Niall y yo habíamos terminado nuestra relación romántica hace ya casi un año, pero eso no nos había detenido de tener algunos encuentros sexuales entre nosotros de vez en cuando.
La principal razón por la que nuestra relación terminó fue su carrera. Seguíamos amándonos y respetándonos el uno al otro pero no vernos por largos períodos de tiempo estaba influyendo de manera negativa en la relación. Yo fui la que le propuso terminar todo y él eventualmente estuvo de acuerdo.
Unos días después de que terminamos, él regresó al proceso de grabación de su álbum en Los Ángeles, mientras yo seguí con mi vida en Londres.
Sin embargo, salimos a cenar como amigos cuando estuvo de regreso en Inglaterra y más tarde esa noche, estamos enredados entre las sábanas de mi cama completamente desnudos, como en los viejos tiempos.
Habíamos decidido ser "amigos con beneficios". Ambos estuvimos de acuerdo en que podríamos seguir viendo a otras personas siempre y cuando nos llamáramos el uno al otro algunas veces.
Nunca le había mencionado nada, pero él era la única persona a la que yo había visto.
Cada día quisiera que nunca hubiéramos terminado, deseaba que encontráramos alguna manera de arreglar las cosas y regresar a estar juntos. La primera vez que tuvimos sexo después de que terminamos, pensé que sería la llave para que regresáramos pero Niall nunca mostró ninguna intención de querer regresar a lo que teníamos.
"Ambos nos conocemos demasiado bien, sabes que aún me encanta estar cerca de ti, pero las cosas serán menos complicadas si no hay un compromiso, realmente nos beneficia a los dos, ¿no crees?"
Eso era lo que él había mencionado la mañana siguiente. Yo simplemente no podía decirle que no a esa propuesta. Necesitaba mantenerlo en mi vida.
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Era la noche de un miércoles cuando Niall apareció en la puerta principal de mi casa. Eran casi las 11 p.m. pero sabía que era él incluso antes de abrir la puerta.
Abrí puerta para que entrara, sin siquiera darle la oportunidad de decir algo antes de que ya estuviera atacando sus labios.
-Mmh, nena. Ni siquiera han pasado 48 horas.- Él mencionó entre los besos.
-Lo siento, es solo que...- Me detuve a mi misma de decir "te extrañaba." No quería que pensara que tenía sentimientos involucrados. Pero la verdad era que mis sentimientos por él seguían intactos.- Estoy excitada.- Me corregí.
-Bueno, definitivamente eso es algo de lo que puedo hacerme cargo.- Tomó mi rostro entre sus manos y dejó un beso lleno de pasión sobre mis labios.
Me guió hacia el sillón sin romper el beso, no queriendo desperdiciar tiempo en ir hasta mi habitación. Retiró mi blusa y short en tiempo récord antes de que empezara a desabrochar su pantalón.
Pase mis manos por sus bóxers y pude sentir que su entrepierna estaba completamente erecta, era un hecho que nunca fallaba en hacerme sonrojar y sonreír en medio del beso.
Se separó por un momento para retirar su camisa sobre su torso y después comenzar a bajar su pantalón. Una vez que estuvimos solo en ropa interior, elevé mis caderas, rozándolas con las de él mientras que su mano iba a mi espalda para desabrochar mi sostén.
Rápidamente el chico se encargó de quitar la ropa que aún yacía en nuestros cuerpos, dejándonos desnudos. Volvió a besarme con fuerza por unos momentos antes de separarse y tomar sus pantalones para sacar un condón de uno de los bolsillos.
Abrió el paquete rápidamente y de inmediato lo deslizó sobre él.
-¿Lista?- Preguntó mientras se acomodaba de nuevo sobre mi, entre mis piernas.
Asentí y lentamente comenzó a entrar en mi.
Siempre estábamos completamente conectados; yo sabía lo que le gustaba y viceversa.
Él sabía cómo moverse exactamente para volverme loca.
Pasaron los minutos y yo estaba cayendo entre sus brazos y él me siguió momentos después.
Pegó su frente sobre la mía mientras ambos teníamos los ojos cerrados, tratando de controlar nuestras respiraciones.
Niall se separó de mi más rápido de lo normal. Saliendo de mi y caminando de inmediato hacia el baño para deshacerse del condón, tomando sus bóxers en el camino.
Una vez que salió, los bóxers estaban en su cuerpo de nuevo y rápidamente se acercó a tomar su pantalón para deslizarlo entre sus piernas.
-¿Qué pasa?- Lo cuestioné. Normalmente él se quedaría conmigo toda la noche, así que el que estuviera vistiéndose de nuevo, fue algo extraño.
-Tengo que levantarme temprano mañana, tengo una reunión, así que creo que es mejor que vaya a casa esta vez.
Me sentí como basura cuando me di cuenta que él solo había venido porque necesitaba desahogar sus necesidades y después dejarme tirada, literalmente.
