🦋 › ♡˖°꒰ 1 2 2

1.2K 177 17
                                    

México estaba en la sala de espera del hospital, Argentina había entrado de emergencia por algunos problemas respiratorios, temía por su solecito, no quería que se enferme otra vez de la misma forma, sería horrible

Ups! Gambar ini tidak mengikuti Pedoman Konten kami. Untuk melanjutkan publikasi, hapuslah gambar ini atau unggah gambar lain.

México estaba en la sala de espera del hospital, Argentina había entrado de emergencia por algunos problemas respiratorios, temía por su solecito, no quería que se enferme otra vez de la misma forma, sería horrible. No solo fue su respiración pero también el bebé que ya iba a nacer, estaba más que nervioso, estaba muerto de miedo. México no paraba de pensar en lo que le estaban haciendo a su esposo ahí dentro.

Preguntaba cuándo podía ir a verlo, estaba desesperado porque no le decían nada de Argentina. Le asustaba mucho lo saber nada de él, hasta que por fin le dijeron.

—¿Puedo entrar a verlo? Por favor, necesito estar con él.

—Argentina está durmiendo, está muy cansado y lo mejor será que tú también vayas a descansar, estás muy estresado y te está afectando también.—OMS le dijo a México, se le veía mucho el estrés y el cansancio que tenía.

Se fue a casa, al estar en la cama se quedaba viendo al techo, queriendo quedarse dormido, pero después despertaba de golpe al recordar que Argentina estaba solo en el hospital. No fue hasta varias horas después que logró dormir.

Se despertaba a veces durante unos tres minutos más o menos y volvía a dormirse, así varias veces. Lo llamaron después de dos días, Argentina estaba estable, pero al parecer todavía muy adolorido, debía de quedarse más tiempo en el hospital.

Fue al hospital ese mismo día, estaba descansado y de buen humor al saber que su solecito estaba bien. Cuando llegó a la habitación, lo vio ahí durmiendo todavía. Sonrió, le había llevado unos girasoles y un pastelito para que pueda comer cuando despierte.

Se sentó a esperar a que despierte, lo cual no fue demasiado tiempo, después de unos minutos, Argentina comenzó a despertar, bostezando al poco tiempo, miró a todos lados y se encontró con la figura borrosa de su esposo, sonrió.

—Buenos días, solecito.

—... Mmh...

—Tranquilo, ya estás bien.

—... ¿Bebé?

Preguntaba por su bebé.

—¿Bebé?

—Bebé... Bebé....

Quería ver a su bebé cómo le dijeron que podía hacerlo. Al parecer Mextina estaba en cuidados, estaba algo débil por lo que no podría ir a ver a sus padres en un par de días.

—Los doctores dijeron que Mextina podrá estar con nosotros en unos días, cariño, no te preocupes, está bien, fui a verlo.

Argentina no quería nada más que dos cosas, su esposo y a su bebé.

𝐒𝐎𝐋𝐄𝐂𝐈𝐓𝐎, mexarg, terminada.Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang