~Capitulo 4~

2.8K 457 89
                                    

Despierto de golpe con el sonido de la bandeja caer sobre la mesa a mi lado muy cerca de mi, coloco una mano sobre mi pecho y miro en esa dirección encontrandome con Christian y esa sonrisa que no sabia como interpretar

Oops! Ang larawang ito ay hindi sumusunod sa aming mga alituntunin sa nilalaman. Upang magpatuloy sa pag-publish, subukan itong alisin o mag-upload ng bago.

Despierto de golpe con el sonido de la bandeja caer sobre la mesa a mi lado muy cerca de mi, coloco una mano sobre mi pecho y miro en esa dirección encontrandome con Christian y esa sonrisa que no sabia como interpretar.

—Disculpe madame. —Dice haciendo una reverencia y respiro hondo cuando me recuerda la manera en la que Poe me llamó por primera vez.

—¿Que dijiste? —Tomo asiento y lo miro fijamente a los ojos intentando permanecer cuando todos los recuerdos pasan por mi mente sofocandome de inmediato.

—¿Sabes lo que le pasó a la última persona que tuvo ataques asi como los tienes tu? —Camina por la habitación con esa sonrisa en su rostro que daria todo por borrar. —Quedó tan loca que ella misma se quitó la vida... —Sus palabras no ayudan en lo absoluto y mis lagrimas se hacian presentes al igual que la ira que me empezaba a consumir.

—Dejame en paz... —Jadeo cerrando mis ojos intentando controlar mi respiración siguiendo las instrucciones que tenia para estos casos.

—Si no te controlas serás el proximo nombre en esa pared... —Me levanto sin poder evitarlo y mis puños viajan a su pecho una y otra vez buscando que simplemente se callara.

—¡Viví una puta mentira y al despertar todo es una pesadilla! —Grito empujandolo y viendo que aun tenia esa sonrisa como si mis golpes no le hicieran mas que cosquillas. —¡¿Que es tan divertido joder?!

Toma mis brazos por encima de mi cabeza y me lanza a la cama inmovilizándome con su cuerpo.

—En esos momentos es cuando vuelves a ser tu, cuando a pesar de que el aire te falta y todo te da vueltas eres capaz de salir por tu cuenta de una habitación y hacer lo que te ds la gana, eres capaz de levantarte y golpearme una y otra vez haciendome callar. —Me levanta y me abraza. —No soy Leanette, no voy a hablarte suave y darte la comida en la boca como si fueras una estupida que no sabe hacer lo mas básico, aprovecha los minutos que tienes entre mis brazos porque me quema el simple hecho de brindarle "afecto".

Se levanta algo aturdido y sacude su uniforme completamente blanco y limpio.

—No quiero que termines igual que ella. —Mis ojos arden a pesar de que estoy mas calmada pero la confusión de sus palabras amenaza con alterarme otra vez.

—¿Que significa? —Limpio mis lagrimas con la manga y el simplemente no responde y se encamina a la puerta haciendome correr tras el, —¡Que mierda significa!

Dos hombres altos entran inmediatamente el sale y me toman de los brazos lanzandome a la cama como si fuera un costal de papas sin ningun tipo de piedad, veo esa aguja apuntarme otra vez y es cuando mas me altero forcejeando e impidiendoles por un par de segundos el ponerme esa cosa.

—¡Traigan a ese hijo de puta! —Me giran contra la cama e inevitablemente siento aquel piquete que luego de unos pocos segundos les brinda a ellos la posibilidad de soltarme y de yo permanecer en la misma posición cerrando los ojos al mismo tiempo que la puerta.

***

—¿Que es lo que sientes? —Me arrodillo entre sus piernas notando como se contenia y evitaba tocarme. —Poe...

—Quiero empotrarte contra esa cama y cogerte hasta romperte. —Hace un silencio en el que paso mi lengua por su glande para provocarlo. —Por favor no me provóques...

Se tensa y su mirada conecta con la mia dejandome ver como las venas en su cuello se alteran y su pecho sube y baja.

