El plan se pone en marcha.

1.3K 58 120
                                    




Los chicos dejaron de jugar con los Pokemon de la guardería y se despidieron de ellos. Yellow había estado sentada en la valla moviendo los pies en un continuo vaivén mientras veía como Red jugaba alegremente con un par de Nidoran macho y hembra. Eran un poco traviesos. El moreno la ayudó a bajar con delicadeza y también avisaron a Sapphire y a Ruby, los cuales se encontraban en una escena muy divertida. Sapphire estaba rodeada de todo tipo de pokemon muy cariñosos mientras que el pobre Ruby refunfuñaba a un lado, con los brazos cruzados y sin ningún pokemon bebé cerca. Estaba...¿Celoso? Eran tan tiernos...



Y para qué hablar de Gold, Crystal y Emerald...El muchacho de ojos dorados era el más querido de toda la guardería y casi es sepultado bajo "peluchitos" Pokemon. Crystal también había ayudado a alimentar a los pequeños y Emerald se lo pasaba en grande riéndose de su senpai o intentándolo sacar. Con los de Teselia la cosa era más relajada, se encontraron con los de Sinnoh y jugaron todos juntos. Incluso los abuelos que regían la instalación se acordaron de los tres amigos y les saludaron alegremente. Diamond se alegró al volver a ver a Manaphy y Phione.



Pero no podían demorarse mucho más, por desgracia. Se despidieron de las pequeñas criaturas con algo de pena y se dirigieron corriendo a dónde se encontraban sus senpais. La más visible era Blue, que movía los brazos como si la distancia entre ellos fuera kilométrica. Se sentaron en la misma mesa y cogieron algunas sillas para poder escuchar por igual la noticia que había conseguido la mayor gracias a sus "contactos fiables".



-Bueno, ya estamos todos, ¿Puedes decirnos a quién llamaste Blue-san? –Preguntó su pequeña amiga.



-Oh, oh, y lo más importante, ¿Dónde nos quedaremos? –Gold seguía con la ilusión de una lujosa mansión repleta de mayordomos a su servicio y bellas señoritas. Crystal notó su cara de embelesamiento y con un ligero giro de muñeca, le tiró su taza de té en la cara, provocando que el chico saliera al instante de su trance.- ¡Hey!



-A ver si despiertas.


-Ya se puso celosa...-Susurró inaudiblemente pero al parecer la chica de ojos claros como el cristal lo oyó y le regaló una mirada asesina. Muerto de miedo, decidió dejarlo pasar y seguir bebiendo su taza de zumo de bayas.


Tee hee~! Os va a gustar lo que os voy a contar. –Sonrió la castaña.


-Escúpelo.- Terció el rubio de Sinnoh, impaciente.


-Jeje...¡La abuelita de Cinthya nos ha cedido su casa mientras están en el Congreso! Al parecer se alargó un poco más...


-Eso es genial. –Sonrió muy contento Diamond.- Seguro que le quedan ricas galletas~


- Sí. –Lo apoyó con una sonrisa dulce la morena que se encontraba a su lado.


-PERO, con una condición. –Blue alzó el dedo índice. Una sonrisa pícara se empezó a dibujar en su rostro, enmarcando sus ojos azules. Todos se quedaron un poco descolocados...hasta que lo escupió.- ¡A su regreso Gold tiene que tener una especie de cita con la señorita abuela de Cinthya! JOJOJO~

~ Un verano juntos ~Where stories live. Discover now