Capítulo 29. Dragón Blanco.

Start from the beginning
                                    

Jiang WanYin ladeó ligeramente su cabeza y repitió:—¿Radical?—en un par de zancadas llegó hasta el lado del alfa, XiChen apenas fue consciente cuando un arma le apuntaba justo en la cabeza. —¿Quieres que te muestre qué tan radical puedo ser?

—¡No peleen!—gritó alarmado del Nie, parecía que le daría un ataque al ver la situación entre esos dos. —Si ensucio la oficina otra vez Da-Ge me matará.

WanYin parecía no escuchar las palabras del otro omega, su expresión era dura y no apartaba los ojos del Lan.

El Jiang acercó más el arma a XiChen. —Dame una razón para no dispararte en este maldito momento.

XiChen estaba sentado, por lo que miraba desde abajo al omega. Sin duda desde ese ángulo el Jiang se veía imponente y muy terrorífico. Aún con ello el Lan se encogió de hombros.

—Si quieres disparar hazlo.

—¡No! ¡No lo hagas!—suplicó casi llorando el Nie.

Los ojos avellana de XiChen seguían firmemente puestos en WanYin. —Pero procura matarme con el primero tiro, porque si sobrevivo no dudaré en sacar mi arma también.

El dedo del omega se acercó al gatillo, como si se debatiera entre tirar de una vez o no.

—Nadie le va a disparar a nadie—interrumpió HuaiSang—, toda esa energía deberíamos gastarla en los Wen. Cuando todo esto termine pueden perseguirse todo lo que quieran, pero escúcheme un momento.

XiChen observó que Jiang WanYin parecía vacilar, sus ojos dudaban. El alfa creía tener el plan perfecto para lograr que el Jiang accediera a la propuesta que tenían planeada. —Creo que WanYin teme no poder encajar con el resto.

HuaiSang se levantó para acercarse al par que parecían a punto de matarse. —No lo provoques—pidió en voz baja.

Jiang WanYin miró indignado a XiChen. —¡Claro que no tengo miedo!—Hasta el momento no había bajado su arma, y con el comentario reciente, menos parecía querer hacerlo. —¡Tu y el resto sólo me estorbarían!

XiChen veía como el omega reaccionaba tal y como esperaba, poco a poco empezaba a comprender cómo tratar con el Jiang, su facilidad para leer a las personas jamás le había ayudado tanto como en ese momento.

El Lan suspiró mientras negaba con la cabeza—Excusas—murmuró analizando cada reacción de WanYin. —Todos sabemos que si atacamos en conjunto a los Wen podremos terminar más rápido. ¿O acaso me equivoco?

Por unos segundo el Jiang no dijo nada, poco a poco el arma fue bajada, pero WanYin seguía con expresión de furia.

—No necesito de ustedes—declaró dando media vuelta para alejarse y regresar a su lugar.

XiChen se permitió sonreír ligeramente, pensó que el orgullo de ese omega quizás sería su perdición.

Aclarando su garganta el alfa habló. —Bueno, quizás nosotros si te necesitemos—con aquella oración logró hacer que el Jiang frenara sus pasos y mirara de regreso al Lan, parecía no creer lo que acababa de escuchar. XiChen se complació por aquella reacción, era muy inteligente, así que decidió aprovechar la oportunidad y agregar más cosas. —Escuché que eres muy hábil para hackear sistemas complejos, si no me equivoco fuiste tú quien ha derrumbado nuestras cámaras y programas cada vez que los demonios atacan.

No estaba mintiendo, tener a alguien con las habilidades del Jiang ayudaría demasiado.

WanYin chasqueó la lengua. —Su seguridad es una burla.

XiChen no dijo nada al respecto por aquello, en cambio fue insistente para que el omega escuchara.

—Piénsalo WanYin—podía ver que casi lo lograba. —No es necesario que luchemos codo con codo.

C O N E X I Ó N | Omegaverse & Crossover MXTX Where stories live. Discover now