La Presunta Posibilidad de Co...

By Crisshelle

2.1K 111 28

Me gusta tener la idea de que las cosas pasan por algo y no necesariamente cumplen una historia a través de m... More

Situación a Coincidencia
La Dulce Nocturna
Cita a Ciegas
Tu Presunta Existencia
La Pieza Adecuada
7 Años en un Día
A la Deriva del Te quiero
El Amor Podría ser un No se qué
City of Stars
Sos Poesía
Una Historia de Puntos Suspensivos
Fin de Año
Contracorriente
Parcialmente Verdadero
Solo Amigos
Distancia sobre Tiempo
Las 23 Miradas de tu Ausencia
Terapia Intensiva
Sueño de Infancia
Verdad a Medias
La Presunta Posibilidad de Nosotros
Quiero ser de ti una despedida
Encuentro Casual
Supongamos que te echo de menos
Lo que tuvimos en COMÚN
Entre las Cuatro Estaciones
El Ruido de Nuestros Pasos
Cita de las doce
Parte del Trato
Un Mosaico de Abril
Me lo contó un gato
Nuestro 25
Together Apart
Ironía
La Presunta Elección
Tiempo Fuera
El Cuento Perdido
15 Segundos
Ojos Color Sol
Di Que No Te Vas
Tus 22 Manías
Soledad Vestida De Seda
Talvez, Algún Día.
La Maldición De Conocernos
La Presunta Posibilidad de Desconocernos - Agradecimientos

S.C 2017 - Ova de Regalo

8 0 0
By Crisshelle

Tal vez ese fue el inicio de las siguiente conversación que antecedió a nuestra amistad. Una OVA de mi anime favorito. Y este capítulo, es algo así, un paréntesis de cosas que nunca nos dijimos pero quisimos hacerlo alguna vez; cosas que nunca pasaron pero nos las imaginamos todo el tiempo de diferentes formas. En realidad todos vivimos OVAs en nuestras cabezas, y a veces también en esos momentos donde es tan primavera que pareciera imposible que hubieran otras estaciones.

Hoy, noviembre, escribo esto en la previa a tu cumpleaños porque, al fin, es primavera.

Camino bajo el sol increíblemente fuerte mientras repaso las palabras que tenía escritas de memoria en mi boca. Siento que debo decirlas al verte, simplemente dejar todo ir, incluyendo el regalo que cargo en la mano. Mientras sigo tus pasos empiezo a hacer círculos con mi cabellera aumentando el nerviosismo. Fueron días difíciles tratando de decidir el regalo perfecto, y aun teniéndolo frente a mis ojos, siento que debí realmente plasmar nuestra esencia en la madera de la base. Recuerdo que la señora que me lo entregó por primera vez hace un año dijo que los mejores regalos son los que no se pueden percibir a simple vista. Y de seguro, solo tú ibas a saber que decía allí, más bien que es lo que significaba, pero en el momento de hacerlo la base se veía muy pequeña para todas las palabras así que empecé a repasarlas desde entonces y hoy mientras camino, sé por primera vez que es lo que quiero decirte.

- Hey, ¿No estamos tarde ya? - escuché a mis espaldas.

Cuando regresé la mirada, eras tú. Y tenías razón ya estábamos tarde, bastante tarde, y no solo para ir a clases.

Oculté el regalo en mi maleta mientras me detenía y te daba el abrazo de feliz cumpleaños. Talvez duró mucho, o talvez muy poco, pero era increíblemente confortable después de tanto tiempo.

- Gracias Cris. - respondiste con esa media sonrisa tan particular. 

- De nada. Feliz cumpleaños compañero.

Seguimos caminando mientras me sentía divertida ante el efecto de la palabra "compañero" en ti. Había cosas que usualmente hacía a propósito para analizar las reacciones de los demás, y a veces era personal contigo, pero últimamente todo era muy ocasional, a veces forzado, a veces vacío. Tal vez era el efecto tiempo haciendo su jugada una vez más. 

- Tengo algo que decirte - Te comenté mientras subíamos las gradas hacia clases. 

- ¿Qué cosa? 

