Sero Hanta

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Narrador: omnisciente.

Como todos los días, ______ entraba por la puerta de clase somniolenta.

-¡Ya ha llegado la zombie de la clase!- bromeó su mejor amigo Kaminari, acercándose a ella.

-Cállate, ¿quieres?- respondió la fémina malhumorada.

-¡______, ______! ¡Estás aquí!- ahora era su mejor amiga Mina quien avanzaba dando saltos hacia ella.

¿Cómo puede tener tanta energía por la mañana?

-Buenos días Mina.- intentó sonreirle, aunque le salió una mueca en vez de una sonrisa.

-¡¿A ella le sonríes y a mi me mandas callar?! ¡No es justo!- se quejó su amigo eléctrico.

-¡Ella no me llamó zombie, imbécil!- reprochó la chica.

No era una persona de mañana, y su carácter era horrible cuando despertaba. Necesitaba una hora para ser una persona decente, sin irritarse tan rápido.

Kaminari hizo un puchero y se sentó en su pupitre, a lo que le siguió Sero riéndose. Al último le daba miedo ______ por las mañanas, así que evitaba hablar con ella hasta pasada la primera hora.

-Bueno, después de todo esto...- dijo Mina aburrida del panorama de cada mañana.- ¡Mira, mira!- le estampó un papel en la cara, emocionada.

-¡Si me lo enseñas así no lo puedo ver!- se quejó.

-Perdón, perdón.- la pelirosa retiró el papel y se lo tendió a su amiga.

Era un panfleto donde anunciaba que la próxima semana habría una enorme lluvia de estrellas, así que organizaban un evento donde habían paraditas, para después ir al descampado del lado a ver el espectáculo natural.

-¡Una lluvia de estrellas!- de repente, todo el malhumor de ______ se esfumó, ya que a ella le encantaba contemplar las estrellas antes de ir a dormir. Estaba emocionada con la idea de ir a verlas.

-Sabía que te gustaría.- afirmó Mina.- Además, ¡es un plan muy romántico! Deberías decirle a Sero que te acompañe.- dijo pegandole suaves codazos en el costado a su mejor amiga.

-¿Q-qué?- la chica se sonrojó ante la insinuacióm de su amiga.

-Vamos, no te pongas así, mujer. ¡Sería un plan perfecto! Allí, bajo las hermosas estrellas, ¡puedes confesarte! No puedes desaprovechar esta oportunidad.- la extrovertida amiga de la fémina intentaba convencerla desde hace tiempo sobre aquello, y vio el momento perfecto en cuanto se encontró el panfleto.

-Mina, te estás viniendo arriba.- intentó calmarla, sin mucho éxito.- No pienso invitar a Sero, ¡y mucho menos confesarme! Ya hemos tenido esta conversación muchas veces, no cambiaré de opinión, ya vale.

-Sabes que no pienso parar.- avisó la recién nombrada con una sonrisa pícara.

Gracias a los dioses y para la suerte de la chica, Aizawa sensei entró por la puerta, dando comienzo a la clase.

Sero se había enterado del acontecimiento también y, como era consciente de lo mucho que le gustaban las estrellas a ______, quiso invitarla a modo de cita. El problema eran sus miedos y inseguridades que se lo hacían pasar mal, pensando que no era suficiente para la chica y sintiendo que iba a rechazarlo.

Estuvo pensando en aquello toda la mañana.

Al final no se atrevió a invitarla, y ella tampoco iba a decirle nada al respecto por culpa de la vergüenza.

••••••

Los días pasaron y ninguno de los dos tuvo el valor de invitar al otro a la lluvia de estrellas, cosa que les entristecía a ambos.

One shots bnhaWhere stories live. Discover now