Cap. 30 - Biblioteca humana

3.4K 409 465
                                    

—M-Mami —gimoteó Luz de dolor, apretándose con intensidad la parte baja de su abdomen que yacía cubierta de varias toallas calientes—, me duele mucho

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

—M-Mami —gimoteó Luz de dolor, apretándose con intensidad la parte baja de su abdomen que yacía cubierta de varias toallas calientes—, me duele mucho.

Sus sonrojadas mejillas se manchaban de algunas lágrimas, producto del punzante dolor y alta sensibilidad en la piel que recibía todo su pequeño cuerpo. Eda trataba de mantenerse firme a su lado, tomándola de la mano y preparando un par bolsas mágicas con agua caliente, aunque no podía evitar que sus ojos se cristalicen en señal de completa empatía. 

Ella sentía con claridad cada dolor del cuerpo de su hija y le desgarraba verla así, retorciéndose de dolor clamando porque su madre la salve.

La menor parecía haberse acostumbrado a la idea que hasta sus periodos de bruja eran raros. Dolores leves en la parte baja de su abdomen, granos, y cambios de humor; sí, era horrible, pero nada que algunas pociones, hechizos y toallas calientes no pudieran resolver. Por un tiempo le fue bien. Tomó varias medidas ingeniosas junto a su madre, quién nunca se separaba de ella y llamaba a Hexside para justificar las faltas por si los dolores la superaban.

No está de más decir que también ha sido la parte más vergonzoso de su vida, para ambas, por razones que ninguna de las dos quiere volver a recordar.

Algún día Luz se infiltrará al salón de fotografías cuando nadie la vea y se quitará los recuerdos.

—Desearía crear una poción lo suficientemente buena que neutralice los síntomas —comentó Luz entre murmullos, harta de sentirse como una dinamita con la mecha prendida que explotaría en cualquier momento. Indirectamente, su comentario prendió un foco en la cabeza de su madre.

"¿Existirá cura o algo remotamente parecido?", Eda se lo cuestionó unos segundos antes que de nueva cuenta Luz volviera a chillar.

—Ven, acércate. No soporto verte así. —Eda pidió amablemente su mano, ayudándola a sentarse en la orilla de su cama.

—N-No, mami —interrumpió Luz, tratando de poner su mejor cara para intentar engañarla y que el dolor no era para tanto. Obviamente no funcionó—. Este "flujo fértil de magia" es el peor de todos... es una sensación horrible.

Y no quería que a su madre también se vea perjudicada.

—Por favor <,Luz, no insistas. Si una chica mala no puede superar algo sola, es normal y práctico pedir ayuda. 

Le resultó un tierno gesto que Luz se preocupara por ella, pero si el dolor era tan fuerte como lo describía, mamá búho debía brindarle completo apoyo, aun eso signifique sacrificar su propia salud.

—Sabes que haría lo que fuera por ti.

Juntó su frente con la de Luz, susurrando con esperanza las palabras de un poderoso hechizo que su hermana, Lilith, le enseño hace algunos años, luego que Luz chocara con un árbol por maniobrar a Owlbert sin supervisión. Resultado, un hueso roto que sanó en la mitad del tiempo determinado gracias al hechizo que dividía la carga.

La lucha de una Madre Búho - TOHWhere stories live. Discover now