—Si continuas no voy a poder parar... liberaste algo en mi que no se como controlar Veronica... —Me toma del menton y me aparta levantandose de la cama y tomando su ropa algo torpe por lo excitado que estaba.

—Entonces no lo hagas... —Lo abrazo por la espalda y deslizo mi mano hasta su miembro tocandolo rogando porque terminara de perder la cordura.

Suelta las cosas que tenia excepto su corbata y se gira enredando su mano en mi pelo haciéndome jadear por el dolor.

—Ahora te aguantas, te voy a romper, a partir en dos y luego te llevo al puto hospital para que te cosan y poder volverte a romper. —Me gira atando mis brazos en cruz detras de mi espalda y lanzandome a la cama boca abajo. —Te hare sentir en horas lo que tu marido no supo en años.

Mete un trapo en mi boca y escucho como toma su cinturón y sin darme tiempo de asimilarlo me azota haciéndome retorcer, sin parar de hacerlo me toma del pelo y lo mete sin compasión en mi ano una y otra vez mareándome del ardor y dolor que sentia.

—Ni en tus putos sueños olvidarás de quien eres.

Debes despertar Veronica. —Abro mis ojos de golpe y observo a Leanette a mi lado con un semblante preocupado. —Esos ataques de pánico disminuirán con el tiempo, solo debes de relajarte ¿Esta bien?

¿Ataque de panico? El único ataque que tengo ahora mismo es entre las piernas, me pregunto, Bonavente, ¿Como es que logras excitarme desde otra dimensión?

Cubro mi rostro con mis manos y cruzo mis piernas por un momento intentando disipar el calor que me carcomia por dentro,

—Tengo entendido que no cenaste anoche. —Dice y quito las manos suspirando pesadamente en cuanto caigo en cuenta de lo que había pasado.

—¿Donde esta ese hijo de puta? —Me siento en la cama la miro a los ojos. —Se supone que el debe estar aqui y no tu.

—Veronica calmate...

—¡¿Que me calme?! —Elevo un poco mi voz pero cierro la boca em cuanto veo a uno de los hombres que me había hecho esto detenerse en la puerta. —Me alteró y luego simplemente se fué y dejó que me sedaran como si fuera una porquería. —Respondo en jadeos. —Que ya no quiero que me seden... que me da miedo dormir ¿No lo entienden? Que cada vez que despierto me dan ataques de pánico pensando en que volverá a pasar...

—Dijo que debía tomarse unos dias libres pero no dijo ningún motivo o al menos yo no lo se. —Hace una mueca y suspira al escucharmen. —Mientras yo este nadie lo hará, nadie te va a tocar y pediré tener mas días contigo que el... pero debes ayudarme, comer a tiempo, ducharte, ir a tus terapias. —Bajo la mirada y ella me toma del menton elevandolo. —Entraste aqui de manera voluntaria pero si al final de todo un medico dice que eres un peligro para ti o para la sociedad... esta será tu casa definitivamente.

Asiento y aunque con manos temblorosas tomo la cuchara de mi desayuno mas firme y la llevo a mi boca muerta de hambre al no haber comido nada la noche anterior.

—Deberia darte un premio... —Dice y sonrie cuando ve que al fin puedo comer sola.

—El mejor premio seria alejarlo de mi y no volverlo a ver en mi puta vida. —Sonrio en una mueca sin mirarla mientras comia.

—Me temo que estará a tu lado hasta que salgas de aqui, la mejor manera de quitartelo de encima es sanarte y tu eres la unica que puede hacer eso.

Me sonrie y se levanta saliendo de la habitación y dejandome sola con mis pensamientos entre estas cuatro paredes blancas y aburridas.

<<>>

<<>>

Oops! Ang larawang ito ay hindi sumusunod sa aming mga alituntunin sa nilalaman. Upang magpatuloy sa pag-publish, subukan itong alisin o mag-upload ng bago.
De un recuerdo (2) ✔️Tahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon