~ Un verano juntos ~

By Saphire235

82.5K 3.5K 2.9K

Una propuesta espontanea será el detonante de esta "aventura veraniega". Los Dex Holders pasaran una semana t... More

La propuesta.
Preparativos.
Embarque normal y corriente.
¡Bienvenidos a Sinnoh!
Los Juegos Playeros
Sorpresas por todas partes.
Corazón de diamante.
Carrera de instinto.
Amanecer de sentimientos.
Ideas cruzadas.
I Noche de Karaoke I
II Noche de Karaoke II
Tu voz
Borrón y cuenta nueva.
Por ti.
Ataque en el bosque.
Tu espíritu de batalla.
Bajo la lluvia.
Sustos en la Mansión.
Hermosa venganza.
Un nuevo día.
La carta.
Choque de problemas.
Cuenta saldada.
De cara al peligro.
Comienza el caos.
Sin respuesta.
Huellas en la oscuridad.
Juntos somos invencibles.
Nos llaman héroes...pero somos solo humanos.
Especial: Questions and Answers!
El plan se pone en marcha.
Los días que no olvidaré.
Hoy empieza nuestra lucha.
¿Mentiras?
La Corazonada.
~ 2º Especial: Retos y preguntas ~
Visiones.
Una mañana "normal".
"Las gemas de colores"
La Verdad Detrás De Todo.
My illusion, my mistake
Lo que se esconde en las sombras.
Esperanza.
Grietas

Verdad que duele

2K 76 94
By Saphire235



-¿La chica del aeropuerto? Pero...E-eso es imposible.


-Ahora todo encaja...El ataque en el hotel de Plat, el parque amistad, el hospital...¡Todo! ¡Sabía exactamente dónde estaríamos y en que momento!


-No puede ser, ella no sabe nada de nosotros. –Replicó Ruby, aunque en el fondo, algo le decía que su compañera tenía razón.


Y la creía. Aunque se negara a sí mismo el hecho de haber pasado por alto tantas cosas.


-Te digo que es ella, ¡Créeme! –Le suplicó con la mirada. Sintiéndose nuevamente mareada, decidió no ser más una carga para el moreno y caminó hasta apoyarse en la pared más cercana, con dificultad pues su dolor de cabeza no le daba tregua, dejándose caer después en un puff de color crema que había justo ahí. La castaña se palpó la frente, preguntándose el por qué de su estado, ¿Por qué se sentía tan mal?


-No puede ser cierto...-Volvió a decir, en un susurro.


"No, no podía ser verdad"


"Pero...¿Y si lo era? ¿Y si era cierto?"


Tras las palabras cuidadosas de Ruby, un silencio incómodo se extendió por la habitación. Y poco a poco, pequeños murmullos se fueron multiplicando uno tras otro. Unos comentando, otros negando esa posibilidad y otros pocos se quedaron quietos, analizando en solitario esa situación. Como si no hubiera nadie más en la sala. Blue se acercó a su Kou-hai y se sentó a su lado, dándole apoyo porque creía que lo necesitaba.


-¿De qué estáis hablando? ¿Una chica del aeropuerto? – Gold no pudo evitar expresar esa duda. Acto seguido se cruzo de brazos.- ¿Cómo va a ser una azafata una ladrona? Me refiero, yo a me habría dado cuenta, soy experto.- La seriedad se fue por el caño con la rematada de una sonrisa de lado, enmarcada por sus dedos. ¿Quieres estropear la tensión y e estrés de un determinado momento? Llama a Gold, no te arrepentirás de tu adquisición.- ¿Qué pasa?


-Gold, ¿Podrías ser serio por una vez? –Preguntó con los ojos entrecerrados el pelirrojo.


-¡Lo estoy siendo!


-A mí no me lo parece.



Temiendo que justo allí mismo se formara otra absurda discusión en el peor de los momentos, Crystal decidió tomar cartas en el asunto. Mientras cada uno seguía con sus teorías, en silencio, trató de hacerse un hueco entre las muchas voces que se agolpaban en la misma habitación, bajitas, porque White seguía recuperándose, pero al fin al cabo un cumulto infranqueable si no te hacías notar. Para la sorpresa del moreno, que estaba en proceso de echar chispas por los ojos para quemar a su ami-enemigo por no tomarlo en serio, dos manos se posaron en sus hombros por la espalda. Sus hombros se relajaron al instante. Y su expresión de ira había desaparecido. Miró hacia atrás y se encontró con los ojos cristalinos de la chica de pelo azul.



-¡Esperad un momento! –Dijo para captar la atención de sus amigos. Una vez conseguido, suspiró y tomó aire.- Esperad. Creo que Gold no se refería a eso. Es decir, si, pero no de esa forma. Lo que quiere decir es que resulta extraño ¿Una mujer que no nos conoce ni nosotros a ella decide atacarnos de la nada? Simplemente, me niego a creer eso. Que una mente criminal se esconda tan bien detrás de una inocente apariencia, ¿Cómo pudo saber tantas cosas de nosotros si nunca nos ha visto? Tiene que haber una razón detrás. Algo de peso.



-Yo...Lo siento. Es todo culpa mía.


Toda la atención se centró en la buscadora de Hoenn y miró al suelo irremediablemente.


Silencio. Miradas intercambiadas. Asombro y confusión. Eso es lo que se podía notar en el ambiente. Green dio un paso al frente, con las manos en los bolsillos y abrió los ojos, mirando a Sapphire con una mirada entre curiosa y preocupada por todos esos amigos y "alumnos" a los que tenía a su cargo. Porque no podía evitar sentirse responsable, al igual que Red y Blue, sabía que aunque fueran perfectamente capaces, ellos tres y Yellow en los primeros eslabones de la larga y suerte cadena que los unía a todos. Y si fallaba uno, fallarían todos inevitablemente.


-¿Podrías explicarte?


Ella asintió, titubeante. Posó sus manos en su regazo y apretó ligeramente los puños, bajando la mirada pues todo su valor se había ido al garete. Se sentía horrible, porque en el fondo...¿Era ella la culpable de todo? Tenía que serlo.



-Y-yo...No quería...os lo aseguro, no quería que todo esto pasara. Yo solo quería ser amable, creía que quería ser mi amiga o que podía entablar una conversación con otras muchas personas. Pero no fue así...Ahora lo comprendo. Tarde, lo sé.- Suspiró y miró al frente. Ruby estaba a un lado, pensando. Y Emerald no había dicho palabra, parecía que estaba en otro mundo.- Ese día, el día que embarcamos en el avión de Hoenn para encontrarnos todos en Sinnoh...Yo me aburría, así que decidí dar una vuelta. Ahora me arrepiento de no ser más paciente. ..Pero antes de que saliera siquiera de la sala, choqué con una persona, una chica. 



>> -Parecía una turista con mucho trabajo a juzgar por su aspecto. Me disculpé de inmediato y dio la casualidad de que volaríamos juntas. Durante todo el viaje estuvimos hablando justo detrás de Ruby y Emerald. Ella me preguntó algunas cosas, como en que hotel nos alojaríamos, por si daba la casualidad de que pudiéramos vernos. Parecía buena persona, lo prometo...Una conversación normal y casual, eso pensaba. Pero...



-¡Ahora me acuerdo! –Exclamó Emerald, rompiendo el silencio detrás de la explicación de Sapphire. Parecía tan emocionado por haber encontrado algo importante que todos y cada uno de los presentes miraron al pequeño rubio con curiosidad, expectantes.- La chica que se tropezó con Sapphire...¡Ella! Como ha dicho Sapphire, nosotros estábamos en la cola y después nos presentó a esa mujer...Pero, había algo extraño.Por un momento....por un momento parecía que venía directa hacia nosotros, no "por mera casualidad" como explicó ella misma después. Además, en todo el viaje no se interesó en hablar con nosotros...A ver, nos saludó sí, pero estuvo hablando todo el viaje con Sapphire. No le dimos importancia. Ni puse de mi parte para charlar con ellas. Supuse que eran cosas de chicas. –Se cruzó de brazos un instante.



La castaña buscaba la mirada del coordinador. Pero este hacía tiempo que solo le dedicaba tiempo a un punto perdido de la habitación. Sus puños se cerraron sin que nadie lo notara.



¿La razón de toda aquella locura había estado delante de sus narices y no había sido capaz siquiera de sospechar tanta casualidad? Se sentía frustrado consigo mismo por no haberse dado cuenta de aquello antes, acorralado e impotente porque todo lo que había estado pasando todos esos días podía haber ido evitable...Si tan solo hubieran llegado un poco tarde, como quería Emerald o haber hablado más con sus amigos y no haberse centrado solo en sus maletas. Odiaba esa sensación de impotencia porque temía no poder retener el carácter que tanto rechazaba de él mismo. Carácter que salió poco a poco de las barreras de su mente y causó estragos.



-¿Y tú... que le dijiste? –Preguntó Ruby, saliendo un momento de sus cavilaciones. Estaba serio, demasiado quizás.- ¿Le mentiste, verdad?



-Le...Yo le dije la verdad. -Admitió. Sus ojos empezaron a cristalizarse poco a poco. No quería mostrarse así, no podía, pero le era inevitable. Tantos sucesos de "esas vacaciones" se le agolpaban...- ¡Yo no quería! De verdad...-Las lágrimas empezaron a salir, huían de su cárcel lentamente.- ¡Le contesté que nos alejaríamos en el Hotel de Pueblo Arena! Por mi culpa White está así...¡Y también tuve la culpa de que supiera dónde estaríamos! Aquel ataque en el parque Amistad...Que muchos de vosotros salieras malheridos, el bosque...No puedo dejar de pensar que si me hubiera callado la boca, si no hubiera hecho el esfuerzo de ser social...Nada de esto habría asado y seguiriamos nuestras vacaciones como si nada. Que yo saliera herida en el Parque Amistad...No se si pensar que me lo merecía, ¡Por mi culpa ahora estamos metidos en esto! Y por mi culpa Yellow no esta...-Suspiró, secándose las mejillas con un pañuelo que le dio la castaña.



