Más que una simple belieber || jb.

capitulo 56

-Haciendo que cada vez que me toques se haga una constumbre y que tú a mi lado te hagas una constumbre- Recordé lo que le había dicho. Y tenía razón, es obvio, todo aquello es obvio, y cada vez que él no estaba a mi lado, sentía un tremendo vació en mi interior, es como si necesitará de él, es como si él fuera mi óxigeno, antes no era tan así porque no lo conocía. Porque no sabía lo que era estar a su lado cada hora, porque no sabía lo que era abrazarlo y besarle el rostro.

Ahora él está en Europa, ese día que había venido sólo era por la ayuda de Jack y se devolvió a los shows que tenía que hacer. Suspire.

-_______...¿Estás bien?- Me pregunto mi mamá, porque en este mismo momento estabamos los tres comiendo en la mesa. Los miré, los dos esperaban una respuesta de mi parte.

-No- Les dije y volví a 'comer' cuando en realidad revolvía la comida.

-¿Hay algo de lo que podemos hacer?- Me pregunto de nuevo, los miré, miré más a Jack.

-Si- Sonreí.

-¿Qué?-

-Como devolverme mi vida- Los miré con la ceja alzada, luego volví hablar -¡Ah, no, lo siento, yo no tengo ese permiso para mi, lo siento!- Les dije sacásticamente.

-¡¡¡Ya basta!!!- Grito mi mamá, me asuste -¡Estoy cansada de tus niñerías de pendejadas ¿Qué coños quieres que haga?, ¿Qué yo no tengo derecho hacer feliz?!, ¡Te he aguantado cada uno de tus estúpidos gritos y quejadas todos estos meses, pero ya no, _____ ¡¡¡soy tú mamá me debes respeto!!!- Me dijo, la miré con lágrimas en los ojos, negué con la cabeza suavemente, vi a Jack quien se tapaba la cabeza con las manos mientras suspiraba.

-¡¿Qué te debo respeto?!, ¡¡¡Por favor!!!- Me pare de la mesa y me puse enfrente de ella.-¿Cuándo tú me ocultaste todo- Dije apuntando a ese señor -¡¡¡Cuando yo tenía derecho a saberlo!!!, ¡¡¡Pues que mal mamá!!!, me ocultaste esto y que más cosas, eres una estúpida, ¡¡¡tú no eres mi mamá!!!, eres una- Antes que dijera la palabra una cachetada llegó a mi mejilla. Me dolió, dolió mucho, pero más dolió que 'ella' lo allá hecho, la miré ella lloraba viendose las manos.

-No; ____ entiendeme...

-Te odio- Le dije y corrí hacía arriba, llegué a la puerta entre y la cerre de un portazo.

Todo lo que sentía en este momento era rabia, mucha rabia, pero más que nada dolor, tenía mucho dolor en mi corazón, cada vez mi vida es un infierno, un verdadero infierno.

Pensé que todo estaría mejor, pensé tantas cosas, ahora que con mi mamá nos volviamos a llevar más bien, pero todo empeoro. Saque mis lágrimas de mis mejilla.

Entonces lo vi, sabía que esto iba a doler, nunca había tenido la necesidad para hacerlo, muchas lo habían hecho, pero yo no, lo encontraba *beep*, hasta.

''Es para saber, si ese dolor es mucho más fuerte del que sientes adentro, entonces cuando no es más doloroso, no sientes nada'

tomé el visturí, fui al baño, me vi en el espejo -Está no soy yo, está la que está aquí, con esos ojos, esas lágrimas en las mejillas, está la que está llorando y piensa cortarse, está no soy yo- Sentía un dolor tan prepotente en mi corazón. Que el corte que me hice no me dolió nada, sólo veía la sangre que caía de mi muñeca, mientras mis lágrimas seguián saliendo.

En las dos muñecas me llené de cortes. Luego estos se secaban y se empezaban a cerrar solos. Odiaba verlos, pero no podía más. Tenía las marcas en las dos muñecas, luego de tres semanas, sólo quedaron las marcas, pero estás se volvían abrir cuando en las noche, no quería llorar me iba a cortar. Me las tapaba con las pulseras de género de Justin, pero entonces mis muñecas estaban tapadas completamente por estás. Con mi mamá no he hablado nada, ella quiere intentarlo, pero no, yo no la deja, con Jack, con él, he hablado, me pide que perdone a mi mamá, pero no le hago caso. Muchas veces me ha llevado a la universidad.

¿Cómo es que no me desmayo por las cortaduras?, simple, no es tan profundo, pero si para que salga mucha sangre. A veces trato de que no sea tan profundo. Entonces el visturí tiene mucho filo.

Todos los días que paso con Caitlin, ella me hace reír, le conté sobre la discución de mi mamá, y ella me apoyó y me aconsejó. No sabe nada de las cortaduras, pero si se dio cuenta de mi 'exceso' de pulseras de Justin. -¿No crees que estás exagerando al ponerte todas esas pulseras- Dijo divertida.

Le había contestado un nervioso 'no', con Justin, el me a llamado, todos los días, hablamos siempre, pero simplemente son llamadas cortas porque tiene mucho trabajo. Con los chicos, Dai y Ed, con ellos todos los días y si se puede a cada hora -Reí- nos vemos siempre por skype, los extraño mucho.

Ahora estaba en el estudio haciendo unos deberes. Entonces golpean la puerta.

-¿Quién es?- Le pregunte. Nadie contesto.-¿Pase?- Dije extrañada volteando la cabeza a mi trabajo. Entonces sentí unas manos en mis ojos. -¡Dios!- Dije asustada, escuche un risita, sonreí.

-Adivina adivinador- Hizo una voz más aguda, reí en el intento.

-¿Brad Pitt?- Pregunté aunque sabía quien era. Las cosquillas había aparecido solas.

-Alguien más sexy- Hizo una voz graciosa de como chillona a mujer, reír fuertemente.

-Uhmmm, ¿alguien más sexy?, ammm, no lo sé, podría ser, ¿Nick Jonas?- Pregunte graciosa aunque no me gustaba Nick.

-No- Dijo cortante, reí.

-No pero ese, no, imposible, ¿Alguien más sexy?, amm, uhmm, ¿Justin...Timberlake?-.

-¡No!- Ahora le salió su voz.

-¡Ahh, tú hablas del cantante canadiense más rico y sexy del mundo?- Le dije. El río.

-Ajá...

-¡Justin Bieber!- Dije. Me destapo los ojos.

-¡Yep!- Me imitió. Reí me pare de la silla y lo abracé.

-¡Te he extrañado mucho!- Le dije, el río, dios, se veía muy hermoso.

-¡Yo también!- Me dijo con el mismo entusiasmo.

Después de ese encuentro simplemente nos dedicamos a conversar en el estudio, me dijo que recién había terminado su gira por Europa y de que estaba muy emocionado por ir a Latinoamerica, él me pregunto de como había estado estos días, no le mentí en nada.

Le oculte de que me cortaba obviamente, el no se tenía que enterar hasta...

-¿Qué estás haciendo?- Me pregunto mirándo mi trabajo de Biología.

-Trabajo de biología- Le dije haciendo una mueca, el río.

-Odio biología-

-¡Yo también!- Le dije el río. Entonces sin querer rocé mi mano -justo en la muñeca- con las hojas de los cuadernos, entonces me queje ya que me dolía.

-¿Te pasa algo?- Me dijo, lo miré nerviosa.

-No, sólo, me pegué.

-¡Vamos ______ no creo que seas tan delicada, sólo son hojas!- Me dijo con una sonrisa, diciendo algo como obvio, le sonreí.

-Nada sólo me dolió...

-¿Es sangre?- Dijo, me puse nerviosa.

-¿Qué...dónde?- Le dije.

- En el cuaderno- Apunto a la hoja. ¡No maldita sea!