Capítulo 28: Ya llegó

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CAMILA POV

-Tay, ¿puedo entrar?- pregunté tocando su puerta y no recibí respuesta, esto es muy mala idea. Dinah prácticamente me obligó a que viniera a hablar con mi cuñada para explicarle como habían sucedido las cosas y que definitivamente no era algo que yo quisiera hacer, fue Austin el que me besó y no volvería a pasar.

A pesar de la falta de respuesta por parte de ella abrí la puerta con mucho cuidado. Cuando abrí ella estaba sentada en la cama con sus audífonos puestos pero mirándome fijamente -¿puedo?- señalé la cama para ver si me permitía sentar - es tu casa, haces lo que te de la gana- respondió. Dios, ¿por qué los Jauregui tienen que tener un pésimo carácter?

Ella no diría nada así que me tocaba a mi - Tay, yo quería explicarte como pasaron las cosas- comencé y su cara seguía de la misma manera, seria. - Fue Austin el que me besó y ni siquiera le llamaría a eso un beso. El presionó sus labios a los míos y en ese mismo instante apareció Kaleb.- le expliqué. Ella se había quitado los audífonos, me estaba prestando atención. - ¿si Kaleb no hubiese aparecido, crees que hubieses correspondido al beso?- preguntó. Era valida su pregunta, hasta yo misma me la había hecho - de igual manera no le hubiese correspondido. Taylor, yo amo a tu hermana con todo mi corazón y jamás le haría algo así. Austin me  tomó por sorpresa, yo...-

-¿por qué le permitiste quedarse? Ahora sabes que el tiene mas interés en ti que una simple amistad y aun así decidiste que el se quedara un rato mas en la casa- me interrumpió. -no lo se Taylor, solo pensé que no volvería pasar y que lo dejaríamos ahí- respondí y era cierto, no le había pedido a Austin que se fuera por que tenía en mente que lo dejaríamos ahí como si nada hubiese pasado - yo no siento nada por Austin, lo veo simplemente como un  gran amigo- quería que eso quedará muy claro.

Taylor permaneció enojada conmigo pero le prometí que hablaría con Lauren, ¿cómo? Esa es la pregunta. Volví a mi habitación con Dinah - me siento tan cansada- dije tan pronto entré -acuéstate, probablemente sea todo el estrés que estás pasando. Hice lo que me pidió , ella me ayudó a encontrar una posición cómoda y se acostó a mi lado acariciando mi barriga - ¿qué te dijo Taylor?- preguntó. No quería hablar de nada mas sobre la situación pero no podía sacarla tampoco de mi mente así que ¿por qué no hablarlo? - tengo que contarle a Laur- respondí. Eso me daba terror, su reacción asustaba todo de mi. Para mi ese tonto beso, si así se le puede llamar no significó nada pero para Lauren será todo. - estoy asustada- admití, con Dinah no tenía que fingir jamás -todo saldrá bien- trató de tranquilizarme - conoces a Lauren, sabes como se va a poner-

-no lo se, cuando le cuentes todo exactamente como pasó ella sabrá que no tuviste nada que ver- respondió Dinah y yo esperaba con todo mi corazón que fuera así y que Lauren me entendiera.

Cinco días para que Lauren regrese, desperté con Dinah a mi lado y mi tranquilidad mañera fue interrumpida por unos deseos incontrolables de vomitar. Corrí para el baño y dejé todo allí - hey, ¿estás bien?- miré por el espejo y vi a Dinah con una cara de preocupación - si, todo en orden- sonreí. Ya estaba acostumbrada a los malestares y vómitos mañaneros - ¿quieres que te prepare algo para desayunar?- preguntó

-aww, ¿quieres consentirme?- bromeé y ella rodó los ojos - ¿quieres o no?- repitió y claro que sí, no iba a dejar pasar esa oportunidad  - nada de panqueques por favor- rogué por que era lo único que me estaba cayendo mal - jamás pensé que Camila Cabello rechazara unos deliciosos panqueques con mucho syrop y banana- de tan solo pensar en ellos mi estomago volvía a revolcarse.

Dinah desapareció escaleras abajo mientras yo buscaba  terminaba de arreglar la cama y recoger un poco mi habitación. Mi celular no paraba de sonar y pensaba que era Lauren pero cuando vi la pantalla decía Austin. -No, no me llames por favor déjalo así- murmuré. El seguía insistiendo hasta que al parecer se cansó  y decidió enviar un mensaje de texto

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