Anther.
- Espero un segundo, ya no estoy entendiendo. - Mire a Emell. - ¿Al chico le gustaba su amigo?
Emell rodó los ojos, luego se echo a reír.
- No lo se.
- Claro que lo sabes. - Puse una mirada acusadora. - El muy hijo de puta quiso separarlos, pero no porque le gustara ella, sino el ¿no es así?
- Anther, si quieres saber eso tenemos que ver la segunda temporada. - Puso una cara adorable. - Y luego la tercera y la cuarta.
- Bien, pero si tengo razón voy a golpearte.
Emell se echo a reír de nuevo. Se inclino un poco a mi computadora que estaba conectada a la pantalla de mi sala, puso la segunda temporada y volvió a acomodarse en el sillón poniendo sus pies sobre mis piernas. Lo observe por un momento, que lindo se veía.
- ¿Por qué todos los noruegos tienen que ser tan sexys? - Mire a Emell buscando una respuesta.
- No solo los noruegos son "sexys".
- Oh claro que si, ve a ese tipo Chris, o a Noora o a Eva. - Señale la pantalla. - No hay gente tan guapa en Orlando.
Excepto el, claro.
- Tu no eres noruego. - Lo mire extrañado, miraba la pantalla y parecía no darse cuenta de la gravedad de su comentario.
Sonreí. Solo sonrei.
Llevábamos un buen rato viendo aquella serie por la que Emell estaba loco, en cuanto la termino me llamo por teléfono llorando diciendo que la tenia que ver con el, no me negué. ¿Cómo hacerlo?
La serie era buena, que digo, era genial. Mi celular sonó, Emell paro la serie un momento.
- ¿Anther? Soy Tinna, ¿estas con Emell?
- Si ¿Por?
- Bueno, le llame y no contestaba, llevo marcandote un buen rato. ¿Qué hacían tortolitos?
- Veíamos una serie Noruega, creo que Emell olvido su teléfono.
- Si claro, como no.
- ¿Qué? Es la verdad.
- Bueno, no importa. Ya se que llevaran a la fiesta de Canille.
- ¿Qué es lo que llevaremos?
- Bueno, necesito globos amarillos, muchos. Y necesitan ser amarillos, es el color favorito de Canille. También necesito luces de navidad, procura que sean blancas o amarillas, no de colores. Y por ultimo, cigarros, compren varias cajetillas, es todo. A por cierto ¿ya cortaste tu cabello?
- Si, claro. Mañana temprano lo llevamos a tu apartamento. Respecto a lo del cabello ¿qué te parece si voy en la tarde a que tu lo hagas?
- Bien, te dejare genial.
- Eso espero, de lo contrario voy a odiarte para siempre.
- Bueno, debo irme, tengo que cocinar.
- Si, te veo en un rato.
- Oye, otra cosa.
- ¿Qué pasa Tinn?
- Necesito que Emell pueda caminar para la fiesta, no seas salvaje, tratalo bien. ¡Adiós!
- ¿Cómo di...Mierda colgó.
- ¿Era Tinna?
- Si, dijo algo que no comprendí. Ella dije que...¡oh! Ya entendí.
Mire a Emell. Luego comencé a reír. El igual comenzó a reír.
- Oye Em, tendremos que ir al centro comercial.
- A si, ¿por?
- A comprar cosas para la fiesta, corre aun es temprano.
- No quiero, tengo mucha flojera. Cargame.
Lo tome por la cintura y lo echo a mi hombro derecho.
- Oye Anther estaba jugando, basta nos miran raro ¡Anther bajame!
- Querías que te cargara. Chico, no pesas nada ¿comes bien?
Lo deje en el asiento del copiloto. Me subí en mi auto y comencé a conducir, Emell no hablaba mucho.
- ¿Pasa algo?
- No. Bueno si, no quería salir realmente, quería quedarme ahí, contigo. - Lo dijo tan bajo que tuve que esforzarme mucho para entender lo que decía.
Apreté su mejilla con dos dedos, la solté rápido.
- Oye, aun estas conmigo, solo iremos de compras.
- No, no entiendes. Solo contigo, sin gente alrededor, solo...solo nosotros.
- Bueno, después de la fiesta, estaremos un día solo nosotros ¿esta bien?
- Si, esta bien. - Sonrió como un pequeño. - Muy bien.
Llegamos al centro comercial, no demoramos mucho. Compramos los globos, las luces y los cigarrillos, tuve que explicarle a Anther que en cerio Tinna me los había pedido. Cuando pasamos por la tienda de mascotas Emell menciono que quería un perro. Subimos al auto, fui a dejar a Emell a su casa.
