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Nadie más sabía del embarazo de Canadá más que ellos tres obviamente, el bebé que ya no era un bebé, ya era un niño obviamente mucho mayor que Mextina, ¿Por qué no se había dicho nada? Canadá no quería arruinar la relación que tenía México con Argentina con un bebé que era del mexicano, así que decidió callarse y cuidar del bebé solo, por eso se fue con USA, lejos de México para que no pueda verlo.
México no se enteró de que tenía un hijo hasta que el bebé tenía dos años, Canadá lo llamó en medio de la noche, llorando, porque no sabía que hacer con un bebé ahora, no podía salir a ningún lado, ni siquiera a trabajar porque tenía que llevar al bebé con él y eso no era bueno, no quería que descubran al bebé.
Pero se debía de saber.
—You should already say it, one day Canada will come out to say it and it will be worse. For you and your husband. « Ya deberías decirlo, un día Canadá saldrá a decirlo y será peor. Para ti y tu esposo. »
México no quería decirlo sin antes hablarlo con Argentina, llevaba tiempo planeando en como decirle, pero tenía miedo de como iba a reaccionar, obvio iba a estar molesto, porque no le había dicho nada y ahora tenían una familia, que no se estaba haciendo cargo del bebé con Canadá tampoco.
Aunque no era un bebé, ya tenía casi dieciséis años, creciendo sin otra figura paterna, Canadá siempre le había dicho que algún día su padre iba a aparecer, que su papá lo quiere mucho... No le había dicho que su papá tenía otra familia ya.
—Hablaré con Canadá, y Argentina también después de esto, te pido que... No lo digas en la conferencia, por favor, yo me hago cargo de todo.
USA suspiró, tampoco iba a ser tan malo como para decirlo, ya que eso también enojaría a Canadá, y mucho, porque el quería ser el que lo diga.
—Fine.
El del águila suspiró, viendo cómo se dirigía a la salida de ese lugar para irse a dónde iban a quedarse durante ese día. No sabía que iba a decir o como iba a explicarle lo que había pasado a Argentina. Agarrando su teléfono, le mando un mensaje diciéndole que debía de hablar con él de algo serio, que iba a salir mañana temprano cuando llegue.
Argentina recibió ese mensaje, estaba dándole un baño a Mextina, ya que iban a salir a dar un paseo con Chile y algunos otros países, entre esos también Uruguay con su bebé.
—¿Hablar?—Se cuestionó así mismo. Mextina también se confundió.
—¿Ha... Hablar? ¿De que?
—No, no, no contigo, mi amor.—Argentina le acarició el cabello.
