One shots bnha

Kaminari Denki

Narrador: ______

Mi día acaba de comenzar y ya es un desastre.

Se me ha roto una de las tuberías de mi pequeño apartamento y cae agua del techo.

-Vamos a tardar bastante en poder arregarla, así que hoy no podrá dormir en su casa.- las palabras del reparador me desaniman completamente.

¿Y donde se supone que voy a dormir yo ahora?

-Está bien, gracias.- suspiro y salgo hacia la academia, no quiero llegar tarde a clase.

······

-¿Entonces puedo ir mañana sin probemas a tu casa?- escucho que pregunta Sero a Kaminari cuando entro a clase.

-¡Si! Ya te dije que mis padres se han ido de viaje, ¡así que estaré solo en casa por cuatro días!- dice entusiasmado el rubio.- Llegan el lunes por la tarde.

-Perfecto, así nadie nos molestará mientras jugamos a la consola.- responde el pelinegro igual de contento que su amigo.

Mientras escucho esa pequeña conversación me siento en mi pupitre, aún pensando en dónde voy a dormir esta noche.

-¡Buenos días ______!- Uraraka se acerca a mi con su bonita sonrisa de siempre.

-Buenos días, Uraraka.- sonrio de vuelta.

-¿Qué te pasa? No tienes muy buena cara...- dice preocupada mientras se apoya en mi mesa.

-Bueno, es que se me ha roto a tubería de casa y el reparador me ha dicho que no puedo dormir en casa esta noche- suspiro, agotada.- Así que no tengo ni idea de donde voy a pasar la noche.

Con un poco de suerte, me podré quedar en casa de la castaña.

-Que mal...- me mira con pena y sé que no dormiré bajo su techo esta noche.- Yo te ofrecería mi casa, pero es demasiado pequeña y no hay sitio donde puedas dormir... Lo siento.

-Está bien, no te procupes.- sonrio.- Ya me las apañaré.

No pudimos habar mucho más, pues Aizawa entró por la puerta dando la clase por comenzada.

······

A la última clase de la mañana no se presenta el profesor, así que tenemos una hora libre.

Decido ir a entrenar un poco, así dejo de pensar y agobiarme un rato.

Después de un tiempo entrenando, decido sentarme para descansar y beber agua.

-¡______!- al levantar la mirada veo a cierto rubio eléctrico acercándose animadamente hacia mi.

-Hola Denki.- sonrio.

-Oye, ¿estás bien?- pregunta preocupado.- Hoy no has hablado con prácticamente nadie, te veo algo apagada.

Con un suspiro le cuento a Kaminari mi problema.

-Hostia, que putada.- dice una vez he acabado de hablar.

-Lo sé... Al acabar el día espero haber encontrado a alguien con quien quedarme a dormir, o sino me tocará pasar frío en un banco de algún parque cercano.- con tan solo pensarlo me moría del frío.- Espero no tener que recurrir a eso.

-¡Que va! Aquí está tu magnífico héroe para salvarte.- lo miro confusa antes de darme cuenta de lo que insinúa.

-No, no, no Kaminari.

-¿Qué? ¿Porqué no? Mis padres no estarán, no te preocupes or eso.- me guiña un ojo juguetón, y no puedo evitar sonrojarme un poco.

-Es una mala idea. Eres muy amable y de verdad que estoy muy agradecida, pero no puedo aceptarlo.- la verdad es que no me apetece dormir bajo el mismo techo del chico que me gusta, pero claro, no le puedo decir eso.