Nuevas grietas aparecían en la unidad del equipo y se iban haciendo más y más profundas...¿Habría solución al final?


Ruby se pasó una mano por el pelo y observó el techo, sin perder esa actitud fría.


-No puede ser...De de ser una broma.- Se intentaba convencer a sí mismo. Pero no lograba nada, no lograba ver más allá.- ¡Debe de ser una broma! –Exclamó de repente, provocando la sorpresa de más de uno.- Dinos...Dime que al menos no le dijiste las cosas exactas y que tuvo que investigar para encontrarnos...


Sapphire miró hacia otro lado y Blue apoyó una mano en su hombro, suplicándole que lo dejaran.


-Por favor, Ruby, ahora no es buen momento...estamos nerviosos, lo sé, pero vamos a calmarnos. Todos hemos cometido errores.


Ya no podía retenerlo más. Era inútil.


-¡Pero no tan grandes! ¿Vamos a calmarnos, en serio? ¿¡Vamos a calmarnos!? –Insistió.- Oh sí, vamos a calmarnos y a esperar a que el enemigo NOS DESTRUYA poco a poco. Porque es inútil huir ....¡Ya sabe dónde estamos! ¡Nos sigue la pista desde que le dijiste todo sobre nosotros! ¡TODO!


-¡YO NO LE DIJE NADA DE VOSOTROS! –Replicó con lágrimas en los ojos, levantándose del asiento. Sus ojos azules ocultos en gotas saladas y sus colmillos amenazadores le comunicaban que no estaba siendo justo.Que no estaba bien pagar tu frustración con os demás. Pero precisamente,no podía huir de lo que en realidad era....Un egoísta.


-¿¡Y ENTONCES!? ¿Cómo ES QUE SABÍA EL NOMBRE DE GREEN? –La castaña frenó un segundo sus pensamientos. Todo se paralizó. Estaba confusa y no menos sorprendida.


-¿Qué...has dicho?


-Esa "chica", o ese chico, ya da totalmente igual...Sabe perfectamente como nos llamamos, nuestros títulos...¡Y NO ME EXTRAÑARÍA QUE TAMBIÉN CONOCIERA NUESTRAS HABILIDADES!


-Hey, chico cursi, creo que es suficiente por hoy. –Gold intentó ser pacifico por una vez y ase acercó para calmar a su amigo. Pero antes de poder acercarse un paso más, el oji-rubí se giró y apartó su mano de una manotada, ignorándolo completamente.


-Al menos...Afirmame que le preguntaste algo a cambio. Cualquier cosa, el más mínimo detalle, un absurdo gesto, una mísera palabra...¡Algo!


Ella negó lentamente.


-Yo no sabía...


Sapphire relajó los hombros. Se sentía derrotada. Verlo así, solo confirmaba que toda la culpa la tenía ella. Blue se levantó, aprovechando ese momento de silencio, y abrazó a la castaña con fuerza, deseando que así le llegara y no tuviera dudas de que no estaba sola, que no era culpa suya. Solo eran cosas que pasan...y ya está. No se podía evitar.


-Eso...¿También se lo has dicho? ¿Le dijiste como eliminarnos también? ¡Solo te faltó eso! ¿¿Por qué no se lo dijiste también!? –Le echó en cara, con sorna.


-¡RUBY, BASTA! –Reclamó Blue, separándose un momento de la chica salvaje para tomar un papel mediador en la inoportuna discusión. No tenía pies ni cabeza, no valía a pena es seguir con aquello, ero no había manera de detenerlos. Era como si solo estuvieran ellos.


-¡YO NO DIJE NADA DE ESO! –Exigió.-...Yo no dije nada de eso...-Repitió, derrotada, bajando los hombros nuevamente. – Yo no sabía nada. Solo quería ser amable, ser amigas...pero ahora me doy cuenta de todo. –Las lágrimas volvieron a rodar por sus mejillas. Lágrimas amargas, pero valientes. No iba a ocultarlo, le miraría a la cara y haría frente con una muralla de puro acero. Aunque por dentro estuviera rota como un cristal fino.


Ruby relajó la expresión. Por fin reaccionaba y pensaba las cosas con calma. Pero ya era tarde. El mal estaba hecho. Ver las lágrimas en los ojos de color zafiro de la chica, y como sus colmillos brillaban, hacía que se le encogiera el corazón porque sabía que la causa de su estado no era otra que él mismo. Su frustración y sus propios errores fluían hacia el exterior, avergonzándolo de sí mismo. Arrepentido, dio un paso con la intención de disculparse pero Sapphire estaba demasiado herida como para dejarlo pasar así como así.



-Dices que es mi culpa...Y puede que lo sea, no te lo niego, pero...¡TU ME DIJISTE QUE TENÍA QUE SER AMABLE EN UN LUGAR CON TANTA GENTE! ¡Y yo lo intenté, realmente lo intenté! Al igual que tú me diste una oportunidad para enseñarme mi mundo...¡Yo quería ser parte de TU MUNDO también! ¿Acaso es mucho pedir? Pero es inútil...Tú siempre has sido así, ¡Un egoísta que solo mira por sí mismo! ¿O acaso tengo que recordarte lo que tenías decidido hacer cuando se desató la catástrofe en Hoenn? ¡Huiste! ¡Como huyes de todo lo que no puedes evitar por tí mismo! ¡ERES UN EGOÍSTA COBARDE!


Todo sucedió demasiado rápido. Sapphire corrió hacia la ventana, esquivando cualquier intentó de evitarlo con agilidad.


Egoísta...


Sin mirar atrás, la castaña saltó por la ventana en dirección a las ramas más cercanas y se perdió entre las copas del espeso bosque que rodeaba la casa de Cinthya y el pueblo y se extendía hacia las montañas. Ya no quedaba ni rastro de la chica. Solo el recuerdo tan ácido de sus palabras.


Cobarde...


Ruby bajó la mirada y cerró los párpados con fuerza. Sin pensarlo dos veces, abrió la puerta de la habitación y se perdió por el oscuro pasillo. Momentos más tarde, en medio de la conmoción colectiva, un portazo se extendió por la casa y después...silencio. Todo silencio. Solo se escuchaban las respiraciones de grupo de héroes...que cada vez perdía trozo a trozo su unidad que tan fuertemente creían que estaban.


Blue decidió ir detrás de Sapphire mientras Gold ya estaba sujetando el pomo de la puerta para evitar que Ruby saliera detrás y se perdieran así como Yellow. Pero Green detuvo a los chicos interponiendose entre la puertas y estos, de brazos cruzados y relativamente serio.


-Dejadlos un momento solos...Creo que lo necesitan. Cuando se calmen volverán aquí, estoy seguro.


-Pero...Ruby no sabe orientarse en un bosque.- Objetó el oji-dorado.- Sería como servirlo en bandeja de plata a que lo capturen también.


-Ruby está en la habitación del otro lado de la casa. El sonido venía de arriba, no de la planta baja. –Puntualizó, intentando calmarlos. La castaña suspiró e intercambió una mirada con Gold. Ambos asintieron y volvieron al centro de la habitación.


-No puedo creer que esto esté pasando...-Se lamentó Platinum, con las manos cubriéndole la boca, totalmente preocupada por lo que acababa de pasar.


-Estaban tan unidos...quién lo hubiera imaginado. –Pensó en voz alta Diamond, quién se acercó a la morena para apoyar una mano en su hombro y sonreír aunque no tuviera ganas.- No se preocupe señorita, volverán estoy seguro.


-Dia, tiene razón...Solo nos queda esperar...-El castaño de ojos verdes hablaba despacio, con tono cansado y abatido. Se sentó en un sillón, con los codos apoyados en las rodillas y con las manos entrelazadas ocultándole la mitad inferior de la cara. Por mucha que él también quisiera correr detrás de ellos para mantenerlos unidos...No debían desesperarse.


"Esto es lo que quiere, separarnos poco a poco, uno a uno, lenta y dolorosamente"


"Pero no nos vamos a servir en bandeja de plata para ti"


"No hemos dado nuestra última pelea aún"


"Estad preparados"


o-o-o-o-o-o-o



La Luna estaba cubierta por nubes. El silencio de la noche ya no existía, solo quedaba el murmullo del viento, el crujido de las hojas y de los Pokemon salvajes que hacían su vida habitual nocturna. Por fin, tras un buen rato, la tranquilidad y el sosiego volvía a reinar en la casa. A su vez, un suspiro se escapó de los labios de Red, el cual ya se había cansado de esperar y esperar. No podía dormir, solo admirar la oscuridad por la ventana. Tampoco podía esperar a que fuera de día. Sentía la misma sensación de inquietud que todos en alguna parte de la vida han sentido al ir a una emocionante excursión. Solo que esta vez...No era una excursión. Y mucho menos emocionante.



-Bien, el trío de Sinnoh ha caído rendido. –Green apareció por la puerta del comedor.- Se han quedado con White. La pobre aún no despierta pero dormirán en la misma habitación. Por desgracia, me ha sido imposible obligar a Black, ese chico es testarudo, no va a separarse ni un segundo hasta que esté mejor. –Suspiró pesadamente y se dejó caer en el mismo sofá donde estaba sentado el moreno.


-Alguien no tiene mucha paciencia jojo~ -Se mofó Blue, apoyando la barbilla en sus manos.- Bueno, pues creo que nos toca dormir aquí. Rald, Crys y el resto acompañaran a Ruby así que... Cojan sus mantas y cojines señoritas~ -Sin más preámbulos, agarró dos cojines y los lanzó hacia ellos, ambos consiguieron agarrarlos a tiempo.


-¿Uh? Que raro, ¿No te quejas? –Frunció el ceño.


-Nope. –Sonrió ligeramente y caminó a un lado de la habitación para coger tres mantas finas y repartirlas.- Es un momento difícil, no estaría bien quejarse...Además, estos sillones no son tan malos.


