero. - Sra. Lauren Jauregui- escuché mi nombre finalmente, luego de dos horas esperando ser atendida. Caminé por el largo pasillo acompañada de la hermosa secretaria del hogar, que ya me ha cogido hasta cariño y yo a ella. - buenas tardes Sra. Jauregui, que sorpresa verla sola y no con la Sra. Cabello- dijo con mucha educación la directora del hogar, una mujer sin lugar a dudas intimidante - si, umm, hoy celebraremos el primer año de nuestros bebés y ella está en la casa preparando todo. Ella, ella no sabe que estoy aquí, será una sorpresa- respondí y ella enarcó una ceja

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