Beyond the Limits (Fuerza y Valor 2)

23- De vuelta a la parrilla

La nieve cubría gran parte de la región cerca a la capital del Norte, Caulifla y Goku volaban juntos siguiendo el rastro de aquella nave impactada.

Desde tierra, el patrullero galáctico los seguía creyendo que eran cómplices de Bresia pero al verla ayudar en ciertas ocasiones a los aldeanos alejó esa imagen de su cabeza.

—Oye, patrullero galáctico — llamó Bresia con una sonrisa juguetona —¿Por qué no han hecho nada para detener a Freezer? — indagó con la misma intensidad.

—Ni yo sé, pero mi objetivo es capturarte por robar esa joya — espetó él con cierto rencor.

—Huy qué miedo — se mofó la mujer y siguió volando aprovechando aquella debilidad del peli rubio.

Goku observaba el fuselaje con seriedad y miró de reojo a Caulifla, esta asintió y aterrizaron frente al objeto estrellado pero no era más que una vil trampa creada por Freezer.

Cuando ellos aparecieron, del cielo descendieron dos naves espaciales que en su aspecto eran idénticas y se podían confundir. También ellos podían escuchar el ruido de los golpes que intercambian Frost y Freezer.

—Maldición, ¿de dónde salieron? — habló Caulifla furiosa.

—Tch... ese es el ki de Freezer — el saiyajin mayor se mostró muy serio elevándose al cielo.

—Yo voy contigo — mencionó la menor siguiendo al saiyajin, los dos se elevaron al cielo volando a gran velocidad.

Bresia observó levemente hacia arriba como ese dúo se iba marchando de las montañas, era algo que no entendía era acerca lo del ki del que hablaban.

Caulifla seguía de cerca al saiyajin mayor, ella se acercó más a su pareja, aún no conocía a qué peligros se enfrentaría ella; Goku observaba de reojo el suelo con una enorme seriedad conforme aumentaban su velocidad para anticiparse al lugar de donde aterrizarán las tropas del emperador del mal.

—Goku — Caulifla lo miró de reojo —Te quiero — susurró sonrojada.

Él le sonrió de regreso apaciguando la pena que Caulifla tenía por decir esas dos simples palabras que para ella significan mucho, y Goku lo sabía perfectamente.

(...)

El experimento de Zorepo empezó a caminar por ese planeta descubriendo todo lo que hay allí, la nave del Supu aterrizó frente a su laboratorio destrozado, abrió su boca con sorpresa al ver que todo en lo que había trabajado se fue al demonio.

—Señor Zorepo, por favor no desista pronto hallaremos una solución a este inconveniente — dijo Sosseu colocando una de sus manos sobre el sobreviviente.

—No... ya se acabó todo — susurró con impotencia.

Detrás de ellos estaba el experimento que había salido mal, ambos sintieron una presencia extraña, se dieron la vuelta y esta frente a ellos un ser de  olor azul muy claro, casi blanco, y unos ojos muy oscuros.

Sosseu y Zorepo abrieron sus ojos muy sorprendidos, luego ese ser se dividió en cuál si fuera una célula viva. Se lanzó contra ellos dos entrando por cualquier abertura que estuviera en todo su cuerpo, los dos comenzaron a gritar de dolor mientras un par de líneas aparecían que recorrían desde sus cejas hasta más abajo del mentón.

—Con sus cuerpos podré vencer a Frost — se mofó el parásito dentro del cerebro —He nacido, soy Neurax — cerró riendo de forma maniática.

(...)

En el planeta de Champa, el obeso dios de la destrucción seguía tranquilamente comiendo las delicias que Vados había traído desde la Tierra del antiguo universo seis.

La de cabellera plateada observó brillar su báculo en señal de que un peligro inminente se acerca, Vados se acercó a su dios pero este ni atención le prestaba.

—Señor Champa — llamó la mujer con seriedad.

—Vados, no molestes — respondió de forma grosera el gato obeso.

El ángel femenino observó con curiosidad la señal de alarma en su báculo, observó a una especie de parásito entrar en los cuerpos de dos personas. No entendía qué ocurrió y decidió investigar más a fondo.

(...)

Dice junto a Letty estaban en una fiesta en algún lugar de la capital del Oeste, de alguna manera ella estaba sintiendo que lo que hacía no era correcto.

Tiempo atrás dejó de ver a Kale y no sabía a donde pudo haberse marchado ni siquiera podía sentir su ki, por alguna extraña razón ella se sentía vacía y extraña cuando estaba con aquel humano.

Pero algo le hizo abrir los ojos, observó que él estaba besando a una chica de cabellera roja en una esquina del lugar, se levantó furiosa y caminó hacia él para encararlo y decirle un par de verdades.

—Dice — llamó molesta la saiyajin.

—Oh, mi bella Letty ¿ocurre algo? — preguntó fingiendo alegría pero de parte de la chica recibió una fuerte cachetetada que lo envió a chocarse contra la barra —Kuh... Eso duele — musitó él colocando una mano en su mejilla.

—¿Qué si duele? fui una tonta al creer que tú no jugarías conmigo, vaya qué tonta fui — Letty abrió un agujero el techo y se marchó de la fiesta con un enojo incontenible.

—Demonios... Esa chica no es normal — murmuró uno de los asistentes a esa fiesta.

—No hace falta que lo digas, Roullet — habló Dice bastante adolorido.

(...)

Mientras Letty sobrevolaba llorando con desconsuelo, un grupo de soldados de Frost y Freezer la perseguían sin que ella se diera cuenta, se dio la vuelta y recibió un potente puñetazo en su rostro terminando estampada contra una montaña.

—Oye, ¿dónde están las esferas del dragón? — exigió el soldado con frialdad.

—¿Y todavía piensas que te lo voy a decir? — preguntó burlona mientras se transformó en súper saiyajin.

Su cabello segundos antes negro ahora era de color amarillo y sus ojos de color verde esmeralda muy hermosos aunque temibles, golpeó fuertemente a uno de los soldados dejándolo inconsciente varios más la atacaron pero fueron detenidos por dos ráfagas de ki, una azul y una roja.

—Ese ki es de... — habló ella sorprendida —Lady Caulifla ¿eres tú? ¿y ese anciano? — murmuró Letty despectiva con Goku.

—Creas o no, él es mi pareja — exclamó Caulifla con una sonrisa.

—Mantente en súper saiyajin excepto cuando duermas, así lo dominarás mejor — recomendó el peli palmera con seriedad aunque permanecía sonriente.

La saiyajin más joven estaba sorprendida porque Lady Caulifla era la que nunca quería a los hombres teniendo una pareja.
Observó como varios soldados de Frost atacarlos y estos sin siquiera despeinarse los iban derrotando con suma facilidad, los guerreros cayeron frente a Letty, inconscientes.

—Su... su poder es inmenso — tartamudeó Letty asombrada por la facilidad de vencer a los soldados de Frost.

—Hay algo que no me gusta — dijo Goku —Hay un ki desagradable que se siente a lo lejos — añadió con seriedad.

La sensación de temor se apoderó de Caulifla, no quería que le sucediera algo malo a su pareja, se elevó junto a Goku saliendo en dirección al lugar donde el mayor sintió el ki desagradable que describió.

Letty no se quedó atrás y optó por seguirlos a la velocidad que su cuerpo permitiera pero era inútil ya ellos dos eran demasiado veloces.

Goku tomó la mano de Caulifla, ella giró su mirada a él algo sonrojada estaba casi segura de que él jamás se alejaría de ella por más problemas que tengan. Usó la teletransportación y desapareciendo del lugar, no se dirigía al sitio de ese ki sino que fue a otro lugar.

Un lugar donde alguien especial aguardaba por Caulifla.