Capítulo 29

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El video empezó en una tipo fiesta, la persona que traía la cámara se movía mucho, por lo que las imágenes no se veían bien.

Después de caminar por un cuarto lleno de gente, el portador de la cámara, llegó a un cuarto con unas seis personas en ropa interior.

-Ya se de que se trata esto, y créeme, no quieres averiguarlo- Lili despertó de su letargo y me arrebato el control del DVD.

-El video está dirigido hacia mí, tengo derecho a verlo y juzgar si me gusta el contenido, o no- traté de ganar el mando de nuevo, pero mi hábil esposa, lo aparto.

-Te estoy protegiendo de un daño mental grave-

-Mi padre es psiquiatra, él puede ayudarme- conseguí el control, e hice que avanzara de nuevo.

-No digas que no te lo advertí... ¡Esa cabrona! Juro que me las pagara, eso no se hace-

Ignoré sus palabras, y concentre mi atención en las imágenes.

Los involucrados en el asunto, tenían puesto un antifaz. La luz era brillante, dejando ver claramente todo lo que sucedía.

-No puede ser- murmuré mirando a Lili, quien solo se encogió de hombros.

En el video se apreciaba a mi esposa, besando a la que identifique como Heivy, solo que con el cabello rubio; a su alrededor, las demás personas también se besaban y tocaban entre ellas.

Aceleré la velocidad del reproductor. Lili besando a su mejor amiga, besando a un par de tipos, siendo desnudada por una mujer, las manos de un hombre tocándola...

-Será mejor que le pongas pausa, no quieres ver lo siguiente... Hazme caso- canturreó Lili, colocando sus piernas por debajo de su trasero.

Ignoré sus palabas y mis pensamientos, dejé que el video avanzara a velocidad normal.

Sexo, sexo y mas sexo, eso contenía el dichoso video. Dos horas de sexo, claro que, no pude ver más de media hora.

-Bueno, si ya acabaste, tengo una persona que asesinar- me había quedado pasmado frente al televisor, aquellas imágenes jamás las borraría de mi mente.

Lili tomó el disco, y con toda la calma del mundo, buscó su computadora, la encendió, reprodujo de nuevo el video, mientras que yo, seguía sin poder moverme.

En ese video había de todo, mi esposa hacia de todo, excepto sexo anal, como siempre decía.

-Ya sé quien fue el... desgraciado que se vendió- colocó la computadora frente a mí, recargándola en mis piernas- Mira, ves este sello de aquí- asentí, no podía hacer otra cosa- Cuando se grabó este video, juramos solemnemente no revelar su existencia, peroooo... somos humanos, hablar de las cosas malas que hacemos, es nuestro pan de cada día- tecleo unas cosas en la laptop, y el sello se agrandó, dejando ver las siglas XC, una vez que se aclaro bien la imagen, prosiguió:

-Me tomé la libertad de marcar cada uno de los discos, de algo me tenia que servir la escuela-

-¿Y esas siglas que significan?-dije sin poder mirarla a los ojos.

-Xavier Cárdenas, el desgraciado que se vendió a tu ex noviecita. Me las va a pagar, no sabes la que le voy a armar- cerró la computadora y la lanzo a los pies de la cama.

-¿Lo grabaste por tu propia voluntad?-

-Por supuesto que sí... Eso no significa que las personas tengan derecho a publicarlo, teníamos un jodido trato-

-Ese video tiene que desaparecer...Estoy seguro que Ivette se quedó con copias, así que tengo que hablar con ella, o con Karla, con quien sea- Lili tomó mi rostro entre sus manos, obligándome a mirarla.

Te casaste con la GORDA! (Regresa!!)Where stories live. Discover now