- Bien, llegamos.
- No veas la serie sin mi ¿vale?
- Por supuesto que no.
El sonrió, tan hermoso como solía hacerlo siempre. Quería besarle, tenia unas ganas inmensas de besarlo.
- Bueno, debo irme. Te veo mañana en la fiesta, tal vez me adelante a ayudar.
- Si, te veo ahí. Hoy me la pasa increíble, gracias Emell.
- Lo mismo digo.
Emell salio del auto y entro a el departamento, yo tuve que encender el auto y manejar hacia la casa de Tinna.
No tarde mucho en llegar, su casa no estaba lejos. Baje del auto y entre a los departamentos, toque su puerta.
- Hola Anther.
- Hola Tinn ¿Esta Canille?
- No, tengo que preparar todo aquí así que ella no puede venir.
- Sera una gran fiesta. Tenemos un gran plan.
- Un plan desastroso.
- Un plan caótico Tinn.
- Exacto, ahora entra. - La obedecí. - Tenemos que arreglar ese desastre que tienes en la cabeza.
Sonreí, ella igual. Era una chica bonita, cuando Canille nos la presento llevaba el pelo a los hombros, pero ya se lo había cortado, muy corto. Como chico, era una chica muy guapa, perfecta para Canille.
- Bien, manos a la obra.
Comenzó a cortar, mi preciado cabello caía al suelo. No podía creer lo que hacia.
- Oye Anther.
- ¿Si?
- Bueno, tu, como digo esto. ¿Tu y Emell son amigo no es así?
- Si, lo somos. ¿Por?
- Bueno, si el se llegara a enamorar de ti ¿tu que harías?
Volte los ojos aunque no podía verla, ella seguía cortando, era rápida.
- N-no se, ¿por qué pregubtas edo?
- Yo, solo, bueno curiosidad.
- Bueno, supongo que no me importaria. No es algo malo ¿o si?
- ¿Tu eres hetero, no Anther?
- Y-yo, b-bu-bueno yo. - Comencé a temblar. No no otra vez.
"Maldito maricón"
"Si vuelves a besar a ese niño le diré a papá"
"Das asco, maldito puto"
"Te romperemos la cara mariposita"
"Espero que mis nietos se parezcan a ti Anthi"
"¿Donde esta tu noviecito?"
"No te le vuelvas a acercar a mi hijo, el no es un maricón como tu"
"A Anther le gustan los niños, a Anther le gustan los niños"
"Demosle una lección al gay de Anther"
"Seguramente su papá se murió porque no aguantó a un maricón como hijo"
- ¡Anther! Oye Anther ¿Estas bien?
Todos esos insultos llegaron a mi mente en un segundo, recuerdos que creí olvidados. Amontonandose en un cumulo listos para revelarse cuando esa pregunta surgiera de nuevo.
- Y-yo, no se.
- Tranquilo, no pasa nada. Anther no tengas miedo, todo esta bien.
No, nada estaba bien.
- Si, todo esta bien.
- Lo siento mucho, no busco ser entrometida. La verdad, solo quería llegar a formular una pregunta.
Seguía cortando mi cabello.
- Ah si, ¿Cuál?
Ella corto un mechón y carraspeo.
- ¿Te gusta Emell?
¿Me gustaba Emell? Si, me gustaba mucho.
Sonreí ante la pregunta, porque sabia muy bien la respuesta.
- No se.
- Si sabes ¡Dime por favor!
- Mmmmm ¿y yo qué gano?
- Bueno, teniendo en cuenta que tengo a disposición tu imagen y atractivo, creo que deberías cooperar.
Abrí mucho los ojos ¿cómo podía ser tan mala?
- No es fácil Tinn.
- Si, si lo es.
Ella me miro y sonrió mostrando los dientes.
- Bien, te lo diré.
Ella era una chica agradable y me caía muy bien, podía confiar el ella. Podía decírselo.
- Si Tinn, Emell me gusta, me gusta mucho. Me encanta, y eso me esta jodiendo la puta vida.
Ya llego la cigarritos y droguitas 7u7 Jajaja a nadie le importa. ):
Bueno la chica de multimedia es TINNA. ¿A qué es belleza pura?
Duh, a lo que venia. Si llegaste hasta aquí gracias, te amo, te amo y te amo. MUCHO, UN MONTÓN.
Es todo, al rato le sigo, o mañana. Sean buenos, no consuman drogas. Bueno si, pero no muchas. (: