ATADO A TI.

EPILOGO:

(Nueve meses después)

Luego de que mi papá nos indicará con quién íbamos a estar cada uno se fue a su posición así que caminé sin hacer ruido hasta llegar a la mía y cargué la pistola frunciendo mi ceño al escuchar la voz de Iván por el audífono en mi oído diciendo que el objetivo estaba por entrar al área del jardín así que me mantuve oculta esperando hasta que la vi acercarse con la pistola en sus manos mirando hacia todas direcciones, pero por suerte no se dio cuenta de mi presencia.

-¡Maldita sea Anahí ya dispara! —me gritó Iván molesto y rodé mis ojos cuando Matt habló diciendo que no me gritará así. —pues es que ya debe atacar y no lo hace, no es mi culpa, si ellos se salen con la suya estaremos en problemas.

-Jod*r se lo que hago, así que no me jod... —me quedé callada al sentir una contracción y apreté mi mano en la pistola cerrando mis ojos. — ¡Iván ya cállate! ¡Ya viene! —me recargué en la pared mirando hacia abajo al sentir que la fuente se había roto. — ¡Matt! ¡Ven aquí!

-¡¿Cuál ya viene?! Ya está ahí, tienes que disparar, mi*rda lo haré yo, no te muevas estoy cerca. —dijo Iván sin prestarme atención y apreté mi mandíbula. —ya estoy aquí, yo lo hago, muévete. —respiré agitada sujetándolo del cuello de la camisa acercándolo a mí.

-Pedazo de imbéc*l... ¡El bebé ya viene! ¡La fuente se rompió! —le grité aguantando mis ganas de golpearlo y grité fuerte haciendo que se sobresaltara. — ¡Los voy a matar! Les dije que no podía, pero empezaron a jod*r que el equipo no estaría completo...jod*r. —reclamé caminando con ayudada de Iván. — ¡Todo porque querían jugar!

-¿Por qué salen de su posición? Nos van a ver. —dijo Matt al acercarse y me miro frunciendo su ceño. — ¿te sientes mal? —preguntó mirándome de pies a cabeza y solo susurré "el bebé" —ah el bebé... ¿el bebé? ¡Mi*rda el bebé! —me miró asustado y me cargo con cuidado. — ¡Denise deja esa pistola de agua y corre por la maleta! ¡Está en el closet! ¡Ve corre, corre! Respira conmigo, amor. —al llegar a la camioneta me subió en la parte de atrás con cuidado y acomodé mi cabeza en sus piernas cuando subió. —Denise sube anda. —Iván subió conduciendo al hospital mientras que Pedro, Frank y papá subieron en el otro auto.

-¡Jod*r! ¡Los odio a todos! Excepto a ti, cielo. —le dije a Denise ya que se asomó desde su asiento. —ponte el cinturón. —murmuré respirando agitada y al sentir otra contracción enterré mis uñas en el brazo de Matt. —si quiere otro bebé tú lo vas a tener. —maldije por lo bajo apretando mis ojos al cerrarlos, las contracciones empezaron a ser más constantes y al llegar al hospital la camilla ya estaba esperando en la entrada así que Matt me cargó dejándome en ella.

-¡Oye esa camilla la pedimos nosotros! —alguien gritó al fondo, pero de aquí nadie me mueve porque siento que muero. —necesitamos la camilla urge... ¿Matt? Dios mío Anahí. —miré a mi suegro de la peor manera posible porque estaba impidiendo que entrara al hospital. — ¿también está por parir? —preguntó sorprendido y grité dándole una patada a Matt en el brazo para que se apurará.

-Sí papá, ¿cómo que también? —Matt le preguntó cómo si yo no existiera. —lo siento tenemos que entrar antes de que me asesinen. —la otra camilla llegó así que subieron a Alexa. —amor mira el parto de Alexa se adelantó. —me dijo cómo si nada y lo miré mal. — ¡Muévanse que esperan! ¡No ven que mi esposa tendrá a mi hijo! —regañó a las enfermeras y rodé mis ojos.

-Te juro que te voy a hacer pasar por este dolor sino me sacan a esté bebé ahora. —le dije a Matt apretando su mano con fuerza y me llevaron a la sala para prepararme, pero estoy segura de que al pasar por el pasillo vi a Diablo o quizás fue mi imaginación. — ¡Ya por favor! ¡Jod*r! ¡Esto duele mucho! —respiré cómo me lo indicó el doctor, pero no ayuda en nada, ¿maldita sea en dónde está Matt? Lo mataré si no viene rápido y creo que hasta lo invoqué porque entró casi cayéndose.

*Narra Matt*

Al parecer el parto de las tres se había sincronizado por estar juntas tanto tiempo o algo así dijo el doctor, así que aquí estábamos los tres idiot*s sin saber para dónde correr hasta que la enfermera nos llevó a cada uno a la sala. Al entrar me acerqué a sujetar la mano de Anahí besando su dorso, aunque se veía molesta se veía hermosa, no pude evitar pensar que cuando nació Mateo ella tuvo que pasar esto sin mí, pero cumplí mi promesa, durante todo el embarazo no la dejé sola ni un segundo incluso trabajé desde casa.

-Estamos listos para recibir al bebé o la bebé. —dijo el doctor ganándose una mirada fulminante por parte de Anahí porque desde que llegó está lista y decidimos que el sexo del bebé sería una sorpresa así que no tengo idea de que es, pero estoy tan ansioso. —empiece a pujar por favor. —tragué saliva cuando empezó a hacerlo, dios solo espero no desmayarme.

-Vamos, tú puedes...todo saldrá bien, amor. —le dije al limpiar su frente con el pañuelo que la enfermera me dio y aunque no me respondió por estar gritando me miró con sus ojos llenos de lágrimas. —te juro que no te haré pasar por esto de nuevo. —murmuré besando su mejilla.

El tiempo transcurría mientras ella seguía pujando hasta que un fuerte llanto se escuchó, sonreí sujetándome de la camilla para no cae. Sentía que estaba por desmayarme, pero cuando se acercó con mi bebé todo ese malestar se me olvido por completo antes de todo besé una y otra vez a mi esposa dándole las gracias, solo me dejaron cargar a mi bebé un poco, luego me sacaron.

-¿Y? ¿qué es? ¿cómo está mi hija? —preguntó mi suegro al verme salir tuve que hacerlo para que terminaran de atender a Anahí. — ¿y tú dime cómo esta Carmen? —le preguntó a Diablo que venía detrás de mí, hablen de que me dará un paro cardiaco. —Jasón salió con su bebé en brazo diciendo que era una niña y Diablo dijo que era una niña...y un niño. —dios... ¿y mi hija Anahí?

-Es... ¡UNA NIÑA! —todos gritaron emocionados en especial Denise que no paraba de llorar y luego de los abrazos me acerqué a ella — ¿quieres conocer a tu hermanita? ven vamos. —le dije a Denise y cargué a Mateo mientras que a ella la llevaba de la mano. —mira quiénes están aquí. —le dije al verla con la bebé en brazos y sonrió mirándonos. A pesar de que acaba de tener una bebé se ve tan preciosa.

-¿Emocionados por conocerla? Ven siéntate aquí, cielo. —le dijo a Denise haciéndose a un lado para que se sentara y eso hizo. —les presentó a su hermanita. —murmuró quitándole la sabana y en cuanto lo hizo Denise volvió a romper en llanto acariciando su manita con cuidado.

-Cállense, no hagan ruido que la pueden asustar. —dijo mi suegro al entrar con todos los demás detrás de él. —cómo se tardaron mucho en hablarnos para verlas decidimos venir. —reí negando despacio y me hice a un lado para que él se acercara. — ¿y cómo se va a llamar?

-Se llamará...Aurora. —sonreí mirándolas, el nombre hace tiempo lo habíamos hablado así que no había mucho que pensar. —creo que ya tienen que salir. —me burlé al ver a una enfermera entrar y sacarlos mientras los regañaba, Denise salió con ellos al igual que Mateo ya que les iban a comprar algo a ella para que comiera, mi madre no quería que se desmayara de la emoción. —por fin solos... —murmuré sentándome a su lado acariciando la mejilla de mi Aurora. —es igual de hermosa que tú.

-Matt...amor. —susurró Anahí lo que hizo que desviará mi mirada hacia ella. —te amo... —sonreí colocando mi mano en su mejilla acercándome más a ella y susurré "Te amo más" antes de besarla lentamente para disfrutar de esos suaves labios que me volvieron loco desde el primer día que la besé.

*Narra Anahí*

Y bueno...quizás mi historia no tuvo un buen principio, estuvo llena de caos, dolor, pero también de amor incondicional no solo de mi familia, eso me llevó a conocer al amor de mi vida, así que no quiero que nuestra historia tenga un final, ¿quién lo quiere cuando encontraste tu hogar? Más porque Nadia le cedió la custodia total de Denise a Matt porque todo el proceso estaba interfiriendo en un trabajo muy importante, así que el juez no dudo ni un segundo en solo dejarla ver unas horas. Me siento la mujer más completa, feliz, llena de amor y no solo yo, también Carmen que gracias a Tato y a mí se reconcilió con Diablo después de que los encerramos el día de mi boda en una habitación, también Alexa que está por casarse con Jasón y bueno Thomas está feliz con su novia además el tratamiento va muy bien, lo veremos en cuanto pueda viajar, y nuestro querido Marcus se casó en las vegas sin invitar a nadie, me ofende, pero me hace feliz que no dejé pasar el tiempo, en fin...es hora de continuar con mi vida y estoy tan feliz que no puedo pedir más, no necesito más si los tengo a ellos.