Su único gran crimen fue nacer y no ser elegida para vivir.
Alana fue expulsada del Arca al haber nacido minutos después de su hermano mellizo. Siendo una bebé, nadie esperaba que sobreviviera a la inhabitable Tierra, el cruel castigo pasaría desap...
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—¿Crees que fue buena idea? Ya sabes, dejar ir a Marcus —preguntó Coriane llevándose una fresa a la boca.
—Aquí ya no nos era de ninguna utilidad —respondió la mujer con simpleza.
Coriane soltó una risa sin pizca de gracia. Se comió la última fresa antes de volver a hablar.
—Yo no pude convencerlos, ¿qué te hace pensar que él podrá?
—Es uno de ellos —suspiró Lexa sin si quiera esforzarse en ocultar sus verdaderas intenciones a Coriane.
—Exacto, uno de ellos.
Lexa miró a Coriane por unos segundos, pero ninguna de las dos volvió a decir palabra después de eso. Coriane suspiró y se retiró de la carpa de Lexa a la suya propia.
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—Se escapó, el maldito asesino escapó, y la líder consultó una audiencia con Indra. Quieren engañarnos —informó Isaac al segundo de haber entrado en la carpa de Coriane.
—¿Escapó? —inquirió Odeya a su hermano.
—¿Por qué una audiencia con mi tía? —fue la pregunta que Coriane hizo.
—No lo sabemos.
—Está loca. Indra no tendrá ni un cuarto de la piedad y paciencia que Lexa ha tenido, ni siquiera un cuarto de la de Coriane —comentó Jensen riendo, como si esperara que sus palabras se cumplieran de verdad.
Y Coriane sabía que eran verdad, su tía no tenía un ápice de paciencia, mucho menos con la gente responsable de tantas muertes y destrucción de su pueblo. Abigail había sido una tonta en pensar que con Indra se podría lograr algo. Si ni ella ni Lexa habían dado el brazo a torcer con la demanda de justicia, Indra ni siquiera iba a molestarse en escuchar palabra de la Skaikru, mucho menos ahora que seguramente también sabía que Finn había sido evacuado.
—Enviaré palabra a los Elementa de que la ejecución empezará pronto —informó Coriane antes de levantarse y caminar a la salida de su carpa, con Naga y Astrid siguiéndola detrás.
Probablemente lo más estúpido que Skairku pudo haber decidido fue sacar a Finn de aquella fortaleza, pero ya que lo pensaba para ella misma, le sonaba más bien como un plan de escape que los muchachos habían protagonizado. Muy posiblemente, no todo el mundo dentro de Skaikru había estado de acuerdo en morir por solo un chico. Ahora, gracias a aquella mala movida, Lexa enviaría un escuadrón completo en busca de Finn.
Básicamente, lo habían entregado en bandeja de plata.
