Más allá del destino • [ Vikings] •

PARTE FINAL. 6.

Pedido especial: Al encontrar esta combinación de símbolos →~ ∆∆~ Se pide escuchar la canción ubicada en multimedia para ayudar a meterse en ambiente.

El cabello rubio de Erik brillaba gracias a la poca luz de sol que entraba por la ventana. El bebé de pocos meses se encontraba en su pequeño catre, pateando al aire y tratando de hablar de forma incomprensible a su madre, la cual se encontraba a un costado de éste mientras su padre, Bjorn Ironside, se concentraba en analizar una y otra vez ese enigmático mapa que había encontrado tiempo atrás en su anterior viaje a París.

Liz jugueteaba con Erik a pesar de que su mente estaba en otro lado. La vuelta a París estaba prevista para el día siguiente y un suave secreto atacaba la cabeza de la angustiada inglesa. Tal era su concentración, que si quiera oyó cuando su esposo dejó de lado su entretenimiento para poner su atención en otra cosa.

Él se ubicó detrás de su cuerpo, llevando la boca a su cuello, comenzando a repartir húmedos besos sobre éste, provocando un leve salto de sorpresa en Liz. Su mano comenzó a acariciar la pierna derecha de su esposa, levantando lentamente su vestido para poder llegar a su piel.

— Bjorn...— lo llamó con tono cansino.

— Mañana partiremos sin saber cuando volveré, Elizabeth — murmuró sin abandonar los besos en su cuello. — Extrañaré el calor de mi esposa.

Liz sonrió.

— Lo sé, yo también te extrañaré — se giró sobre sí misma para encontrarse con el pecho ancho del vikingo. Elevó su rostro para poder conectar con su mirada, en un poco útil intento de que le prestara atención a ella y no a su cuerpo. — Debo decirte algo antes que te vayas.

Bjorn le obsequió una mueca pero siguió en lo suyo. Movió a su antojo el cuerpo de Liz, dejándolo reposar suavemente sobre la cama mientras él volvía a repartir besos sobre su cuerpo, ésta vez atacando sus pechos por encima de la molesta tela de su vestido.

Liz no pudo evitar soltar un suspiro lujurioso cuando sintió como Bjorn bajaba lentamente una de sus manos y comenzaba a acariciar su parte más sensible.

— Debemos hablar algo antes del viaje.

— Escucho — emitió él, corriendo con su propio rostro la parte superior del vestido, alcanzando así a besar uno de sus pechos.

— No puedo concentrarme en hablar si estás así de ocup...¡Bjorn! — gimió cuando, sin ningún tipo de descuido, él introdujo uno de sus dedos en su intimidad.

Ironside sonrió con malicia y continuó con su juego. Elevó su rostro y atacó la boca entreabierta de ella, besándola apasionadamente.

— ¿Es muy importante?

— Si.

— ¿Tanto como para interrumpirnos?

La verdad era que un nuevo embarazo era una noticia bastante importante.