Black Clover [One Shots].

Escenario.

Advertencia : Lemon.

Estabas celebrando tu tercer aniversario con tu novio, Fugoleon Vermillion. Pero este en especial era el primero que por fin podrían pasarla juntos. Siempre estaba tan ocupado que no podían hacer nada más que hablar un rato, tú comprendías muy bien su situación ya que era alguien importante en su orden de caballeros.

Pero estabas muy emocionada que al fin podrían disfrutar un rato juntos. Ahora mismo té encontrabas en casa con tu novio. Estabas cocinando la cena mientras hablaban de algo, tu pareja te ayudaba haciendo una que otra cosa, ser tan caballeroso era algo que te había cautivo desde el principio.

—Creo que lo haces mejor que yo.—dijiste riendo al ver que era muy bueno en la cocina.

—No lo creo, tú me superas por mucho.—dijo dándote un pequeño beso en la cabeza.

Tú ya te habías encargado de la cena, ahora estaban preparando un postre. Un lindo pastel de chocolate, estabas segura que este chico era el hombre con el que querías pasar todo el resto de tu vida, era lo que cualquier mujer soñara.
Fuerte, atractivo, educado y todo de él cada vez te parecía más increíble. Podías pasar toda tu vida observándolo sin cansarte.

—Que sucede, tengo algo en la cara?—dijo al ver que no despegabas su mirada de él. Tu rápidamente te sonrojaste y trataste de ignorar lo que había dicho.—Se derretirá más eso si solo sigues viéndome.—empezó a reír.

—Todo es tu culpa...—empezaste a recoger las galletas que se habían tostado de más.

—¿Mi culpa?—preguntó curioso.

—Si... si no fueras tan llamativo y lindo no haría que estuviera observándote todo el tiempo.—empezaste a batir más rápido sonrojada. El sonrió felizmente.

—Pues yo también tengo enfrente de mis ojos a una chica muy atractiva y linda.—levantó un poco tu mentón para que lo observaras a los ojos, no sabías cuanto más aguantarías todos sus encantos. El de por si ya era uno.

Podían quedarse en esta posición mucho tiempo, tenerlo tan cerca te hacía muy feliz, era tan lindo de todos lados. Hasta que escucharon unos golpes en la puerta, los dos extrañados fueron a ver que era lo que sucedía. Tu novio fue quien abrió la puerta.

—Necesitamos su presencia! Apareció un ataque cerca del bosque y pidieron su ayuda!—gritó el joven caballero mágico que parecía muy nervioso.

Tu miraste un poco resentida a tu novio, el se dio cuenta de inmediato. Por alguna razón siempre sucedía algo que nos les permitía pasar su aniversario juntos, era mucha coincidencia, pero no podías hacer nada. Después de todo era su obligación y no había nada que hacer. Tú le sonreíste tratando de no parecer tan decepcionada por la situación, el se acercó rápidamente a ti.

—No tardaré mucho está bien?—te respondió algo decepcionado, obviamente el también prefería pasar el tiempo contigo y sentía algo de culpa ya que por el siempre terminaban este día como cualquier otro. Tú le asentiste, sabías que obviamente no sería algo rápido.

—Solo ten cuidado...—observaste ponerse su capa y te dio un pequeño beso en tus labios para salir apresurado con el otro caballero.

Tú suspiraste cansada, la cena ya estaba lista y el postre también. Siempre pasaba algo como eso. Ahora pasarías su aniversario de nuevo sola. Te recargaste en la mesa y observaste el vino que había en ella. Te acercaste para tomarlo, lo observaste por unos momentos y lo abriste para servirte una copa.
Ni siquiera te gustaba tomarlo pero en estos momentos te daba cierto alivio... Querías estar despierta cuando el llegara, querías verlo...