Capítulo 45

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Una vez se dio la señal de inicio para el juego de guerra Finn envió a varias segundas clases a atacar, a mi modo de ver, eran los exploradores, serían los encargados de ver que defensas habían colocado los miembros de la Familia Freya, en otras palabras, nos dirán a donde atacar si ven un punto débil, eso si es que pueden regresar del combate en el que se encuentran en este momento, bueno, ya hay uno de ellos regresando siendo protegido por una chica gato y una elfa, ninguno tiene el mejor de los rostros.

- ¿Qué puedes decirme Raul? – Finn pregunto con seriedad.

-Espadas mágicas, magos reforzados en la torre, Ottar esta delante esperando junto con los demás ejecutivos, luego esta <Kogane no majo>, esta curando de manera constante a los demás.

-La mayoría poseen los occulus que Kuro-san y Magnus-san nos otorgaron ¿verdad?

-Así es.

-Bien, retírense, vengan para ser sanados.

-Entendido – fue la respuesta unánime que vino de los múltiples orbes de cristal.

-Kuro-san, Magnus-san, por favor, cubran la retirada, Riveria, Lefiya, bríndenles apoyo mágico.

Sonreí con diversión mientras comenzaba a estirarme, esto sería una pequeña prueba de lo que podría hacer, las colas de zorro de Kuro se movían por su cuenta, dando a entender que estaba emocionado a pesar de su rostro estoico, el muy tonto no entiende que incluso si trata de ocultar sus emociones sus cosas se mueven por su cuenta, dejando eso de lado, los dos saltamos con nuestra máxima potencia sentir tal libertad era algo que me entusiasmaba.

-Un pequeño impulso en el aire – dije mientras un aura fría comenzaba a emanar de mí.

-Lo tienes – Kuro mencionó utilizando sus colas para aumentar mi velocidad.

Salí disparado como un proyectil estrellándome contra el suelo, allí me puse de pie interponiéndome en el camino de las segundas clases de la Familia Freya, un segundo después Kuro aterrizo a mi lado, tenía que darles algo a estos sujetos, no le tienen miedo a enfrentarse a dos personas más poderosos que ellos, sin embargo, esto no era todo, un cortante viento de parte de Riveria y flechas mágicas de la tal Lefiya pasaron a nuestros lados, impactando en la primera línea de aventureros, del humo apareció un grupo de pallum cuyas armas eran un martillo, hacha, una espada y una lanza, estos siendo más grandes que ellos.

- ¿Seguros de que deben estar aquí? – Kuro pregunto con una sonrisa desquiciada.

-Sí, después de todo solo nos pidieron que protegiéramos a los heridos mientras los otros se los llevan al castillo.

-Heh ¿serán capaces de protegerlos? – Kuro pregunto apareciendo detrás del portador del martillo.

Un potente estruendo se escuchó, luego vino el choque de alguien contra el suelo, justamente ellos eran a los que él debía enfrentar, fue apodado <tirano> y creo que se lo tomo bastante a pecho, pues justo ahora se encuentra destruyendo el trabajo en equipo de los cuatro hermanos pallum, fácilmente detuvo, desvió o bloqueo los ataques de ellos con sus brazos, los cuales estaban convertidos en las garras de un zorro, si él quisiera podría acabar todo después de transformarse por completo, se supone que el tamaño de su forma de kyubi crece a medida que él también lo hace y siento curiosidad por saber que tan grande puede llegar a ser en este momento.

-Lo admito, fueron capaces de protegerlos – Kuro dijo mientras mantenía la cabeza de uno de ellos contra el suelo – ¿ustedes ya van a intervenir?

Delante nuestro, dos elfos y un hombre gato se encontraban mirando al renart con una aparente ira en sus ojos, aunque más que ira debo decir que se trata de una extrema seriedad, seriedad que Kuro respondió al desenfundar su espada y adoptar su pose de combate, luego vinieron los recuperados miembros de segunda clase, sin embargo, no fueron los únicos, detrás nuestro los miembros de la Familia Loki llegaron para apoyar, de esta manera, el enfrentamiento que Lili y Finn habían predicho que sucedería de esta manera, paso.

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