-Oh... está bien.- Tomé la sábana que estaba en el sillón y me cubrí con ella, sintiendo de repente vergüenza de que me viera desnuda.
Él se estaba poniendo su playera de vuelta cuando caminó hacia mi y dejó un beso en mi frente.
-Te llamaré después.- Dijo mientras ponía de vuelta sus zapatos con rapidez. Quería decir algo, algo que hiciera que se quedara conmigo, pero no lo hice, solo me quedé estupefacta.
Ni siquiera se despidió cuando atravesó la puerta.
Sentí mis ojos llenarse de agua de inmediato.
¿Por qué estaba llorando?
Me sentía completamente avergonzada de estar derramando lágrimas por alguien que ni siquiera era mío. Por supuesto que habíamos tenido encuentros de una sola noche anteriormente pero esta vez todo fue diferente. Niall nunca había hecho esto antes.
Siempre pensé que encontraríamos alguna manera de recuperar nuestra relación y pensé que estos encuentros serían el primer paso. Pero fue en ese momento que me di cuenta lo ingenua que había estado siendo. Él ya no quería estar conmigo, solo me necesitaba para mantener sus necesidades satisfechas hasta que pudiera encontrar a alguien más.
Estaba devastada.
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Habían pasado un par de semanas desde la última vez que vi a Niall, él seguía grabando su álbum. A pesar de eso, solía llamarme o mandarme un mensaje de vez en cuando pero nunca me preguntaba si podía ir a mi casa.
Siempre que hablaba por teléfono con él, me veía obligada a luchar por que las lágrimas no salieran, no sabía por qué estaba tan aferrada a él todavía.
Me había llamado una tarde diciéndome que tendría una pequeña fiesta en su casa y que por supuesto, estaba invitada. Me sentí aliviada de que quisiera volver a verme.
Pero todo eso cambió cuando entre a su casa. Tan solo era una reunión con un grupo de amigos, no había más de 15 personas en el lugar, pero lo que llamó mi atención es que había una nueva persona en el grupo de amigos que normalmente eran los que Niall frecuentaba.
No la reconocía, no sabía quién era, lo único que pude notar fue la manera en la que Niall tenía su brazo alrededor de su hombro y ella estaba acurrucada sobre el cuerpo del chico.
Mi corazón se rompió cuando los vi. Esa solía ser la manera en la que él me abrazaba a mi.
Niall ni siquiera se había dado cuenta que yo había llegado hasta que Deo se acercó a mi para darme un abrazo.
-¡Pero miren quién llegó! ¡Te extrañé!- Puse mi sonrisa más falsa mientras abrazaba de vuelta al primo de Niall.
-¡________!- Niall finalmente me notó desde su lugar en el sillón. Hizo una señal con su mano para que me acercara a ellos. Se levantó del sillón y me dio un abrazo rápido, una vez que se separó, dejó su mano alrededor de mi cintura mientras me presentaba a la chica.
Ella era linda, quería odiarla pero no podía. En cualquier otra circunstancia, estaba segura que podríamos incluso ser buenas amigas.
Mientras la noche continuaba y todos tenían más alcohol en sus cuerpos, Niall se volvía más amoroso con la chica, incluso parecía que era imposible para él retirar las manos del cuerpo de la chica, siempre estaba tocando su cintura, o su espalda baja, incluso sosteniendo su rostro mientras la miraba atentamente, o cepillando su cabello con sus dedos.
Traté lo mejor que pude ignorarlos pero era difícil.
-¿Sabes? Creo que es hora de que vuelva a casa.- Mencioné.
-¿Qué? No, es temprano todavía.- Escuché a Deo mencionar.
-No puedes irte todavía.- Niall mencionó, levantándose del sillón.
Di un par de pasos hacia atrás antes de que pudiera tocarme. Solía amar la manera en la que se volvía completamente afectivo y más cariñoso cuando había estado bebiendo pero esta vez me molestó.
-Tengo que levantarme temprano mañana.- Mentí, usando la misma frase que él había usado la última vez que estuvimos juntos.
Él entrecerró los ojos, tratando de leer mis pensamientos. Le dediqué una sonrisa pequeña y falsa con el fin de que se lo creyera.
-Mmh, está bien. Te acompañare a tu auto.
Estaba por pasar su brazo por mi hombro pero lo alejé con la excusa de que iba a despedirme de los demás.
Niall se veía un poco confundido pero no dijo nada.
Una vez que me despedí, caminé por enfrente de Niall, directo hacia mi auto. No quería que siquiera hiciera el intento de poner su brazo alrededor de mi, eso solo me traía recuerdos que en estos momentos eran dolorosos.
Una vez que llegamos a mi auto, me giré para poder mirarlo.- Muchas gracias por invitarme, me la pase muy bien.
Estaba a punto de abrir la puerta del auto cuando él puso su mano encima de la mía, evitando que lograra mi objetivo.
-¿Qué es lo qué pasa esta noche contigo?- Finalmente habló.
Me di la vuelta, tratando de no mirarlo.- Nada, solo tengo que trabajar mañana, ya sabes.
-Mañana es sábado.
Maldición, había olvidado por completo que era viernes.
-Sí, pero tengo trabajo que hacer y terminar para el lunes.- Traté de recuperarme pronto.
-Entonces quédate otro rato, puedes hacer tu trabajo el domingo.- Sugirió y rodé los ojos.
-Estoy cansada, solo quiero irme a mi casa, ¿está bien?- Estaba empezando a frustrarme y todo fue peor cuando sentí ese nudo en la garganta que siempre aparecía cuando quería llorar.
Quitó su mano de encima de la mía y dio un paso atrás. Le dediqué otra sonrisa pequeña y abrí el auto, alistándome para subirme cuando lo escuché murmurar algo detrás de mi.
-¿Qué?- Pregunté porque de verdad no lo había escuchado.
-Tú fuiste la que quiso que las cosas terminaran.- Lo escuché finalmente.
Lo miré detenidamente, planeando mi siguiente movimiento.
Podría simplemente subirme al auto e irme y ambos podríamos fingir que esto nunca pasó.
Pero no sabía por qué había dicho eso. Él parecía que ya había superado todo, así que ¿por qué estaba sacando de nuevo este tema?
Suspiré y cerré de nuevo la puerta del auto. Solo nos quedamos mirándonos, retándonos el uno al otro para que alguien hablara. Yo gané.
-¿Por qué estás actuando como si estuvieras tan molesta esta noche? Tú fuiste la que terminó conmigo, ¿lo recuerdas? No tienes ningún derecho de estar celosa.- Declaró.
Tenía sus manos dentro de los bolsillos de su pantalón y se veía molesto.
-Sí, pero tú estuviste de acuerdo conmigo.- Me sentí estúpida diciendo eso porque sabía que él tenía razón. Yo fui la que propuso la idea de separarnos y él había hecho todo lo posible para evitarlo, hasta que finalmente se rindió y estuvo de acuerdo conmigo.
-Solo estuve de acuerdo contigo porque quería que siguiéramos como amigos y de alguna manera seguir siendo parte de tu vida.
-Tuviste todo un año para decirlo, Niall, pero nunca lo hiciste, ni siquiera una sola vez.
-¡Porque tú fuiste la que terminó todo! Tenía miedo de que si decía algo fueras a querer terminar todo conmigo completamente.
Él tenía razón en todos sus argumentos pero no iba a aceptarlo.
-¿Por qué estás sacando todo esto? Obviamente ya has logrado superarlo.- Mencioné haciendo una seña con mi cabeza hacia la casa.
-Porque fue hasta esta noche que me di cuenta que tú sigues sintiéndote de la misma forma.
-Eso no es verdad.- Mentí.
Él me miró pero no dijo nada, de igual manera sabía que estaba mintiendo, él me conocía mejor que nadie.
-Solo es mi amiga.- Explicó.- Tuvimos algunas citas pero le dije que no estaba listo para tener una relación todavía, solo es mi amiga.- Explicó más calmado esta vez.
-Yo también era tu amiga.- Hice referencia a los años pasados cuando solíamos decirles a todos que "solo éramos amigos."
-Sabes que eso no es lo quise decir.- Rodó los ojos.
Por supuesto que yo sabía que no dormía con ella, pero aún seguía celosa por la manera en la que había estado actuando con ella toda la noche.
Negué con la cabeza antes de realizar la pregunta que había estado estancada en mi mente desde hace tiempo.
-Si aún te importo tanto como dices, ¿en dónde has estado estas últimas semanas? Tan solo vivo un par de calles más abajo, así que ni pienses en sacar esa mierda de "he estado ocupado."
-No lo sé... estaba analizando las cosas.- Él tenía la mirada en sus zapatos mientras movía una piedra de un lado a otro con su pie.
-¿Analizando qué?- Sabía a lo que se refería pero aún así quería escucharlo decir.
-Lo que siento por ti.- Volvió a alzar la mirada, caminando hacia mi cuerpo y posicionando sus manos a cada lado del auto, dejándome acorralada entre su cuerpo.
Él no dijo nada más, obviamente esperando por mi respuesta. Cuando vio que no respondí, volvió a hablar.- Quiero que regresemos a lo que éramos, voy a poner todas mis cartas sobre la mesa, si dices que no, me alejaré. Es solo que... no quiero perderte de nuevo.
Estaba demasiado cerca de mi, incluso podía sentir la manera en la que su nariz rozaba la mía y sentía su aliento, el olor a cerveza, cada que hablaba.
Sentí la manera en la que mi corazón se aceleró.
-Nunca me perdiste.- Susurré antes de juntar mis labios con los suyos.