Reacción.

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¿Cómo reaccionarían al verte por primera vez?

Asta.
La primera vez que te vio fue en el examen de ingreso, ninguna mujer había llamado tanto su atención como la hermana Lily, pero al verte no pudo apartar sus ojos de ti. Había algo que llamaba mucho su atención, solo tu presencia hacía el ambiente diferente.
Quedó embobado cuando te vio derrotar a tu contrincante, una mujer fuerte y valiente, pero a la vez de apariencia dulce. Admiró que hayas tomado la práctica en serio justo como él y que hayas luchado con toda tu fuerza. Cuando tus ojos rodaron a ese chico tan peculiar sin magia los dos sonrieron instintivamente.
"Que chica tan misteriosa".—pensó. Y fue directamente a hablar contigo.

Yuno.
La primera vez que te vio fue en la base del Amanecer Dorado. El no tenía interés en las mujeres, solo quería esforzarse y hacerse más fuerte para cumplir su promesa. Pero tú habías sido diferente, la mayoría lo juzgaba por no pertenecer a la nobleza y tú en cambio lo tratabas amablemente como a cualquier otro miembro, decidiste ayudar a Klaus mostrándole a Yuno la base.
Yuno no podía dejar de pensar en las cálidas y sinceras sonrisas que hacías después de mostrarle algo. Notaba el gran interés que tenías hacía la orden.
Cuando lo llevaron hasta su habitación el agradeció y tú le explicaste que podía buscarte si necesitaba ayuda.
"Que extraña y agradable chica".—pensó mientras te veía alejarte de su habitación.

Leopold Vermillion.
Cuando te vio por primera vez fue en la orden del Rey León Carmesí, eras nueva y le llamo la atención tú forma de ser y alegría que te caracterizaba, el se ofreció a enseñarte la base, los dos eran tan similares que habían encajado perfectamente, hablaban tan animadamente que se la pasaron juntos hasta caer la noche. Cuando llegó Leopold a su habitación se recostó en su cama con una sonrisa inmensa en su rostro, el se quedó con más ganas de estar a tu lado y lo hubiese hecho si no fuese por su hermano que los separó.
"Es tan perfecta y hermosa"—pensó antes de caer dormido.

Luck Voltia.
El te conoció en una de sus misiones, sintió tu inmenso poder y fue directamente hacía ti. Cuando lo viste le dedicaste una sonrisa, sin embargo aunque fueses mujer y que incluso tu sonrisa hubiese tocado su corazón te pidió luchar contra él. Obviamente le dijiste que no y pediste que lucharan juntos para derrotar a la bestia que estaba delante suyo. El acepto y los dos acabaron con todas las que había dentro del templo, estaba tan emocionado y feliz de haber encontrado a una chica tan fuerte y genial que le gustara pelear como a él, todo el camino no dejo de pedirte que lucharan, lo que no sabía era que formabas parte de una orden siendo la vice-capitana.
Como no te conocía te pidió que se encontraran una vez más, tú le prometiste que algún día lo visitarías.
"Será un honor luchar contigo la próxima vez"—fueron sus últimas palabras con una energética sonrisa. Cuando regreso a la base de los toros negros no dejó de hablar de ti y cada día tiene la esperanza que aparezcas en otra misión.

Finral Roulacase.
El te conoció en la ciudad, ese día se encontraba libre así que como costumbre intento salir a conquistar chicas. Te vio en la vitrina de una florería comprando, cuando te miro quedó sorprendido, nunca había visto una chica tan hermosa ante sus ojos, eras justamente su tipo, no dudo en acercarse a coquetearte pero había tantas personas que era imposible caminar, justo cuando iba a llegar contigo se dio cuenta que ya no estabas, suspiro fuertemente y le dio un golpe a la pared, te había dejado ir, sin embargo nunca se rendiría hasta encontrarte. Ahora cada uno de sus días libre, se queda en el mismo lugar esperando volver a encontrarte.

Black Clover [One Shots].Where stories live. Discover now