- Te lo diré después, si tienes tiempo en el receso. 

Miraste el reloj del celular, pero no fue la hora la que atrajo tus ojos a la pantalla. Después de meditarlo un poco te diste cuenta que seguía esperando una respuesta así que asentiste y cambiamos de tema. Hablábamos de todo y nada, casi podía ser una conversación casual si no fuera porque éramos nosotros, y más que nada porque no éramos de esos. Nos mirábamos cada aspecto de forma ausente, pero nos sentíamos más presentes que nunca. Teníamos todos los detalles alrededor de nosotros, todas las palabras, los vacíos, las risas, los temas comunes y los gestos naturales. Tu sonrisa, mi forma de desviar la mirada, tu caminar orgulloso, mi paso acompasado, tu media sonrisa, mis manos nerviosas. Me di cuenta que seguíamos siendo nosotros, cada vez un poco menos. 

- ¡FELIZ CUMPLEAÑOS! - gritaron los demás al verte llegar. Ese fue el momento donde sabía que debía reformular mis palabras contigo. Toda la idea prevista se perdió levemente mientras estabas entre los abrazos que ahora sientes lejanos, olvidados. Incluso en el futuro, tal vez a mediados de diciembre, me des la razón.

Entré como quien dejaba sus propósitos al pasar por la puerta, y luego cuando te sentaste detrás mio sentía que los recuperaba solo sintiendo tu respiración en mi cabello. No estábamos hablando todo el tiempo, pero no podíamos dejar de enmudecernos de palabras. Me gustaba la forma que la vida te dio un año porque tu sonrisa brillaba. Te habías dejado la barba pero eran detalles mínimos comparado con la forma como veías ahora todo. O por la forma en que todos te veían... Como yo te veía. Estabas diferente, en muchos sentidos, y no sé si después sepa decir si me gustó conocerte así pero por ahora seguía sintiendo la esencia que alguna vez escribí durante todo este libro, y eso era suficiente para reunir el valor de decirte esas palabras, de entregarte el regalo, de cerrar la historia. 

- ¿Entonces... Tiempo? - te dije en voz baja, y asentiste ausente. 

La respuesta llegó sola. 

Hora y media después estábamos nuevamente caminando, casi escapando de la realidad de las cosas. Necesitaba decirte que te quedes aunque me vaya, o que te vayas sin quedarte a medias. No me gustaba la sensación de que todo había dependido de algo que se rompió fácilmente durante días que dejamos de hablarnos. Quería recuperar la naturalidad de hablarnos por horas de cosas que nadie entendía, o simplemente la naturalidad de hablarnos, pero nos acercábamos a un punto muerto donde la vigilancia del mundo se perdía y el nerviosismo aumentaba. Esto se llegaba a sentir irónicamente bien y mal, y eso hacía que descartara la posibilidad de naturalidad alguna entre nosotros. 

Llegamos a un corredor vacío y nos mirábamos casi tímidos. El regalo me pesaba duramente en la maleta haciéndome recordar la frase que está plasmada en la base de la guitarra. De cierta forma era una suerte que sea de madera, y más suerte aun que siguiera completa. 

Estábamos solos. 

Finalmente. 

Cuando de pronto sentí el furor de "Ahora o nunca". Tenía esos quince segundos de valentía atravesando mis labios, mientras las palabras desordenadas competían por salir una a una de formas coherentes. Mi primer ataque fue una sonrisa nerviosa donde te dije el prólogo de todo este escrito: "Tengo algo que decirte", y pasaron segundos fulminantes hasta que pude mencionarte mi verdadero propósito en tu cumpleaños.

- Quiero decirte todo lo que no he podido, ni podré hacerlo en cualquier otro momento. Siento que si no te digo lo que siento por ti en este presente, no lo haría en ningún futuro tampoco.

- Espera... - dijiste un poco nervioso - ¿De que hablas?

Me quedé pensando la mejor forma de empezar a decirlo todo e irónicamente pensé que sería preguntarlo.

- Stephen, ¿Quieres saber todo lo que tengo por decirte? ¿O mejor lo dejamos así? Nada cambiaría...

