Más que una simple belieber || jb.

Capitulo 38.

Vi como Justin se dirigía hacía mí, me puse nerviosa de inmediato, sabía que no sería nada bueno estar a su lado mientras yo moría de miedo. Se sentó a mi lado. En el mismo colchón, todos estábamos tapados un poco. Yo la tenía hasta mi cara por si aparecía algo que me daría miedo.

-          ¿Tienes miedo? – Me susurro. Mientras veía él la película como si nada.

-          ¿Qué?, no, claro que no – Si había algo que aún me quedaba después de todo con Justin era el orgullo y la dignidad.

-          ¿Enserio?, yo diría que si – Me dijo mirándome gracioso. Entonces en la pantalla se veía como una rubia era asesinada brutalmente, ahogue en un grito mientras me tapaba con la manta. Justin rió.

Las demás chicas también se habían asustado. Suspire, me estaba molestando por la indiferencia de Justin hacía la película. Sabía que era de terror, pero, no por eso quería aparecer como el que no le tenía miedo a nada.

Bufe.

-          ¿Estás molesta? – Dijo mirando de nuevo hacía la pantalla, no lo miré. Sentí como sonrió – Estás molesta – Confirmo.

Lo deje pasar, sabía que no le gustaba que lo ignoraban, no por ser ‘Justin Bieber’ si no porque, no le gustaba ser ignorado por una Belieber. Sentí como se tensaba al saber que no le respondí. Sonreí de lado. Un poco de actuación en este momento no me vendría mal.

-          _____, lo siento – Dijo disculpándose mirándome - ¿No me vas a hablar? – Me dijo. Ryan lo hizo callar con el típico ‘¡Shh!’, no le respondí ni siquiera lo miré. Suspiro.

Siguió mirando la película, pero sabía que estaba inquieto. Porque se movía, no quería ser débil ante él, debería de demostrar que aunque yo sea una Belieber, y ahora mejor que lo estaba conociendo más, debería actuar como si fuera uno de mis amigos más.

Aunque era imposible.

La película siguió mientras las chicas gritaban, yo ya no le tomaba atención, había entrado a Twitter, puse de comentario.

‘La película está FOME, estoy molesta, muy molesta’ –Dije eso para que se diera cuenta. Aunque era imposible.

Deje de escribir para luego taparme completamente con la manta, sentí como Justin se levantaba y se ponía encima de mí, ¿qué pretendía?

-          ¡Yapo _______ no estés enojada conmigo! – Me dijo, aunque por dentro estaba que moría de la risa, no le iba a contestar. Sentí como no había ningún grito. Habían sacado la película. Encendieron las luces. Dai empezó a reír. Ya sé lo que se imaginó.  

-          Justin, ¿podrías dejarlo para un hotel estando solos  no? – Bromeo Emma. Me sonroje por el espectáculo que estaba dando Biebs.

-          ¡Estás demente Emma! – Le dijo él. Estaba enojado.

-          ¿Qué paso? – Dijo Ed – No es normal que _______ este toda tapada con la manta y tú encima – Siguió. Justin estaba encima de mí, pero no todo su peso. Sentí como ya no estaba encima.

-          Nada – Contesto molesto. Yo me destape, en realidad estaba muy roja. No piensen mal, hace calor y yo estaba tapada entera y más encima Justin encima de mi.  Luego sentí la puerta.

-          ¡Ouw!, ¿qué paso? – Dijo mirándome Caitlin.

-          Me enoje con él – Les dije, todos quedaron sorprendidos, eso me molesto - ¡¿Qué no me puedo enojar con él?! – Les dije, todos se quedaron callados, entonces salí enfurecida del dormitorio. Esto estaba peor, mucho peor.

Los dos nos habíamos enojado por una tontería.

Iba por el pasillo. Estaba todo callado, nadie hablaba. No sentía nada. Eso me dio miedo, mucho miedo, sin darme cuenta había comenzado a llorar. No sabía porque me había enojado –Por una tontería- Dijo esa voz. Gruñí.

Entonces pase por el dormitorio de Justin, sabía que era el de él, porque aquí tenía mis cosas, las demás claro. Sentí como sonaba a lo lejos una guitarra. Todo su dormitorio estaba compuesto por instrumentos musicales, el paraíso.

Quería pasar y pedirle disculpas por mi comportamiento. Estaba en mis días –No sabía que era solo una excusa- Bueno, que de algo nos sirva que nos llegue todos los meses ¿no?

Abrí la puerta y lo encontré con un papel y una guitarra. Él dirigió su mirada hacía mi. Estaba serio, me miraba serio. Su mirada hizo que toda una corriente eléctrica pasará por mi hasta tensarme y erizarme la piel. Lo que provocaba ¿no? –Pensé sarcástica.

-          ¿Qué haces aquí? – Pregunto serio. Suspire.

-          Lo siento – Le dije, el me miro y siguió con el papel y la guitarra sin mirarme. Suspire y me senté a su lado. – De verdad, yo no quería llegar a más – Le dije, sonriendo para calmar la tensión – Quería enojarme contigo, apropósito – Le hice saber, estaba rendida no podía, el miedo me venció.

-          ¿Por qué? – Me pregunto mientras escribía en el papel.

-          Porque, quería ver a cuanto era mi orgullo hacía ti, y vi que no duraba nada – Dije divertida. Él sonrió.

-          Lo siento entonces, soy demasiado orgulloso, yo, si que lo soy – Dijo mirándome.

-          Un día no fallaré – Le dije, el me miró a los ojos, a los ojos no……por favor. Era mi debilidad.

-          Ya quiero verlo – Dijo sonriendo mientras ponía la frente en alto. Reí.

-          Vamos con los demás – Le dije. Él se paro y nos fuimos de su dormitorio.

Algún día mi orgullo llegará tan alto que estaré enojada con él, tenía que hacerlo. Pero tenía que evitar mirarlo a los ojos. Era mi debilidad. Desde siempre.

Siempre –Suspire- dios, sus ojos, mieles que me hacían suspirar mientras los miraba, y cuando el veía los míos, simplemente era el mejor momento de todos.

Regresamos al dormitorio, todos los chicos estaban callados, serios. Eso me puso triste, porque yo había provocado eso, junto con Justin. Cuado nos vieron regresar juntos sonrieron. Había pasado entonces diez minutos de explicaciones.

-          ¿Bailamos? – Propuso Caitlin.

-          ¿Cómo que bailar? – Le pregunto Shay.

-          Pues si, una competencia, chicos contra chicas – Dijo guiñando el ojo.

-          Eso sería ¡Increíble! – Dijo Dai emocionada. Los chicos se miraron entre si.

-          Trato – Dijo Justin.

-          ¡_____ es nuestra capitana! – Grito Caitlin la miré nervioso.

-          ¡Justin es nuestro! – Dijo Ed. Esto se estaba poniendo de pelos de punta.

-          ¡Ouhhh! – Dijeron las chicas. Sonreí parándome de mi lugar acercándome a Justin.

-          ¿Estás lista para perder? – Me pregunto el con una sonrisa de que ‘era el mejor en el baile’, por supuesto que no lo dudaba. Reí exageradamente.

-          No guapo, el que perderá serás tú – Le dije guiñándole el ojo. Él me miró y sonrió. Con esa sonrisa pícara que de seguro tenía pensado algo. Él se acerco más a mi, estábamos a escasos de centímetros, sentía su respiración chocando contra la mía. Me puse nerviosa de inmediato, y el sabía que lo provocaba.

-          Eso lo veremos – Me dijo, para luego alejarse. Le quede mirando con una sonrisa.

Sabía que está noche sería larga.