~Capítulo 5~

2.9K 460 192
                                    

Han pasado dos semanas desde que llegué a este hospital, los ataques de pánico, aunque no han desaparecido del todo han mermado y me han permitido abrirme a si quiera comer con los demás

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Han pasado dos semanas desde que llegué a este hospital, los ataques de pánico, aunque no han desaparecido del todo han mermado y me han permitido abrirme a si quiera comer con los demás.

—No te había visto por aquí. —Sonríe un chico bastante alto sentándose a mi lado con una bandeja igual que la mía, sus nudillos están maltratados por lo que me imagino que tuvo una pelea reciente.

Baja la mirada a lo que estoy viendo yo y rasca su nuca algo nervioso.

—Es... una pelea tonta, por eso estoy aquí. —Levanto mi mirada a sus ojos los cuales me dicen que es un chico inocente pero su apariencia se disocia de aquella primera impresión.

—¿Por qué te peleaste? —Hablo por primera vez con alguien que no sean mis enfermeros.

—Tengo un pequeño problemita. —Sonríe y yo arqueo una ceja volviendo la mirada a mi plato.

—Es un hospital psiquiátrico... pequeño no debe de ser. —Ríe un poco como si afirmara lo que yo decía.

—¿Cuánto es lo máximo que has durado sin tener sexo? —Me atraganto con la comida y lo miro tomando algo se agua, tenía esa sonrisa morbosa en sus labios y yo sin responder me levanto de la mesa dejando parte de la comida, no estaba ofendida, pero me tomaba en un momento sensible, los sueños mojado con Poe ya no tienen su rostro, ahora sé que es por qué mi cerebro así lo quiere.

—¡Extraña! —Camino por los pasillos desolados del hospital algo nerviosa y me detengo cuando él me toma del brazo. —¿Es mucho tiempo verdad?

Frunzo mi ceño y él se planta frente a mi haciendo notar la diferencia de tamaño entre nosotros.

—¿Sabes? Tengo mucho tiempo aquí... poco a poco fui "subiendo" hasta llegar a ser asistente de tu psicólogo, no puede decir lo que hablas con él porque eso no sería ético, pero aquí las cosas cambian...

Saca un cigarro algo extraño de su bolsillo y lo enciende sonriendo cuando da la primera calada...

—¿sabes cuál es tu diagnóstico? —Dice cuando me vuelvo a poner en marcha y me obliga a detenerme ya que jamás lo había preguntado a ciencia cierta y menos lo había escuchado ya que mi mente siempre estaba ocupada batallando entre recuerdos falsos y reales.

—¿Cuál es? —Tengo miedo de saberlo, miedo de que salga algo de sus labios que ponga en tela de juicio la poca estabilidad que había obtenido en estos pocos días.

—Acompáñame. —Extiende su mano y aquí es donde me cuestiono el por qué le hago caso a alguien que posiblemente este más desequilibrado que yo.

—¿Por qué debería hacerlo? —Suelta el humo que huele a marihuana en mi rostro y sonríe.

—Porque nadie en todo el hospital, ni siquiera tu puedes andar por ahí con encendedores y cigarros de marihuana "medicinal" sin que lo metan en aislamiento... —Me lo extiende y niego ya que jamás me había drogado y no lo pensaba hacer ahora. —Además... se quién es Poe.

De un recuerdo (2) ✔️Where stories live. Discover now