Beyond the Limits (Fuerza y Valor 2)

1- Encontrando paz

Dedicado a MexicanQuartz05 y a EeryKathy

Han transcurrido varios días de la derrota de Velse y la paz nuevamente se hizo dueña de las vidas de los guerreros Z, Caulifla y Goku se habían hecho más cercanos conforme el tiempo transcurría en medio de las bellas montañas Paoz.

La saiyajin estaba preparando una comida especial aunque sólo supiera lo básico en la cocina. Conocía a la perfección a Goku y a Goten que ya hacían parte de su familia asimismo como Kale.

—Vaya — murmuró ella tomando el cucharón probando la comida, cerró sus ojos dando a entender que no estaba mal —, este extraño desorden de ki que me dijo Goku que tenía es muy molesto — se quejó la chica.

(...)

Cerca de un río estaban Goku, Gohan y Goten pescando algo para llevarlo para la cena de aquella tarde, el son mayor había atrapado uno de los pescados más grandes junto con el híbrido mayor.

Gohan rememoró aquellos diez días que Cell les otorgó para que se hicieran más poderosos, el híbrido esbozó una sonrisa y miró a su padre que portaba la caña de pescar en su mano derecha.

—Oye, papá — llamó el híbrido mayor.

—¿Hm? ¿Sucede algo, Gohan? — inquirió el saiyajin.

—Sí, han pasado unos meses desde que mamá murió y... — hizo una pausa tomando un respiro profundo —, Caulifla estuvo más tiempo contigo que nosotros — murmuró el joven mirando a su padre —y eso se lo agradezco inmensamente — cerró el híbrido.

—Al principio no me cayó muy bien pero la fui conociendo y me fui encariñando con ella — dijo Goten.

El saiyajin mayor sonrió levemente dejando escapar una suave risa mirando a sus hijos, el más pequeño ya había atrapado a un pescado bastante grande a comparación de su tamaño.

Los tres volvieron a la casa de las montañas Paoz llegando allí luego de unos cinco minutos de vuelo.
Ahí dentro estaba Caulifla a quien se le veía algo molesta, la chica miró directamente a Goku que estaba nervioso por la mirada de ella, Gohan también estaba nervioso pero escuchó la risa de Goten y Caulifla resonar en el patio.

—Deberían haber visto su cara — mencionó la saiyajin entre risas —, se veían tan graciosos — añadió ella tomándose el abdomen.

Gohan y Goku ríen de manera nerviosa rompiendo la tensión que se había formado allí instantes atrás.

(...)

Ese mismo tiempo había transcurrido en Sadala, con la ayuda de Whis y Vados, Kale llegó a su planeta dejando encargado a número diecisiete de la isla que ambos protegen.

—Bien, señorita Kale ya estamos aquí — informó Vados con una sonrisa.

—Se lo agradezco, señorita Vados — hizo una pequeña reverencia al ángel.

La de tez azul desapareció en un haz de luz dejando a la joven guerrera entre las montañas desérticas del hogar de la raza guerrera saiyajin.
Incrementó su ki tomando vuelo hacia la guarida en la que aquellos "malhechores" almacenaban cualquier cantidad de alimentos y ayudas a los más vulnerables en aquella pequeña aldea.

Abrió sus ojos con violencia al sentir un ki acercándose se detuvo en el aire manteniendo una mirada seria.

—Yo creí que no regresarías — dijo una voz femenina.

—¿Letty? — indagó la saiyajin morena.

La susodicha aterrizó sobre una de las montañas teniendo en su espalda el arco y la aljaba en la que portaba las flechas de su arma.

—Es muy bueno volverte a ver — añadió la menor mirando a Kale con lágrimas en los ojos lanzándose a abrazarla —, te extrañé mucho — musitó Letty.

—También yo — dijo la saiyajin morena  mientras observa el brazalete de "Ranger" en su brazo derecho.

Letty observó fijamente los atuendos que venía vistiendo su amiga, la miró extrañada ya que no recordaba si la había visto con un traje así.

—¿Y ese traje? — indagó Letty.

—Soy guardabosques en donde estaba — respondió Kale con una sonrisa.

—¿Por qué no me sorprende? Ah es cierto que tú eras la siempre se escapaba a buscar algunos animales, bueno eso fue lo que decía Lady Caulifla — mencionó la arquera con una risa burlona.

Las dos saiyajin siguieron volando hasta llegar a la guarida de Caulifla que en la que desde pequeñas habían vivido, Letty sin duda alguna estaba emocionada por el regreso de Kale y creía que eso vaticinaba el retorno de Caulifla a Sadala.

(...)

Goku observó a Caulifla que aún no se recuperaba de su desorden de ki que adquirió por el abuso del Kaio-Ken en la batalla contra Velse. Goten golpeaba con cierta fuerza las manos de su padre, la saiyajin estaba frustrada al sentirse tan inútil luego de arriesgar su propia vida.

—Sé cómo te sientes — musitó el saiyajin mayor y ella volteó la cabeza hacia él —, debes descansar un poco y no esforzarte demasiado porque no podrás volverte más fuerte — cerró Goku con seriedad y madurez sabiendo de sobra cómo se sentía estar con su ki descontrolado.

—Está bien — sonrió Caulifla para luego mirar al pequeño Goten —, Kyabe me contó que llevará a Vegeta a Sadala, dime ¿no quisieras ir conmigo allá? — mencionó la chica mirando a su maestro.

—Claro — sonrió el mayor y luego miró a su hijo —, Goten, ¿no te gustaría ir al planeta de los saiyajin? — le preguntó al niño.

—Por supuesto, me gustaría saber cómo es el planeta de Caulifla — rió el menor —, y contarle a Trunks todo lo que vi allá — cerró Goten golpeando la palma de Goku con más fuerza.

El son mayor sonrió levemente bloqueando el puño de su hijo con firmeza pero sin llegar a lastimarle la mano.
Las imágenes del torneo de la fuerza vinieron a la mente de Caulifla cuando, a punto de ser descalificados por Goku, él les prometió una revancha.

—Oye, Goku — llamó Caulifla —, aún espero la revancha que nos prometiste a mí y a Kale — informó la mujer levantándose de la silla en la que estaba sentada.

—Muy bien — asintió el mayor con una enorme sonrisa.

—Yo iré a ver la pelea también — añadió el pequeño Goten

—Será emocionante — finalizó Goku entusiasmado.

La noche había llegado a las montañas Paoz con tranquilidad y una suave brisa de viento soplando las hojas de los árboles circundantes.
Ellos no sabían que alguien ó algo les vigila, un pequeño robot en forma de esfera observaba todo lo que sucedió ese día en las montañas Paoz.