One shots bnha

Keigo Takami (Hawks)

Narrador: omnisciente.

-No. ¡No, no, no, no, no, no, no!- corriendo Hawks se acercó a ______, su prometida y la persona más importante para él, la cual estaba inmóvil en el suelo, con una enorme mancha de sangre debajo suyo.-______ despierta, ¡despierta!

La zarandeó, la pegó suavemente, pero nada de eso funcionó para despertar a la chica.

Hawks, llorando y con el corazón roto, abrazó el frío cuerpo de la que consideraba el amor de su vida. Era consciente que la gente lo estaba viendo, pero poco le importaba.

Acababa de perder a la persona más importante de su vida, ya nada importaba.

······

Desde la pérdida de ______, el héroe alado no ha vuelto a ser el mismo: su carismático carácter tan propio de él apenas se mostraba, y su sonrisa confiada había desaparecido. Trabajaba muchas más horas de lo que debía para distraerse, no tenía cuidado alguno, pues consideraba que ya no tenía nada más que perder. Por las noches no era capaz de conciliar el sueño, lloraba hasta que el cansancio lo vencía.

Estaba irreconocible.

Endevor y Tokoyami, los cuales eran bastante cercanos a él desde hacía algún tiempo, intentaban subirle el ánimo de cualquier manera, pero no resultaba.

Todos estaban muy preocupados por él, pues su cambio se ha notado tanto para la gente cercana que lo conocía como para las personas que tan solo lo veían en la tele. Y es que no trataba de ocultar cómo se sentía, pues para él no tenía sentido hacer como si nada hubiera pasado.

-Sí que ha pasado, maldición.- dijo enfadado mientras se tiraba en la cama tras un largo y exhausto día de trabajo.

······

<<Hawks y ______ estaban bailando en el salón de su casa, pues esa era una de las actividades favoritas de la fémina.

-¡Ay¡ ¡No me pises!- se quejó la chica, aunque no estaba enfadada, de hecho era todo lo contario.

Estaba muy feliz de poder hacer ese tipo de actividades con él, se consideraba un mujer muy suertuda al poder salir con ese hombre. Para ella, era el hombre perfecto.

El contario pensaba exactamente igual, no se creía que estuviera saliendo con esa mujer. Él. Era perfecta para él, incluso sus imperfeciones eran increíblemente extarhordinarias, a su punto de vista.

-Perdón, perdón. Te recuerdo que la bailarina aquí eres tú.- dijo riendo, para después concentrarse en no pisarla de nuevo.

Su cara de concentración le creaba mucha ternura a la chica, la cual sonrió recordándose que le había tocado la lotería con aquel hombre.

Bailaron toda la tarde, riéndose de ellos mismos, dándose pequeñas muestras de amor y olvidándose de todas las preocupaciones momentáneamente.

En uno de los bailes finales, Hawks le hizo la trabanqueta sin querer a la fémina, la cual empezó a caer. Por suerte, el rubio es rápido y tiene buenos reflejos, y pudo coger al aire a su chica antes que cayera.

-Perdón, soy un desastre en esto del baile.- dijo mientras la ayudaba a incorporase.

Ella se acercó a su héroe, posando las manos en sus pectorales mietras dramatizaba.

-Menos mal que me has cogido, me acabas de salvar de un terrible destino, mi gran héroe alado- bromeó ella.

-Siempre estaré ahí para salvarte, princesa.- respondió él con una sonrisa, siguiendo la broma.