Capítulo 33

156 11 24
                                    


¿Por qué digo las cosas sin pensarlas con cuidado? No tengo ni idea de que hacer o por donde comenzar ¿Qué hago intentando solucionar problemas de un país que no tiene nada que ver con el mío? Y sobre todo ¿En cuántos más problemas meteré a Jiraiya durante este viaje? Supongo que no tiene sentido pensar en eso en este momento, ahora, pasando a otro tema más importante ¿nii-san es tonto o algo así? ¿Por qué no me dijo antes que voy a ser tía? Dos meses desde que se entero que sería padre y hasta esta mañana me envió una carta informándome sobre mi sobrina, eso sí me indignó.

-No esperaba que tu hermano embarazará a Fuu-san tan rápido – Jiraiya dijo entre risas que solo me hacían sentir más cansada.

- ¿No se supone que deberías estar en otro lado? No sé ¿tal vez investigando? – exclame con cierta incertidumbre.

-Podría estar haciéndolo, pero ya tengo contenido para tres libros gracias a muchas cosas, así que en realidad podré concentrarme durante varios meses en tu entrenamiento, hablando de entrenamiento, Amaru, Menma te envió esto.

Él solo le ofreció el pergamino de ninjutsu médico que Amaru apenas abrió dejo ver que era uno de almacenamiento, cosa que la confundió, apliqué un poco de chakra provocando que las decenas de pergaminos aparecieran enterrando mi brazo y a mi amiga debajo de una gran pila de estos, volví a aplicar chakra guardándolos una vez más para aparente desconcierto de la pelirroja.

-Tengo que aprender a utilizar el chakra – ella murmuro un poco decaída.

- ¿Cuánto nos costara llegar a Nadeshiko con nuestro ritmo actual? – pregunte intentando apartar un poco el tema del entrenamiento.

-Un par de semanas, en realidad nos encontramos bastante lejos de la villa – Shizuka respondió con cierta calma que me hizo sonreír.

-Entonces no perdamos tiempo, lo mejor será avanzar durante...

Mis cadenas salieron de mi espalda intentando atravesar al hombre de capa negra con nubes rojas y una máscara en espiral naranja, pero, para mi sorpresa, mi ataque no tuvo éxito, pues no hubo ni la más mínima muestra de sangre en su ropa, tampoco era capaz de sentir la piel del sujeto con mis cadenas, lo peor fue que me confié y termine mirando directo a sus ojos, escuche un extraño quejido en mi mente, pero para este punto yo ya había perdido y no fui capaz de escuchar ni ver nada más, solo había silencio y un espacio completamente negro.

X X X

Un halón en mi chakra llamó mi atención, deje un clon encargándose del papeleo y otro cuidando de Fuu, acto seguido utilice el hiraishin, solo una persona podía llamarme de esa manera, confirme mi teoría cuando atravesé el cuerpo del enmascarado con mi mano, salvando a Jiraiya de un ataque, una vez lo atravesé por completo lo tome del cuello de su capa lanzándolo lejos, cosa que aprovecho para lanzar un ataque Katon, ante lo que respondí con un muro de tierra a la vez que enviaba una patada a mi derecha, atravesando su pecho, maldito kamui.

-Quinto hokage – él dijo de manera despectiva con su mano dirigida a mi rostro.

-Madara – respondí atravesando ahora su rostro con mi mano, provocando que él también me atravesará.

Sus brazos bloquearon una patada hacia atrás que lance en ese pequeño milisegundo después de que desactivara el kamui de manera momentánea para lanzar un ataque, mi golpe hizo que él saliera volando contra un árbol que atravesó como si nada, pensar que sirvió entrenar en combates simulados dentro de mi mente durante tantos años, ahora, dudo poder hacerlo ver las cosas en este momento, puedo ver en su mirada como esta consumido por la oscuridad, mirada que logre quitar del Uchiha que se encuentra en la aldea esperando a que vuelva a entrenarlo, aunque, si lo hago no ¿crecerá? En realidad, ya no quiero entrenarlo, así que tendré que salir con una excusa.

Ahora es su historiaWhere stories live. Discover now