-Es la primera vez que te veo tan decidida. –El castaño sonrió ligeramente, divertido, e intercambió una mirada con su amigo. Red ya había elegido un sillón de color marrón al lado de a ventana.


-Pues claro. –Infló las mejillas mientras ahuecaba su par de cojines.- Yo siempre soy seria y decidida, ¿Lo dudabas?


-Esa cara molesta de favorece ¿sabes? –Red se tomó un segundo para gastarle una broma, intentando una sonrisa convincente. Acto seguido, volteó para seguir observando a través del cristal.


-Te perdonaré la vida por esta vez, pero será mejor que descanses sino quieres darle un susto a la pobre Yellow mañana. –Asintió ella, animada.


-Habla por ti Mis Pepino~


-¡Green, a ti si que no te lo consiento! ¡Toma cojinazo!


Mientras tanto, en la habitación contigua a la de White...


-Ruby...¿Estas bien? Crys, Gold y Sylver han decidido dar otra ronda por el bosque por si ven a Yellow o Sapphire. Llevas un rato sin decir nada.


El pequeño rubio llevaba ya quince minutos tratando de hacer hablar a su compañero de región, aunque fuera para echarlo de la habitación. Sin embargo, no obtenía ninguna respuesta. Emerald se echó hacia atrás en la silla al lado de la puerta que había puesto a propósito para no cansarse de esperar. Observó la habitación como método distractor. Si su amigo era cabezota, él no era mucho más, así que lo molestaría hasta que se dignara a decir algo.


Para su sorpresa, su vista se posó en un maniquí que había en una esquina del cuarto. Llevaba un vestido u tanto peculiar, pues no se ajustaba a los gustos "refinados y artificiales" del chico pero aún así, había que reconocer que era elaborado...¿Cuánto tiempo levaría haciéndolo? Y lo más importante...¿Cómo narices se había traído un maniquí en una maleta? Ese chico era raro...


-Si te sirve de ayuda...Mañana seguro que estará arreglado. –Esbozó una pequeña sonrisa.- Podéis hablar tranquilamente y veréis que es una tontería, siempre lo hacéis ¿no? No es tan difícil jeje...


Un nuevo silencio le respondió a su pregunta. Emerald suspiró y levantó una ceja, esperando pacientemente.


-Escucha...A mi no me vas a oír decir cosas cursis ni para hacer la pelota, ya debes conocerme. Pero no todo es tan malo, gracias a vosotros sé que no hay que huir de la amistad que te ofrecen, sino darle una oportunidad a esa persona. De otra manera...¿Vas a darle la oportunidad a esa ladrona copi-caretos y falsa-personalidad de acabar con la estrecha relación de cariño que tenéis desde hace tanto tiempo que me da repelús mencionar?


Algo se movió entre las sabanas. Un poco de cabello negro empezó a asomar, pero nada más. Perfecto, eso era suficiente para que el rubio sonriera victorioso y continuara sin titubear.



-Si, si...Ya todos sabemos la historia que contasteis. Todos nosotros sabemos que el lazo más fuerte lo tenéis vosotros dos. Ni siquiera Green y Red, los "iniciales" comparten esa unión porque no se conocieron tan jóvenes como vosotros. Quizás, el pasado de Blue y Silver sea comparable...pero no sé, me da esa impresión. –Se cruzó de brazos y dirigió su mirada al frente, serio.- ¿En serio vas a permitir que lo quiebren tan fácilmente, sin opones resistencia? Porque, te digo la verdad, no me extrañaría que lo tuviera todo planeado y esto fuera parte de su plan. Yo no voy a permitir que jueguen conmigo. Los demás, no van a permitir que jueguen con ellos. ¿Vas a permitir que juegue con vosotros indirectamente?



Hey, la cosa no iba tan mal. Fuera lo que fuera de todo lo que había dicho lo que le había hecho reaccionar, por fin se quitó la manta de encima de la cabeza pero como le daba la espalda no podía ver su cara. En fin, un paso era un paso. Su especialidad es ser molesto cuando quiere así que no se iba a detener ahora. No señor.



-Bien, eso está mejor. Empezaba a pensar que estaba hablando solo con tu maniquí. –Bromeó.- Pero...Yendo al grano. Sabes que no estás solo, Ruby. Todos estamos aquí y mira que somos diferentes unos de otros. –Asintió.- El punto es, todos hemos cometido errores en nuestras vidas, unos más, otros menos...Pero aquí estamos. Los hemos vencido. En cambio tú te estás dejando vencer por ellos. Y el único que puede ayudar a Sapphire a vencer sus errores también, eres tú. Vamos, no me quiero imaginar qué pasaría si la enfado –Se rascó la mejilla.- Así que, ¡Levanta el pandero y no te encierres! Mañana iremos de búsqueda así que...



