—¿Menos tragedias? ¿Qué intentas decirme? —inquirió y comenzó a retomar su forma abquim.

—No deberías volver a tu forma abquim hasta dentro de unas horas, cuando recuperes tu poder —desvió el tema Nian.

—Debo hacerlo, eres incapaz de verme a la cara si no lo hago —renegó Rix. Ese aspecto de su hijo no podía atribuirlo a Zafira, él sabía cuánto aprecio y respeto le tenía la diosa a los raix, así que el rechazo de Nian hacia su especie venía de otro sitio, quizás era porque se había criado en una tierra rodeado de dioses que lo odiaban—. ¿Cómo fue tu crianza?, ¿qué fue lo que te contó Zafira a media que crecías? —decidió preguntar al percatarse de que nunca antes lo había hecho.

Nian agradeció el tiempo extra que le otorgó para pensar mejor cómo debía decirle lo próximo que iba a suceder. No obstante, tampoco sabía muy bien qué era lo que debía contarle a su padre con respecto a su educación.

—Zafira no me dijo mucho mientras crecía, en realidad creo que hasta que no cumplí los diecisiete años no la vi tan seguido. Es decir, mientras que era un niño me críe en una parte alejada de estas tierras, no sé muy bien dónde era, y solo vi a Zafira tres o cuatro veces, solo apareció en los momentos en que mi poder se salió de control y causó muchos desastres. Creo que iba para asegurarse de que estuviera vivo y que no hubiera asesinado de forma accidental a mis cuidadores —narró con extrañeza, le parecía demasiado surreal hablar de su infancia con su padre, más si tenía en cuenta que cuando era pequeño creyó que nunca lo iba a conocer.

—¿Cuidadores? —escuchar que otras personas habían estado criando a su hijo cuando a él le habían quitado esa posibilidad lo enfureció.

—Sí, algo así, no comprendí muy bien quienes eran, era algo extraño, cambiaban siempre que yo hacía un desastre con mi poder, a veces me dejaban verte y... también me dejaban ver el pasado, el tuyo y el de mamá, cuando estaba muy triste, ellos llamaban a Zafira y ella les entregaba un cristal y con ese cristal podía ver cómo había sido su vida antes de mí y mis primeros meses con ustedes. Pero sí, tenía cuidadores, otros uviem que me explicaban todo lo que debía saber sobre mí —intentó explicar, pero era imposible porque no había una forma exacta de definir lo que Zafira había hecho para mantenerlo lejos de la vista de todo el mundo, lejos de las miles de amenazas de muerte que se cernían sobre su cabeza.

—Eres el único uviem vivo —delató Rix.

—Lo sé, pero, como te dije el otro día, las almas de los uviem se transforman en estrellas, Zafira puede traerlas devuelta por un tiempo si mantiene la energía de ellos estable, no duran mucho, tres o cuatro años hasta que sus almas deben regresar a descansar, no recuerdo muy bien su explicación.

—¿Te criaron personas muertas? —la indignación que se había filtrado con la voz de Rix era evidente.

—No estaban muertas, en el momento en que Zafira las convoca, crea un bucle en el destino, algo que es muy difícil de sostener, por eso puede llamarlas, no comprendo muy bien cómo, pero son sus versiones de antes de morir, son esas personas, vivas —intentó defender a la diosa—. Y no diría que me criaron, me enseñaron lo que debía saber, leer, escribir, utilizar de forma básica mi poder, me educaron, no me criaron. Eso lo hicieron ustedes, mamá y tú, pero en una versión modificada del destino, no eran ustedes en sí, sino lo que hubieran sido si mi destino hubiera sido diferente.

Rix cerró sus ojos con fuerza y se contuvo para no ir a buscar a la diosa.

—Podríamos haberte criado tu madre y yo, si Zafira nos lo hubiera permitido —gruñó.

—No, no podrían haberlo hecho, lo sé muy bien, me encargué de mirar cada rama del destino, del mío y del de ustedes y no era posible, en todas Aleck aparecía para asesinarme, en todas, incluso en la que Zafira los llevaba conmigo a ese lugar aislado Aleck nos encontraba y nos asesinaba a los tres, siempre, antes de que yo cumpliera un año —dijo con amargura—. Yo también creía lo mismo, que Zafira solo lo había hecho para poder controlarme, pero no, no era así, me aseguré de eso, no deje ni una sola opción, ni una sola línea sin revisar. No había posibilidad de que ustedes me criaran y que yo o los tres sobreviviéramos...

El último uviem ✔ [Destinos 1]Where stories live. Discover now