- ¡O todo cambiaría! - replicaste un poco airado - ¿Porqué hoy?

Esa era una respuesta que no tenía... No sabía por qué hoy. Porque en tu cumpleaños, entre tus amigos, con ella a lo lejos, escondiendonos de todo. No lo sabía, pero lo quería así. Quería hacerlo memorable.

- Porque... - dije dudando. - Porque bueno, hoy es tu cumpleaños y quería darte algo que no pudieses olvidar. Y así olvidaras las palabras, no pasaría igual con la emoción que tenemos ahora, como si fuera una estela de este verano en coma.

Tus ojos se posaron suavemente en los míos hasta que desvíe la mirada sonrojada. Culpé al efecto del café, y la intensidad del sol atravesando la ventana lateral, y aun así me quedé sin palabras.

Unos segundos más... No tenía mucho tiempo antes de que la valentía se me acabara, o algo más pasara. No quería que todo esto se...

De pronto sonó tu celular, y supe que el momento acabó.

- "Si, dale... Gracias" - y colgaste.

La llamada no duró nada, pero lo había cambiado todo. Tus manos estaban nerviosas, tu mirada dispersa. Estabas buscando algo, o a alguien. Sentí que finalmente ya no estabas.

- En fin... Compañero, feliz cumpleaños. Que pases excelente y cumplas muchos años más. - dije abrazándote

Acto seguido, me fui.

- Hey... ¿Eso era todo? - gritaste - ¿De verdad?

- En su mayoría si. - dije dándome la vuelta. Nos vimos a los ojos en un segundo eterno, y luego la sensación del "ahora o nunca" volvió de forma irracional a mi. - Bueno no... No lo es.

Caminé de nuevo hacia ti hasta quedarnos a un metro de distancia. Quería verte a los ojos cuando supieras que realmente estaba feliz por ti, por este día, por tus decisiones. Que realmente quería que tengas el mejor cumpleaños, y que quería verte cumpliendo muchos más. Te deseaba el éxito del mundo, que te comas con ganas cada meta que te propongas. Que cuando camines lo hagas por tu propio camino, y que no cambies ese maldito egocentrismo que siempre odié en ti, pero que también admiraba.

- Quería decirte que te quiero Stephen, como alguien que no dejaré de querer. Así pasen días, meses y años, y deje de verte, de saber que es de tu existencia... Seguiría estando si me necesitas, seguiría contestando si me escribes o si me llamas porque ya pasó el invierno, ya fuimos verano, y cada quien tiene su primavera que espero no llegue a otoño. Ya no hay frío ni tampoco calor, es solo un poco de viento que dice que realmente es bueno tenerte en mi vida. Ser amigos, o conocidos, o desconocidos que se llegaron a conocer muy bien. Eso no importa. Solo me importa que sepas que nada cambiará el hecho de que seas esa persona, y por eso siempre he de desear lo mejor para ti... Por eso, en serio, feliz cumpleaños.

"... Y felices fiestas... " pensé mientras te abrazaba. Ya sería un año de aquel papel en la cafetería de la basílica. Y solo con ver tu sonrisa supe que fue la mejor decisión tener ese papel ahí, las palabras acá, y el regalo posando sobre el velador de mi cama, donde talvez queden para siempre cuando nos hayamos ido.

Continue Reading

You'll Also Like

19.8M 1.3M 122
Trilogía Bestia. {01} Fantasía y Romance. El amor lo ayudará a descubrir quién es en realidad y su pasado hará reales sus peores miedos. ¿Podrá ell...
47.7K 3.1K 85
Mi chica e' modelo, Gigi Hadid Yo sigo invicto, como Khabib Tengo mi vida en Argentina Tengo mi gente acá en Madrid Álvaro me dice que no pare Que, e...
170K 3.5K 31
Busquemos salir un poco de la realidad imaginando historias con sus pilotos favoritos🖤
8.5M 973K 92
Donde Eithan le envía pedazos de papel a Tom para corregir su ortografía. Errores ortográficos intencionales. Se prohíben copias y/o adapt...