Había metido la pata con ese comentario, iba a descubrir que las acompañamos toda la noche.

—Ya decía yo que no estaba alucinando. Ayer cuando llegamos, ustedes estaban aquí— asentí ante su comentario y ella volvió la mirada hacia el techo— Creí que el alcohol me había causado la alucinación de verte—

—El chofer nos informó que estaban por llegar a casa, así que inspeccionamos un poco el estado en que venían... ¿No te duele tu puñalada?— cambié el tema antes de que descubriera mi mentira.

—Que exagerado. Solo es una pequeña cortada, a cualquiera le pasa— hizo un gesto con la mano para restarle importancia.

—Sigo sin creer que tu sola te hayas dado las cinco puntadas para cerrar tu herida. De milagro no te desangraste en la noche. Tendremos que cambiar el colchón, dejaste un charco de sangre en el— Lili soltó una carcajada que hizo que sus senos se movieran al ritmo del sonido.

Era inevitable verlos, estaban apenas si cubiertos por esa pieza de seda negra que usaba Lilith para dormir. Pensar que se los había mostrado a unos completos desconocidos, me hacía enojar.

—Tengo mucha experiencia en coserme a mí misma...Me gustaría saber que paso, pero ni siquiera Heivy que estaba sobria, sabe que aconteció—

—Conozco un remedio para el dolor de cabeza— descaradamente pase mi mano derecha por sus senos, sintiendo la calidez de su piel, aun por encima de la tela.

—El sexo es el remedio para todos los males...Mi mente quiere una buena revolcada, como a cualquier mujer, el alcohol me pone muy golfa y deseosa de contacto...Lastima que mi cuerpo no piense lo mismo, estoy tan adolorida que parecería muerta. Sentirías que te estas cogiendo un cadáver y eso no está lindo... a menos que te guste la necrofilia, en ese caso si sería lindo—

—Abre las piernas y flexiónalas... voy a quitarte el dolor de cabeza y a reactivar tu cuerpo— soltó un quejido y me miro haciendo un puchero.

— ¿Tengo que hacer todo eso? Si lo haces tú, mañana dejo que disfrutes de una rusa, sé que te gustan mis niñas— movió sus cejas pícaramente, haciéndome reír.

Me levanté y rodeé la cama para llegar a sus piernas. Tomé sus tobillos y abrí las puertas al paraíso. Le ayude a flexionar las piernas y baje besando primero el interior de su muslo derecho y luego el izquierdo.

—Sin ropa interior...eso me gusta— conseguí una risa ante mi comentario.

En lugar de pasar directamente  a la acción, levante su babydoll y fui besando su abdomen, pasando con suavidad mis labios por la herida en su cadera.

—Hazlo de nuevo...siento alivio cuando besas mí lastimada piel—

Con sumo cuidado, ejercí solo un poco más de presión. Lilith gimió suavemente. Tras una tercera ronda de besos por esa zona, subí hasta llegar a la curva de sus senos. Quería torturarla un poco, así que me limite a besarlos por encima de la tela.

Mordí y succione sus hombros, pase la punta de mi lengua por lo largo de su garganta, llegando hasta su mentón. Baje por la mandíbula hasta su oreja, respirando su delicado aroma.

— ¿Ya va desapareciendo el dolor?— susurré en su oído. Obtuve otro gemido antes de su respuesta.

—Sí...poco a poco se va... tal vez si pones tus labios junto con los míos, desaparezca más rápido—

Tomé su boca, sintiendo como su corazón latía tan rápido como el mío. Jugamos con nuestras lenguas, peleando por el control.

— ¿Y ahora?— pregunté sobre sus labios.

Te casaste con la GORDA! (Regresa!!)حيث تعيش القصص. اكتشف الآن