Todo pareció ser en vano. El chico volvió a cubrirse con la manta, como si no quisiera saber nada en aquel momento y Emerald ya no supo que hacer para ayudar. Lo había intentado todo, menos lanzarle piedras claro, sabía de alguien que lo mataría si lo hiciera, una lástima. No le quedo otra opción que rendirse. Se levantó de la silla y caminó lentamente a la salida. Quizás sus palabras no habían hecho ningún efecto. En verdad...sí que hubiera deseado ser un poco de ayuda. Pero esto no era lo suyo, estaba totalmente asegurado.


Apoyó una mano en el marco de la puerta.


-Rald...Gracias. Voy a tomar tu consejo, ¿Te importa?


Sin creer lo que escuchaba, volteó la cabeza. El moreno no se dio la vuelta, pero era todo un logro que hablase y más aún para agradecerle su esfuerzo poor animarle a no ser un trapo roto y cansado. Atendiendo a la pregunta de su amigo amante de los concursos, Rald sonrió ligeramente y negó con lentitud.


-No me importa. –Contestó.- Voy a por un vaso de agua, ahora regreso. Cansas más de lo que tu crees ¿sabes? –Sonrió, divertido y se marchó por el pasillo.


-Que si canso...Pues espérate a mañana.


El ojirubí dirigió su vista al techo de color crema y como ultima acción antes de dormir, asintió decidido.


"Yo también tengo un plan y no permitiré que falle"


o-o-o-o-o



A la mañana siguiente, el sol no se había levantado con ganas. Como era de esperar, el cielo estaba encapotado, con un azul grisáceo que no animaba a salir de casa, precisamente. El mal tiempo el día anterior había afectado al clima de ese día,pero no demasiado. Una vez la luz empezara a bañarlo todo con su calor, ese molesto fresco matinal iría desapareciendo.


A pesar de ser los últimos en dormir porque habían estado comprobandolo todo para la búsqueda por el bosque y las montañas, el trío restante de Kanto ya estaba levantado y a punto. No cabían quejas en la boca de Blue. Estaba preocupada por su amiga y había prometido darlo todo para encontrarla.


Los próximos en hacer aparición en la cocina fueron los de Jhoto; Gold como siempre bostezando cual elefante de sabana, Crys animada y a punto para cualquier cosa y un Silver que no se sabía si es que estaba cansado, harto de Gold, las dos cosas o es que esa era su cara habitual. Complicada decisión. Los tres saludaron a los mayores y Silver Crys ayudaron a Blue a preparar el desayuno. Al cabo de unos minutos más tarde, Black bajó las escaleras junto a una más animada White, que no tardó en disculparse por lo de ayer aunque nofuera nada y sonreír con energía. Los últimos fueron Platinum y Pearl, charlando antes de sentarse y dar los buenos días al resto.


-¿Y Green-senpai? –Preguntó White, tras dar un bocado a una tostada de mermelada.


-Está afuera, preparando todo con sus Pokemon y revisando si es adecuado el mapa de esta zona para ir a explorar más allá de Pueblo Caelestis. –Contestó Blue, sentándose en frente de ella al momento. Un "Oh" fue lo último que dijo la castaña de ojos azules.


-Hablando del personal faltante, ¿Dónde está el chico glotón?  


-Dia siempre es el último que llega a desayunar, es habitual.- Sonrió Pearl, intercambiando una mueca divertida con su amiga. Platinum asintió, confirmando ese hecho.- ¿Y Ruby y Rald? ¿No bajan?


El moreno se encogió de hombros.


-Cuando llegamos ya estaban dormidos, no hemos hablado con ellos desde entonces. Supongo que no tardaran en bajar. Respecto a eso,¿Deberíamos...?



-No. No vamos a echarle en cara nada a nadie. Todos estábamos estresados ayer. Todos pudimos haber dicho alguna tontería o haber cometido algún error, somos personas al fin y al cabo, no somos piedras sin sentimientos. Se cometió un error y vamos a arreglarlo juntos. –Indicó Red, poniéndose bien su típica chaqueta roja y blanca y su gorra hacia atrás, signo de que lo serio empezaba en ese momento.-¿Sapphire no ha vuelto, verdad?



Crystal negó, apenada. Lo único y último que sabían de ella es que se había marchado frustrada para esconderse en el bosque. Pero nada más. Aún así, estaban seguros de que la castaña era totalmente capaz de pasar una noche en el bosque sin pillar un catarro o ser tacada por los Pokemon salvajes peligrosos. Confiarían en ella incluso si un diluvio asolara esa parte de la región. No por nada recibía el título de "La Conquistadora" y no por nada, había pasado la mayor parte de su vida rodeada de naturaleza y habituada a cualquier cambio que pudiera darse, adaptándose a cualquier peligro e imponiéndose sobre los depredadores. Si no había vuelto, estaría bien y pronto la encontrarían en cuanto comenzaran la búsqueda. Al menos, eso esperaban.


-Perfecto entonces. –Dijo el oji-dorado antes de meterse las manos en el bolsillo de su sudadera roja y negra.- Si ya todos hemos repuesto fuerzas, voy a ver en que puedo ayudarle a Green. Nos vemos fuera~


Crys negó lentamente, sonriente, dando por perdido a ese caso llamado comúnmente Gold y que la ciencia aún no había conseguido desvelar. Pearl también estaba emocionado por echar una mano a sus compañeros de fuego así que se dio prisa en beberse su zumo de un solo trago, pese a las advertencias de la morena de que iba a tener hipo después y se levantó de un salto para seguir al chico de la gorra amarilla.


-¡Crys, Crys! ¡Gold! ¡Silver! ¡TODOS!


Pero...


Por desgracia, las sorpresas se servían en paquetes grandes por las mañanas.


El pequeño rubio de ojos verdes como las esmeraldas bajó corriendo de las escaleras, miró a su alrededor y cuando advirtió a sus compañeros de Pokedex corrió hacia ellos con una expresión de extrema preocupación. Desconcertados por su actitud, el temor dentro de sus mentes iba creciendo poco a poco, a cada respiro que Emerald dejaba escapar para recuperar el aliento perdido en la desesperada carrera. La peliazul se acercó a su amigo y apoyó ambas manos en sus hombros, agachándose un poco en el acto, para que se calmara y les explicara lo que estaba pasando.


-E-ellos...uff...¡ELLOS NO ESTÁN! –Exclamó al fin, con ojos vidriosos.


-¿Quién no está Emerald? ¿¡Qué está pasando? –Inquirió ella, contagiada por ese temor creciente a que hubiera sucedido lo peor, miles de ideas y posibilidades....


-¿¡Quién va a ser!? ¡Ellos! ¡Ruby y Diamond no están , han desaparecido!


-¿Estás seguro? Esto no es para bromear...-Sus manos se aferrarron más fuertemente a sus hombros. "Esto no puede estar pasando..."


-¡No bromeo! –Se revolvió bruscamente, apartando las manos de la peliazul con nerviosismo.- Id a ver si queréis, no sé como se las ha ingeniado ese presumido de Ruby pero se ha escapado en frente de nuestras narices. Y Dia...No entiendo por qué no está.


Platinum intercambió una mirada con el amigo del chico de la boina. Pearl se llevó una mano a la barbilla, pensativo, mientras intentaba buscar en su mente todos los lugares posibles en lo que podría estar o las razones increíblemente extrañas de que se hubiera levantado incluso antes que los de Kanto. Porque ninguno de ellos habían visto a los dos "desaparecidos" hasta que Emerald les advirtió.


-Pero es imposible. Yo mismo vi como Dia, quier decir, Diamond dormía tranquilamente tapado hasta la cabeza, como siempre.


Silencio.


El pequeño rubio se llevó una mano a la frente, negando lentamente y Pearl descubrió la verdad debajo del pastel.


-¿No me digas que...? –Como una exhalación y sin aviso, subió de dos en dos las escaleras hasta abrir de un portazo la puerta de la habitación dónde habían dormido. Allí seguía el supuesto Diamond , durmiendo. Lo aterrador de todo esto es que las sábanas se movían arriba y abajo con cuidado como si realmente hubiera una persona ahí y un muñeco. Sin pensarlo dos veces y cuando ya todos estuvieron allí, levantó la sábana rápidamente.- Cómo no....El viejo truco de la comida.- Entrecerró los ojos, saludando sarcásticamente al Munchlax del moreno.- ¿Qué tal fue el picoteo entre horas nocturnas, Lax?


-¡Munch! –Contestó este con una sonrisa alegre y se sacudió el pelaje para quitarse los restos de frutas y demás dulces.


-¡Genial~! Nos descuidamos un momentos y ahí está; dos idiotas bambando por ahí sin saber a dónde van. –Se quejó el criador del grupo, de brazos cruzados. Pearl suspiraba con desgana.


-Mientras no...¿Eh? ¿Qué pasa Lax, qué quieres?


-¡Lax! –El Pokemon no paraba de estirar el pantalón gris del rubio hasta que por fin consiguió su completa atención. No le faltó tiempo para alzar los bracitos como "baile de victoria". Para la sorpresa de todos, e jovial Pokemon sacó de debajo de su pelaje una especie de papel doblado y se lo entregó al rubio. Pearl la miró de arriba abajo y le dio la vuelta. Detrás había escrita claramente una D y en una esquina, un pequeño dibujo apresurado de un robot de esos que tanto le gustaban a su amigo.- Sin duda, es de Diamond pero...


-Anda trae~ -Sin previo aviso, Gold le arrebato de las manos el preciado sobre y sin pedir permiso, lo desdobló con curiosidad pero también harto de tanto esperar. Si había dejado ese sobre aposta el chico glotón quizás ahí les explicara por qué se había marchado de la nada y sin avisar a nadie. Y a lo mejor, en el mejor de los casos, podrían encontrarle a él y a Ruby. Así fue como empezó a leer en voz alta el contenido de la carta.



"A Pearl:


Si estás leyendo esto significa que Lax ya se ha comido todas mis reservas de comida para un mes (...) Je, es broma, aún me quedan más provisiones en mi mochila. Hablando en serio y dejando los dobles actos para cuando todo esto se termine...Se que todos debéis estar preocupados. Pero no tenéis necesidad, en serio. Estoy bien. En teoría solo iba a dejar un puñado de comida como distracción....pero Lax acabó comiéndosela toda así que tuve que pedirle el gran favor de entregarte esto.


Y ahora, lo importante ¿no? Además, estoy empezando a no ver nada, no puedo encender las luces o me descubriréis...Sé que al final lo entenderéis.


He ido a buscar a Yellow-senpai por mi cuenta. Sé que puede parecer una locura...pero no lo es. Ayer vi a todos tan tristes, tan enfadados y nerviosos...No quiero volver a ver eso y sentirme impotente, como que no puedo hacer nada para cambiarlo. Así que, lo voy a intentar. Tengo la impresión de que Sapphire también ha ido allí...o quien sabe. Pero de algo estoy seguro y es que, si aún sigue allí Ruby, por la mañana, es que mi teoría de su fuerte lazo es falsa. Y yo no me equivoco con los sentimientos.


Si estoy en lo cierto, deberíais estar preguntándoos donde está Ruby. Yo os lo diré: Seguro que ha ido detrás de Sapphire, para arreglar el error, o está más adelantado que o en este camino de derrotar al enemigo una vez por todas para que podamos estar felices todos. O al menos vosotros...


Ah, una ultima cosa. Señorita, perdóneme, pero le he cogido prestado su mapa personal y las hojas que conseguimos de la biblioteca. Creo que pueden ser de ayuda. Me lo dice algo."



-¿Qué? ¿Mi...mapa? –La morena interrumpió la lectura de su compañero para buscar insistentemente en su mochila de color blanco, apoyada en una silla al lado de su cama. Con horror y sorpresa en sus ojos, descubrió que todo lo descrito en la carta era verdad.- No están...Dia...


-Ahora Sigue Gold, no nos dejes en ascuas. –Exigió Blue, preocupada.


"PD: No os preocupéis por mí...Estaré bien, no soy tan ingenuo como para meterme en la boca del lobo sin un plan~ De todas formas, cuando leais esta carta estaré demasiado lejos como para que me alcanceis aunque os deís mucha prisa.


Nos vemos...


Dia."


"¡Y Pearl, tengo una nueva idea para nuestro próximo manzai!"


~


Pearl consiguió arrebatarle la carta de nuevo cuando hubo terminado. La releyó por encima y suspiró, con una notable mueca de preocupación y molestia. "Este chico..." Sin mucho que decir, lo único que pudo hacer es acariciar al leal Pokemon de su amigo de ojos diamantinos y colocarse bien su bandolera de cuero marrón.


-Bien. Están esperando a que vayamos a por ellos. Así que...¿Qué me decís, preparados para el viaje? –Sonrió de lado, mirando al resto con ambos brazos en jarras. Gold echó la cabeza hacia atrás, rendido.


-Perfecto...Corrijo. No son dos idiotas: Son un idiota sentimental y un idiota heroico más sentimental aún.- Al sentirse observado, no le quedó mas remedio que continuar.- Si no queda más remedio...Iremos todos. Pero ¿Acaso sabes a dónde va? En la carta no dice nada concreto.


El rubio de férrea voluntad sonrió con gran confianza.


-Sé perfectamente a dónde se dirige.


Platinum asintió y señaló la ventana del cuarto. Un precioso marco natural se dibujaba allí. El Gran Monte Corona se alzaba por encima de las llanuras y los bosques y gracias a la cercanía de Pueblo Caelestis, eran capaces de admirar con detalle todo el panorama de bosques que se tornaban en laderas yermas o con escasa vegetación.


-¿Todos preparados para una visita guiada a las montañas de Sinnoh? –Sonrió esta,corroborando la teoría del chico.


-Ajá...Por qué no. Venga~ Vamos todos a morir congelados o despeñados, ya que~ Estoy demasiado cansado como para pensar. – Gold salió por la puerta de la habitación, invitando a los demás a unirse a su gran "expedición".


-¡GOLD! Je...No le hagáis caso...-Pese a la sonrisa de Crystal, se miraron entre sí, analizantes.


Menudo viajecito les esperaba~



Continue Reading

You'll Also Like

400K 19.1K 26
El maldito NTR pocas veces hace justicia por los protagonistas que tienen ver a sus seres queridos siendo poseidos por otras personas, pero ¿Qué suce...
69K 7.5K 31
SECUELA DE JURAMENTO ETERNO DE SAL-PABLO GAVI Donde Aitana, la hija de Gavi y Dani está enamorada de Pedri, el cual le saca ventidos años y es el mej...
409K 39K 62
La noticia de que Red Bull se arriesgo al contratar a una mujer para que reemplace a Sergio Pérez luego de su repentina salida del equipo, ronda por...
63.4K 9.7K 92
Luke, un niño de 13 años amante de todo tipo de novelas, series y mangas, muere y reencarna en el mundo de los miércoles con poderes psíquicos por en...