~Capitulo 1~

3.7K 499 156
                                    

Agradezco que al levantarme aún no hay nadie a mi lado, el otro "paciente" que debería estar conmigo aun no lo han asignado

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Agradezco que al levantarme aún no hay nadie a mi lado, el otro "paciente" que debería estar conmigo aun no lo han asignado. Es mejor así.

He intentado mantener la cordura, pero el dolor se extiende por mi cabeza haciéndome permanecer en cama, mis lágrimas me ahogan y me siento enferma, ¿cómo es que podré salir de esta?

—Señorita Lodge... —Me quitan las sabanas y me levantan abrazándome calmando mis jadeos con el paso del tiempo. —Va a estar bien, usted no sé preocupe.

Una chica de una tez morena se separa con una sonrisa que no se borra a pesar de que no la correspondo, no la reconozco, pero lleva un uniforme similar al del joven anterior y en su placa figura el nombre "Leanette Duvois"

—Soy Leanette, su familia ha hecho lo posible para que usted tenga todas las atenciones y comodidades posibles en el hospital, Christian y yo nos encargaremos de sus comidas, atenciones personales y de sus terapias. Usted tendrá cuatro días con él y tres conmigo intercalados.

Toma las pequeñas bolsas con productos de baño intacta y se levanta con ella en las manos.

—¿Ya comió? —Niego con la cabeza gacha y una lagrima volvía a escaparse de mis ojos.

—Antes de asignarnos a un paciente nos informan por lo que ha pasado o el diagnóstico que tiene. —se sienta frente a mí y mantenía la sonrisa, aunque ahora una más apagada. —Me contaron sobre...

—Es suficiente. —Odiaba ya que todos me trataran como di estuviera loca y debían tenerme pensé y cosas por el estilo.

—Disculpe. —Sonríe y permanece aún frente a mi sacando de su uniforme un collar de hilo blanco y una piedra verde en medio. —Hace seis años perdí a mi esposo, era un militar y su tropa fue abordada por los contrarios en un lugar que no conocían, algunos pudieron escapar, pero otros no... —Levanto mi vista a ella sin decir nada. —Entre los que escaparon estaban mi esposo y su mejor amigo, corrieron durante horas lejos del lugar, pero su mejor amigo pisó una mina y si quitaba su pie, volaría en pedazos, él tenía una familia hermosa y un bebé acabado de nacer por lo que Harold colocó su mano haciendo presión en el detonador y obligó a su mejor amigo a correr lejos.

Siento algo moverse dentro de mí, como si alguien, aunque no fuera la misma situación podía entender por lo menos el sentimiento.

—Corrió por metros cuando escuchó la explosión, no estuve ahí pero cuando sucedió sentí un dolor intenso en mi pecho y en ese momento supe que algo había pasado, no tuvimos tiempo de tener nuestra familia, no tuvimos tiempo de celebrar nuestro primer aniversario como casados y créeme que, aunque no pasamos por lo mismo entiendo perfectamente lo que sientes.

Mis ojos se llenaron de lágrimas, era una historia conmovedora en extremo además de que sentía que por fin podía confiar en alguien y dejar de lado las barreras que había tenido conmigo todo este tiempo, me extiende aquel collar y lo tomo algo confundida.

—Dicen que si la llevas contigo absorbe tus penas y el dolor, no sé si funcionó, pero pude comprender que el ya no está.

—Él nunca estuvo. —Rompo en llanto y vuelve a abrazarme quedándose así hasta que me calmara. —No tengo nada de él que pueda atesorar conmigo y eso me está matando. —Confieso por fin.

—Si lo tienes y no te das cuenta. —sonríe colocando el collar en mi cuello con delicadeza. —¿Qué crees que era lo más importante para él?

—Yo. —Respondí con una sonrisa triste mirando a la nada antes de que volviera a sentarse frente a mí.

—Eso tienes de él, eso que el tanto amó lo tienes para ti y sea un sueño o sea real siempre te vas a tener a ti. —sonríe y se levanta con aquel bulto pequeño en sus manos. —Ahora vamos, me llamarán la atención si saben que hay una paciente oliendo a chivo por el hospital, sonríe y me estira la mano para que la tome.

—Los baños son algo incomodos, pero estarás bien si te duchas en este, no te preocupes, los pacientes que han asesinado personas y ese tipo de cosas están del otro lado, no te pasará nada.

Me entrega el bolso y sonríe esperando que ingrese en el baño que me había señalado.

—¿Quién pagó para que ustedes estuvieran conmigo? —Me giro antes de entrar para poder mirarla.

—Por lo que tengo entendido tú madre. —Sonrió y asiento entrando en la ducha quitándome el pijama blanco.

El agua cae por mi cuerpo y me hace pensar en tantas cosas, se pueden contar con los dedos de una mano las veces que he sonreído en estos dos años luego de haber despertado, no he podido salir y trabajar como lo hacía en el coma, no he podido tener sexo con Lincoln a pesar de que he visto que no es el mismo que recuerdo, que este si se preocupa por mí y de hecho es quien cuida a nuestro "hijo" pero sinceramente no creo que si hay algo entre nosotros se pueda salvar, solo tengo un sentimiento en mi corazón cuando se trata de él y es rechazo.

Controlo mis lágrimas, estoy irritada y por mas mal que suene necesito el sexo que Poe me daba, ese intenso, enérgico y placentero que dejaba mis piernas débiles y mi corazón acelerado, ese que me dejó embarazada.

No creo poder amar a nadie sinceramente en mucho tiempo, primero debo sanar y estar estable para poder volver a tener un trabajo y comenzar una nueva vida.

Según lo que decía el papel que me habían entregado al ingresar al hospital, no se permitían visitas los primeros tres meses por lo menos en mi caso, así que estaría libre de Lincoln y ese niño por un tiempo.

Me duele pensar que son mi familia y que estoy rechazando a "Mi hijo" pero por más que lo intenté, por más que forcé una relación entre nosotros aquello simplemente creaba más distancia en nuestro corazón.

Paso el jabón muy suave por mi cuerpo mientras el agua caliente quemaba mi piel misma que se tornaba roja por la temperatura tan elevada que tenía.

Me giro y Lea se adentra en el baño con una toalla para mí, la tomo y con cuidado de no caerme me visto con una que saco de un plástico.

—Estoy lista... —Miro a mi enfermera quien toma de mis manos las cosas que había utilizado y espera a que cruce delante para empezar a caminar.

—Sé que no haz comido nada desde que llegaste, ¿Quieres que bajemos juntas? —La miraba al entrar en mi "habitación" algo dudosa ya que no sentía nada de apetito. —¿Recuerdas lo que hablamos? ¿Que debes cuidar lo importante para él?

Suspiro y me siento sobre la cama recordando nuestra última cena y lo que se había esforzado para que yo comiera bien.

—Te traeré algo ligero, pero no te acostumbres, tienes suerte de tenernos porque aquí si no haces lo que dicen vas a una habitación en el sótano y te dan electrochoques hasta que haces las cosas por inercia. —se detiene en la puerta y me mira. —Si no cooperas nos van a retirar de tu lado y te quedaras sola en la casa del diablo.

Afirma y cierra la puerta detrás de ella dejándome con un mal sabor de boca.
<<>>

                  <<>>

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
De un recuerdo (2) ✔️Where stories live. Discover now