13 | Flowershop

557 80 38
                                    

❥︎ Día trece

Oops! Ang larawang ito ay hindi sumusunod sa aming mga alituntunin sa nilalaman. Upang magpatuloy sa pag-publish, subukan itong alisin o mag-upload ng bago.

❥︎ Día trece

FLORERÍA

Asomados desde la trampilla del balcón de Marinette, los kwamis observaban curiosos la peculiar escena que se desarrollaba desde el exterior de éste, algunos un poco asustados por la extraña relación que compartían los dueños de Tikki y Plagg, y o...

Oops! Ang larawang ito ay hindi sumusunod sa aming mga alituntunin sa nilalaman. Upang magpatuloy sa pag-publish, subukan itong alisin o mag-upload ng bago.


Asomados desde la trampilla del balcón de Marinette, los kwamis observaban curiosos la peculiar escena que se desarrollaba desde el exterior de éste, algunos un poco asustados por la extraña relación que compartían los dueños de Tikki y Plagg, y otros, comenzando a hacer apuestas acerca del rumbo que tomaría aquella bochornosa discusión entre Marinette y Chat Noir. Incluso Barkk se había encargado de conseguir palomitas, aquello era mucho más interesante que ver películas de caballeros.

Y pensar que todo había comenzado con un mal chiste por parte del superhéroe relacionado con las flores, en la que se suponía debía ser una amena visita nocturna a su novia, la cual terminó en una pelea sin pies ni cabeza, en la que ambos se jactaban de sus escasos éxitos amorosos, buscando menospreciar al otro en su experiencia con ese controversial tema.

Y créanles que el conocer la identidad secreta del otro les representaba un enorme facilitador de información a su favor en esa amistosa riña.

—¡Ja! ¡Pero al menos yo tengo más oportunidades de conseguir tener una cita con alguien que tú, modelo de quinta! —exclamó Marinette, buscando defenderse. Estaba roja de la cólera. Chat le había dado en un punto bajo al decirle que él sí era valiente al querer expresarle sus sentimientos a alguien mientras que ella no. ¡La había llamado cobarde en su propia cara!—. Si me dieran una flor por cada oportunidad que tengo de salir con alguien, tendría unos diez ramos de rosas enteros mientras que tú ni un pétalo.

El chico afiló sus orejas y sus pupilas se dilataron, e inclusive podría decirse que sus cabellos se erizaron. Tenía todos los instintos felinos activados, cuan gato en una pelea.

—¿Ah, sí? —contraatacó él—. ¡Pues, en ese caso, si también te dieran una flor por cada vez que te mandaron a la zona de amistad, tendrías toda una florería!

La chica abrió su boca en una gran “O”, totalmente indignada.

No sabes con qué te estás metiendo, Agreste.

Marichat May 2021Tahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon